La mayoría de víctimas tenía entre 18 y 30 años. Además 3,420 eran hombres y 562 mujeres. El año recién pasado estuvo marcado por las masacres
David Marroquín.02 de Enero. Tomado de El Diario de Hoy.
Los ataques armados en contra de grupos de personas y las más de 20 masacres que sobrepasaron los 130 muertos marcaron los altos índices de violencia que prevalecieron a la largo de 2010, que cerró con una cifra fatal de 3 mil 985 muertes violentas.
Fuentes policiales aseguraron que 2010 será recordado como en el que se cometió la mayor cantidad de matanzas, cuyo número de víctimas sobrepasaron las tres en cada hecho; a pesar de que las autoridades de la Policía aseguraron ayer que los homicidios disminuyeron en un nueve por ciento con respecto a 2009.
Sin duda que el hecho violento que desveló con la crueldad y la barbarie con la que actúan las pandillas se registró la noche del 20 de junio pasado. Pandilleros de la mara 18 que delinquen en la colonia Montreal, en Mejicanos, quemaron un microbús de la ruta 47 con 30 pasajeros, el conductor y cobrador en su interior.
En el atentado murieron 17 personas y otras 15 sobrevivieron, pero quedaron con graves secuelas de por vida.
Pese a los esfuerzos de la Policía, que ahora cuenta con el apoyo de la Fuerza Armada, los índices de criminalidad están muy por arriba de los niveles de violencia que se tuvieron entre 2006 y 2008, en los cuales el promedio no sobrepasó los ocho homicidios por día.
Ayer las altas autoridades de la Policía revelaron en conferencia informativa que la delincuencia tuvo una reducción del seis por ciento con respecto a 2009.
Con relación al comportamiento de los homicidios, los jefes policiales aseguraron que hubo 397 asesinatos menos que en el año 2009 en el que hubo 4 mil 382 personas asesinadas.
No obstante, a pesar de esa disminución, 2010 se ubica como el segundo con mayor violencia después de haber terminado el conflicto armado en el país.
En el informe policial se detalla que 3 mil 420 de los asesinados eran hombres y 562 mujeres.
Además la mayor parte de las víctimas, 1,866, estaban en edad productiva, es decir, entre los 18 y los 30 años. Refiere el informe que una buena parte de los asesinatos se cometió entre las 4:00 de la tarde y las 11:00 de la noche; asimismo los días viernes, sábado y domingo se convirtieron en los más violentos.
Del total de asesinatos registrados el año pasado, en 2 mil 923 de los homicidios se utilizaron armas de fuego.
Emigración de Pandillas
Para muchos sectores y analistas, las reducciones de los homicidios y las extorsiones coincidieron con el incremento de soldados en las 29 zonas con alta incidencia criminal y que eran asediadas por las pandillas.
Además la Fuerza Armada ha tomado el control de los nueve centros penales más problemáticos y donde se encuentran recluidos los cabecillas de las pandillas.
El subdirector de la Policía, Mauricio Ramírez Landaverde, sostuvo que la baja en la mayoría de los delitos se debe a "los efectos de los planes y a los dispositivos que empiezan a dar resultados positivos. Vamos a profundizar las medidas para este año y que podamos mejorar los resultados que hemos tenido el año pasado".
De acuerdo al informe de la Policía, los departamentos que en años anteriores aparecían con altos índices de criminalidad como San Salvador, Santa Ana, Sonsonate y La Libertad, para el año 2010 tuvieron reducciones significativas de homicidios y extorsiones.
Sin embargo, otros departamentos como La Paz, Morazán, Chalatenango, Cabañas y Cuscatlán, experimentaron leves aumentos de crímenes.
Para ese fenómeno, Ramírez Landaverde tiene una explicación.
"La focalización de los esfuerzos en las zonas de mayor incidencia ha hecho posible que en la mayoría de lugares como San Salvador, Santa Ana, Sonsonate, Colón y San Miguel; todos han bajado y eso haya tenido sus consecuencias en el área rural", reconoció Ramírez Landaverde.
Otras fuentes policiales explicaron que la presión que ejerce la Fuerza Armada en 29 zonas con alta incidencia de homicidios y extorsiones ha obligado a las pandillas ha emigrar hacia las zonas rurales.
Sin embargo, de los 3 mil 985 crímenes del año pasado, 2 mil 209 se cometieron en las zonas urbanas y 1,956 en el campo.
Para este año la situación delictiva se complicó en las áreas rurales de la zona sur de San Salvador como Panchimalco y Rosario de Mora, así como en el sector de el cantón El Guaje en Ilopango, donde la mayoría de pobladores tuvo que abandonar sus casas por temor a las pandillas.
Reacción de las maras
Ante el aumento de las masacres registradas el año pasado, el subdirector de Seguridad Pública, Hugo Ramírez Mejía, respondió que la violencia ejercida por las pandillas durante el año recién finalizado se puede explicar desde la lógica de que esos grupos criminales quisieron hacer sentir su "poderío" como reacción a las acciones antidelincuenciales y penitenciarias que impulsó el gobierno.
"Una buena parte de las masacres estuvieron ligadas a las pandillas que buscaron hacerse sentir ante la presión que recibían de parte de la Policía y la Fuerza Armada, ya sea en las calles como en las cárceles", dijo Ramírez Mejía, quien agregó que también el anuncio de la aprobación de la ley antipandillas habría provocado una reacción violenta de los cabecillas de las pandillas que preveían que con las capturas de los pandilleros se le iba a quitar su "base social".
Asimismo dijo que la reforma del Artículo 345 del Código Penal que penaliza la pertenencia a las pandillas también contribuirá en la reducción de la criminalidad.
Por su parte, Ramírez Landaverde sostuvo que las reducciones de los índices delictivos los anima a revisar los planes operativos para hacer los ajustes necesarios.
Pocas condenas
Un estudio de la organización Freedom House, citado por la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades) en su informe del primer semestre del año 2010 señaló que el 80 por ciento de los homicidios no son castigados, menos del 20 por ciento va a juicio y solo el 3.8 por ciento de los asesinatos resultan condenados.
Para muestra un botón, cifras de la Fiscalía General de La Libertad señalan que sólo un homicidio de cada diez que se registraron en la zona norte de ese departamento es llevado ante los tribunales de justicia.
Agregó que 327 de los 532 homicidios que se cometieron en el departamento de La Libertad se concentraron en cuatro municipios como Quezaltepeque, San Juan Opico, Colón y Ciudad Arce.
En el informe, Fusades cuestionó los pocos recursos con los que cuenta la Fiscalía General y la reducción de su presupuesto.
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