LPG-¿Qué le pasa al FMLN?

“¿Cómo entender la torpe defensa del FMLN a unas reformas electorales que a todas luces rayan con la Constitución...?

Escrito por Roberto Rubio.07 de Abril.Tomado de La Prensa Gráfica.

 

En los ochenta, el Ejército salvadoreño, apoyado por Estados Unidos, no pudo derrotar al FMLN, en buena medida a causa de que este, más que de armas y municiones, se abastecía de organización y mística. La entrega y disciplina eran forjadas en los yunques de una férrea ideología, para unos, y/o de nobles valores como la justicia y la democracia, para otros. Por manos de muchas personas pasaron miles o millones de dólares, y nadie, que se sepa, hizo fortuna personal de ello. Sus alianzas privilegiaban fuerzas progresistas y decentes, y se evitaba hacerlo con fuerzas retrógradas y oscuras. Con todos los defectos e hipocresías que pudieran existir, la ética era un asunto importante.

¿Qué le pasa hoy en día al FMLN? Existen actitudes y comportamientos, en particular en un segmento de su dirigencia, que olvidan sus mejores orígenes o no han querido refrescarlos.

¿Cómo entender su alianza parlamentaria con una derecha tan cuestionada como GANA? Esto, que para fuerzas progresistas o de izquierda democrática les valdría por menos que ello el calificativo de traidores, vendidos o derechizados, bajo el manto de ciertos miembros de la cúpula, aparece como una alianza justificada en aras de las conquistas populares. No es correcto que solo en manos de Midas, hasta la suciedad que no se permite tocar a otros, sea considerada oro. Las alianzas deben hacerse con fuerzas que trabajan cerradamente por la democracia, la transparencia, la decencia, la justicia, la equidad, el bienestar de las mayorías.

¿Cómo entender que algunos, también en nombre del interés del pueblo, se hayan convertido en grandes empresarios o se alíen con algunos de ellos? ¿Cómo entender que se utilice al Estado, como lo hicieron ciertos empresarios de derecha, para amasar riqueza? Si de los “millones en la guerra” no surgieron afortunados, sí están haciendo nacer los “millones en la paz”.

Dolería mucho, y sería un golpe serio a la democracia, que ello signifique un deslizamiento hacia esquemas parecidos al corrupto autoritarismo nicaragüense, y que la “Izquierda S.A” llegue a determinar los destinos de la izquierda política nacional. Por ello, el FMLN, así como apoyó la Ley de Acceso a la Información, debe apoyar reformas a la ley de enriquecimiento ilícito, promover un buen y probo presidente de la Corte de Cuentas, reforzar el control patrimonial de sus miembros por medio de su Tribunal de Ética, entre otras medidas.

¿Cómo entender la torpe defensa del FMLN a unas reformas electorales que a todas luces rayan con la Constitución y su agresiva reacción a todas las organizaciones ciudadanas críticas a ellas con el simplismo interesado y trasnochado de siempre, de que son de derecha o manipuladas por ella?

El FMLN es la principal fuerza política del país, y sobre ella reside la mayor responsabilidad sobre nuestro incipiente desarrollo democrático. Los que todavía creemos que en el Frente existe mucha dirigencia y base consecuente y honesta, y que tiene posibilidades de convertirse en verdadera y novedosa fuerza de cambio, estamos obligados a plantear estas y otras incómodas interrogantes, con sentido crítico pero constructivo (que sin duda disgustará e irritará a muchos).

¿Qué le pasa al FMLN?