“Los compromisos adquiridos en la Cumbre obligan a revisar lo que hacemos en educación. Solo se cumple sacando gente fluida en computación, internet, inglés y mandarín. Sigamos el ejemplo de Martin Varsavsky en Argentina.”
Escrito por Rafael Castellanos.08 de Diciembre. Tomado de La Prensa Gráfica.
La Cumbre Iberoamericana de Mar del Plata dejó como principal apuesta un fuerte compromiso con la “Educación para la Inclusión Social”, plan de acción con 11 metas para alcanzar hasta el año 2021 (¿nos dice algo la fecha?). Algunas declaraciones aspiracionales, otras concretas, ambas sin embargo, constituyen compromisos adquiridos por los países firmantes, que deben seguirse.
Algunas metas: 1) Erradicación del analfabetismo para 2015. 2) Promover la universalización (todos) de la educación de calidad como un derecho humano fundamental, inalienable, a ser protegido por todos los estados iberoamericanos (¿ayudan otros o cada cual librando lo suyo?). 3) Garantizar la cobertura universal, gratuita de la educación primaria y secundaria.
Esto obliga a revisar lo que estamos haciendo y alinear las acciones del Estado al compromiso adquirido. La educación es patrimonio de todos, no solo de quienes dirigen temporalmente las instituciones, ni de política partidaria, así que debe trabajarse en ese espíritu.
Cuando se habla de la educación como la mejor forma de aumentar las posibilidades de todos y de los desaventajados de superar la marginación, parecemos estar de acuerdo. El problema comienza cuando se define una educación de calidad, hay menos consensos. Se agrava al diseñar y ejecutar planes y programas.
La continuidad es un déficit permanente. Cada ministro, al llegar, promueve un nuevo plan o el mismo con diferente nombre, no importa cuán bueno fuera. Es fácil de comprender la debilidad humana, pero muy difícil justificarla en este tema tan crucial.
Parecía que habíamos superado ese atavismo con el Plan 2021: había consenso universal, teníamos un plan de largo plazo como en los países que progresan. El FMLN y ARENA firmaron acuerdos generales y puntuales comprometiéndose a seguir el plan si llegaban al poder en la siguiente elección (noviembre de 2008, fui testigo).
Lamentablemente el Frente, no Funes, no cumplió su palabra. El ministerio decidió hacer otra cosa. Evaluando lo que se ve con énfasis difusos, clientelismo político con maestros al eliminar el programa más celebrado mundialmente, EDUCO. Estimación ligera del beneficio de la medida fallida de los uniformes, subsidia a muchos que no lo necesitan, no logra mayor asistencia y permanencia de los alumnos... ese presupuesto sería mejor utilizado entregando mejor educación.
Aún es tiempo de corregir. En educación no podemos darnos el lujo de pensarla políticamente, ideológicamente o con egos. No importa quién haga bien las cosas, apoyaremos con entusiasmo las medidas correctas.
Educación de calidad significa alineada con la realidad, preparar a los receptores para obtener empleos y de mejor calidad, en este mundo global en que compiten por ellos con jóvenes de todo el mundo. Que se puede, es claro, la selección de fútbol playa nos da un excelente ejemplo.
La educación debe ser de primer mundo y comprender sin excepciones, manejo fluido de computadoras y TIC, acceso barato o gratis a internet y computadoras, manejo fluido de español, inglés y mandarín.
Preguntémonos si estamos alineados en esas metas. Probablemente no y qué necesitamos para alcanzarlas.
Comparto un ejemplo espectacular, Martín Varsavsky, exitoso empresario argentino-español a escala mundial, creó hace 10 años Educ.ar en Argentina (vean el link), un portal educativo para democratizar y modernizar los sistemas educativos e inició una revolución en la educación argentina, donando $1 por cada estudiante, para potenciar la educación haciendo llegar internet a todas las escuelas y formar a los maestros para que puedan usarlas para beneficio de los muchachos.
En 10 años, el portal es propiedad del estado argentino, tiene más de 50 mil recursos educativos de acceso gratis y muchos logros. Parte fundamental es la capacitación de docentes, que están muy atrás de los jóvenes en destrezas.
Varsavsky tiene muchas otras inactivas geniales en España y Europa, pero este es un gran ejemplo de asocio privado-público, sin lucro privado, pero para el país, es ejemplo a seguir. Hay tanto que hacer en educación...
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