La Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social, FUSADES, lamenta que, al cierre del presente año, El Salvador mantenga todavía elevados niveles de inseguridad a pesar de los esfuerzos de las autoridades por combatir la delincuencia, que sigue dejando el promedio a diez familias diarias en luto.
Escrito por Iván Pérez.30 de Diciembre. Tomado de La Página.
FUSADES, a través de Departamento de Estudios Legales, recomienda al gobierno de El Salvador estudiar una Ley de Peligrosidad, pues la Constitución de la República en su artículo 13, inciso 4 establece que “por razones de defensa social, podrán ser sometidos a medidas de seguridad reeducativas o de readaptación, los sujetos que por su actividad antisocial revelen un estado peligroso y ofrezcan riesgos inminentes para la sociedad”.
Y es que a juicio de FUSADES la más reciente Ley de Proscripción de las Pandillas no está siendo ejecutada por las autoridades y que no es agenda para el gobierno del presidente Funes, quien la sancionó el pasado mes de septiembre, cuando los pandilleros promovían un paro al transporte público.
Una Ley de Peligrosidad, dice FUSADES, la figura jurídica del estado de peligrosidad no ha tenido desarrollo normativo, a pesar de ser una herramienta creada por los constituyentes. Por eso se espera que el próximo año se genere un debate serio de esta propuesta.
Basados en épocas pasadas, 1950, FUSADES, dice que El Salvador ya ha hecho uso de este recurso legal que tiene como objetivo apartar y reeducar al sujeto peligroso. En esa lista ingresaban las personas mayores de 18 años: ebrios, pederastas, vagos, méndigos, rufianes, proxenetas, sujetos pendencieros, suministradores de drogas y bebidas alcohólicas, entre otras conductas.
Las medidas que estableció esa ley se encuentran la detención, observación, expulsión (para el caso de extranjeros) y multas.
Para aplicar esta ley se creó el Juzgado de Peligrosidad y se señaló un procedimiento sencillo: peritajes de expertos y luego la sentencia del juez, la cual solamente admitía el recurso de revisión ante la Cámara de Segunda Instancia.
FUSADES lanza la propuesta, pero dice que antes debe analizarse las conductas que pueden considerarse como peligrosas, de tal manera que se justifique la intervención preventiva y reeducativa.
Finalmente FUSADES señala que si los gobiernos anteriores hubieran hecho uso de este recurso se hubiera evitado la proliferación de grupos antisociales como maras, huelepegas, prostitución abierta, entre otras conductas.
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