El presidente de la República y el ministro de Gobernación firmaron un decreto que veta toda forma de discriminación sexual.
Escrito por Fernando Romero.14 de Mayo. Tomado de La Prensa Gráfica.
Se prohíbe incurrir, propiciar, defender o apoyar acto o práctica que constituya discriminación por identidad de género u orientación sexual.”
Decreto Ejecutivo 56, artículo 2
La cuestión de la discriminación no es negociable. Hay que dar el ejemplo. Estoy segura de que la Iglesia está contra la discriminación.”
Vanda Pignato, secretaria Inclusión Social
La primera dama de la República y secretaria de Inclusión Social, Vanda Pignato, anunció ayer que ya fue firmado el Decreto Ejecutivo 56, mediante el que la Presidencia emite disposiciones para evitar toda forma de discriminación en la administración pública, por razones de identidad de género y orientación sexual.
Pignato aseguró que no se trata de un decreto producto de un consenso nacional sobre el tema de identidad de género y de orientación sexual en específico; sin embargo, “las instituciones, incluidas las iglesias, estamos de acuerdo en que ya no se puede tolerar la discriminación de ningún tipo”, dijo la primera dama.
La funcionaria agregó: “La cuestión de la discriminación no es negociable. El Gobierno tiene que dar el ejemplo y es su obligación constitucional”.
El artículo 2 del decreto ejecutivo, firmado por el presidente de la República, Mauricio Funes, y el ministro de Gobernación, Humberto Centeno, prohíbe a las instituciones y demás organismos que integran la administración pública “incurrir en algún acto o práctica, o fomentar, propiciar, defender o apoyar cualquier acto o práctica que de manera directa o indirecta constituya una forma de discriminación por razón de la identidad de género y la orientación sexual”. El decreto incluso determina que para efecto de las evaluaciones a los funcionarios públicos del Ejecutivo se tomará en cuenta la asunción y el respeto de estas disposiciones.
Pignato, ante reacciones contrarias que “podrían tergiversar” la no discriminación sexual, dijo: “Que se entienda bien, el Gobierno de El Salvador no está realizando una promoción del homosexualismo, del bisexualismo o del heterosexualismo. Tampoco está haciendo una promoción del transexualismo o transgenerismo. Estas son decisiones que en ejercicio de su libertad pueden ser adoptadas en búsqueda de la realización individual. El Gobierno está haciendo lo que la Constitución le obliga a hacer: prohibir toda forma de discriminación, y en este caso, por la orientación sexual e identidad de género”.
Pignato recordó que la empresa privada también tiene un papel en la búsqueda de la inclusión social; sin embargo, para ella, en el tema de discriminación sexual, el Gobierno es el que tiene que dar antes el ejemplo, e incluso tomar lección del sector privado.
“En una empresa le miden su capacidad para el puesto y así lo contratan o no. No se fijan antes en la orientación sexual”, afirmó.
Aborto y matrimonios gay
La secretaria de Inclusión Social aclaró que esta nueva disposición del Ejecutivo “no tiene nada que ver” con el tema del aborto ni con el tema de los matrimonios entre personas homosexuales.
“Es muy dañino, muy malo para la democracia, querer mezclar esos temas. No estamos promocionando ninguna conducta, no estamos promocionando el aborto. Eso no es obligación del Estado. La obligación es defender a todos los ciudadanos y sus derechos contra la discriminación”, detalló Pignato.
La funcionaria presentó ayer en un foro con personas de múltiple orientación sexual la nueva Dirección de Diversidad Sexual.
Nueva dirección en la SIS
La Secretaría de Inclusión Social (SIS) presentó ayer una nueva dirección a su cargo.
La secretaria de Inclusión Social, Vanda Pignato, anunció ayer en el Foro de Inclusión Social y Diversidad Sexual la creación de una nueva dirección.
Su nombre es Dirección de Diversidad Sexual, que tendrá una función técnica, y que “contribuirá a la identificación de prácticas de discriminación y a corregirlas, dentro de la administración pública”.
Pignato aclaró con adelanto que esta nueva dirección a cargo de la Secretaría de Inclusión Social no será “un departamento de quejas”.
Explicó que para atender violaciones a derechos humanos ya hay otras instancias. La dirección sería una especie de inspectoría interna.
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