Hay que leer más, informarse bien, sacudirse complejos y malquerencias, ayudar a que nuestro vecindario sea tranquilo y ordenado, seguir los caminos de Dios
Editorial.04 de Enero. Tomado de El Diario de Hoy.
Hay un año para todos y un año que pertenece a cada uno, el que construimos con esfuerzo, con buenos actos, con ganas, con esperanza y rogando a Dios. Está el año de los esforzados y el de la gente buena, al igual que el de los indolentes y de los perversos. Hay uno para los que aprenden, se capacitan y van mejorando con el paso del tiempo, como hay otro para los que vegetan y pasan sin pena ni gloria por la vida.
Vivimos todos juntos y, por tanto, es vitalmente importante abocarnos a la común tarea de lograr que en los próximos doce meses se corrijan lacras, se enderecen erradas políticas y se afiance la institucionalidad y el manejo ético de la cosa pública. Es de buenos ciudadanos contribuir a que el país que compartimos funcione lo mejor posible.
En las sociedades democráticas nadie pretende estar en posesión de la verdad ni menos imponer al resto, sin discusión y análisis, sus puntos de vista, sus ideas ni formas de trabajo y de conducta. Es contrario a la democracia querer fijar patrones culturales, regimentar lo que la gente tiene que leer y oír, o forzarla, como en la China de Mao, a vestirse y comportarse como peones en un tablero de ajedrez.
Buenos propósitos para ser mejores
Urge reactivar la economía, atraer nueva inversión y devolver la confianza a los productores para que ellos, a su vez, generen empleo y riqueza. No se olvide que una cosa es lo que pinta la teoría y otra distinta lo que las realidades determinan; los gobernantes, como aquellos en posiciones de liderazgo, deben tener siempre los pies en la tierra y saber distinguir entre lo que son los buenos deseos y los sueños, de lo que en verdad se puede lograr. Como señaló el gran pensador Karl Popper, es poco lo que podemos cambiar en la vida, y eso lo conseguiremos poco a poco. A este respecto el gobierno debe prepararse a que las proyecciones hechas sobre los ingresos fiscales que la reforma tributaria pretende, se queden cortas, lo que obligará a revisar las políticas fiscales para no quebrar la economía.
A lo largo de los últimos meses ha habido mucho desencanto sobre las posibilidades de superar la crisis y solucionar el espantoso problema de la criminalidad. Hay que articular la política económica y los programas sociales en la manera más racional, porque de lo contrario vienen a ser como los palos al aire de niños vendados que le pegan a todo menos a la piñata. Es urgente que el equipo económico del Ejecutivo se asesore mejor y que se ponga paro al desmantelamiento de las instituciones con los despidos del personal experimentado.
Al inicio de cada año personas y familias fijan metas y buenos propósitos: aprender nuevas cosas, corregir malos hábitos, cuidar los centavos, ser más pacientes, mejorar el trato con cónyuges, hijos, amigos y compañeros de trabajo. Además hay que comer sano, bajar de peso, hacer más ejercicio y no empinar el codo ni fumar. Dentro de las circunstancias esfuércese cada uno para ser un mejor individuo y ciudadano.
Hay que leer más, informarse bien, sacudirse complejos y malquerencias, ayudar a que nuestro vecindario sea tranquilo y ordenado, seguir los caminos de Dios.
elsalvador.com :.: Hagamos todos juntos un país libre y próspero
Por que no se pronuncian por los asesinatos en Cabañas? La respuesta esta inmediata: porque uds no creen en la democracia, uds todavia creen en esos metodos tradicionales de la derecha de salirse con la suya asesinando. No mencionen en vano a la democracia y a la libertad para reducirlas a privilegios de unos pocos y sufrimiento los demas.
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