Escrito por Manuel Sorto. 24 de Enero. Tomado de Contra Punto.
Parte del debate sobre la gestión del nuevo gobierno en El Salvador
SAN SALVADOR - Querido Álvaro, creo que es medio complicado estar seguro de ninguno de los intríngulis de este desmadre. No creás que porque estoy aquí la veo más claro que vos que estás allá por los madriles, como le dice la Chavela Vargas al Joaquín Sabina. Pero es evidente que las agencias de publicidad de nuestro país tienen algo que ver. Y a primera vista con mucha razón. Y ya vas a ver por qué. Pero voy a tratar de recordar como se inició el Polisgate, como lo llamó Juan José. Vamos a ver dijo un ciego.
Hace unos días, el no se cuánto de enero, El Faro informó que todo el “pastel publicitario” gubernamental será controlado y distribuido por una sola, y además novísima empresa, con el ridículo y ofensivo título y nombre de Polistepeque. Y digo ofensivo porque esa empresa está a la vez controlada por un brasilero, y un argentino que la dirigiría aquí. O sea, no se trata de gente o empresarios que hayan bajado, o subido, de algunos de esos nuestros pueblos o ciudades que terminan en peque o en nango. Quizás Polistenango hubiera al menos rimado con tango (por aquello del argentino), y bueno, estamos hasta los que ya sabés con aquello de que nos den tango. Verdí se llama el argentino, ¿te imaginás? Del tango se nos asciende, o desciende (para seguir la óptica de cada quien: de si subís o bajás) a operísticos! El brasilero, un tal Joao creo, pues por lo menos nos suena a Santana, aquel de Black Magic Woman (no al que vendió como la mitad de México a los gringos). Vieras como se divierte uno aquí. Y tenemos razón fijate, somos cachimbones, nuestro país es cachimbón. Pero ya vas a ver.
El presidente respondió que le parece que ninguna de las agencias de publicidad existentes en el país tiene la altura o nivel para hacerse cargo de la imagen del gobierno salvadoreño (que no de otra cosa se trata). ¡Te imaginás la trompa de nuestros publicistas o dueños de agencias “nacionales”! Funes los puso como el c... , los ningunéa, vaya. Y vieras como lo tratan de arrogante. Desde cuando estaba en el mundo de noticieros de la tele, dicen, desde la época de sus soberbias emisiones. Que eran soberbias. Yo las vi por primera vez a señalamiento de mi mamá, “hoy venite para estar aquí a tal hora, y sin falta, me dijo, porque quiero que conozcas a Mauricio”. Te juro que no la oía hablar así de alguien desde cuando apareció el Ingeniero Napoleón Duarte en su vida. Esto (lo de Mauricio) debe de haber sido allá por el 2001, mínimo; el año de las torres (nuestras pirámides, por ejemplo, fijate, aunque diez aviones se les dejaran ir de un solo, te juro que aguantarían mejor, no creés? Hablo de las grandes de por allá arriba o de allá abajo. Pero ese es otro pisto. Se me soba). Y al ver su emisión pensé que por primera vez teníamos periodismo de altura y debate en nuestro país.
Ahora bien, tomando en cuenta que esas mismas agencias de publicidad del país con sus guapos y elegantes ejecutivos y creativos (sic), son las que de seguro se encargaron de preparar, organizar y bien cobrar por orquestar (y mal) desde antes de la precampaña presidencial todas las megatoneladas de insultos y calumnias y el remolino “profesional” de levanta falsos y creación y bombardeo táctico y estratégico (según ellos) de las toneladas de mierda antes mencionadas y los ataques de la sucia campaña de Arena tanto contra Funes como contra el FMLN, y Sánchez Cerén en especial: y en eso yo le agarro la onda al presidente fijate (y como al presidente la constitución le concede el derecho a ese tipo de selección sin tener que pasar por el tenerlas que sacar a concurso o licitación...). Se las metió, te voy a decir. Vieras, bien trompudos dice la mara que andan los ninguneados. Hasta a algún tribunal o comisión creo que se fueron ya. Parece que Funes y el Frente también reinvindican su turno del ofendido.
¿Es que se imaginaban que después de toda su campaña, el nuevo gobierno iba además a darles su confianza y premiarlos con el « pastel » de todo el paquete de su “publicidad”? Es mucho pedir, no te parece. Infringen todas las leyes del respeto social entre gente civilizada (se supone) y quieren además premio y hasta con chonga. Casi como los bancos de hace un rato, no te parece?. Es pedirle al gobierno que además de víctimas (o ex-víctimas?) de sus infames campañas de desprestigio, de calumnias e inventos de apenas hace un rato, vengan ahora y se comporten como estúpidos y los recompensen...
Jajá, y ya viste también que como “cereza en el pastel”, viene la denuncia de un periodista o reportero de El Faro el 10 de enero que asegura que el 4 de enero alguien que « … dijo ser Carlos Funes, hijo del presidente de la república... » le profirió amenazas insultantes y ofensivas. Y sigue el artículo de El Faro « Tres días después, el jueves 7, una persona que ha prestado seguridad al hijo del presidente reclamó en un sitio público al mismo periodista por la misma publicación. "¿Te han felicitado por lo de Polistepeque?", le preguntó, mientras le tocaba la cara. » (por cierto, fijate que el citado prestador de seguridad de Carlos, yo creo que es uno que comenzó a los 11 años como correo en la guerrilla y a los 12 ya era combatiente y para acabar de joder le cayó el despido para su cumpleaños).
Me imagino que Carlos debe seguir en bartolina. Castigado, mirando una esquina de su cuarto, hasta bizco debe de estar viendo el ángulo del rincón y con un bonete de cartulina y de ¡castigado!. No te sabría decir si es rojo (el gorro de cartulina), no olvidés que soy daltónico, o daltoniano; aquí uno ya ni sabe y es facil alienarse y si se descuida termina uno en la pista del pleito de putas (y putos, me imagino). Nuestra vocación nacional es el chambre, bien lo sabés vos que hasta postalitas periodísticas te envían. Jejé. Pero ya me estoy orinando otra vez afuera del tiesto. Y fijate que según mis fuentes, Carlos no hizo la llamada, lo que confirma la versión del periodista: alguien que « dijo ser Carlos Funes ». Pero eso sólo es un detalle en este valle de lo que ya sabés, que ni Manlio, que ahí sigue a pata y en bus, pero con La Magnífica en una bolsa y San Ernesto Interiano en la otra, por aquello de las de hule.
El 16 por la mañana, casi a mediodía, presidente de la República pidió perdón en nombre del Estado a todas las víctimas de la guerra y sus familiares por las tropelías del estado; y por la tarde el partido FMLN hizo lo mismo a nombre del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional. Yo espero a que los que lo hicieron lo reconozcan y pidan el perdón, y ahí veremos. Y Arena que ni tiempo tiene para darse cuenta que necesita cambiarse de calzoncillos, lleno de furacos cada vez más desgarradores. Parece que es churria y de la buena; por andar comiendo babosadas. Corn flakes y hot cakes. Se les sigue aflojando todo. Se deberían de ir de vacaciones a Miami; hacer yoga o tirarse por la variante zen, que bien les caería; o que Rubén Zamora los invite a la India. Por cierto, Roberto Quezada parece que está pensando en encargarle (a Rubén) una pareja de nuevos elefantes bebés para el zoológico, porque la Manyula ya tiene 57 años y el promedio de vida en cautiverio para l@s elefant@s es de medio siglo. El huevo no va a ser conseguirlas allá, si no, ver como logra que le quepan en la valija diplomática.
En cuanto a la cultura pues parece que el equipo se anda entendiendo de maravilla. Bien galán parecen todos, conducidos con guante blanco y mano de fierro por nuestra señora de la cultura. Ya viste que el otro día nuestro Poe Kijadurías dice en uno de los videos de ContraPoint, que “las ideologías podían ser el problema al que había que tenerle cuidado”; o algo así. ¿Te acordás como a puro huevo tuvimos que conformar el Frente, nos gustara o nos diera picazón; y el desmadre entre marxistas y marxistas-leninistas y trotskos y anarquistas y prochinos y prosoviéticos y procubanos, en una babel que ni los mismos que se autonombraban o autodefinían así sabían a veces las diferencias que los recetarios decían, o dicen... Imagínate al pobre Roque en semejante desvergue. Y porque si no nos unimos y conformamos en el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, perdíamos la guerra. Así de simple. Todos, todititos, perdíamos esa guerra a la que nos llevó nuestra rebelión que esta vez no fue de los colgados como en el 32. El 22 de enero como hoy comenzó aquello. A dios lo que es de nosotros y a nosotros lo que es del estado. El Estado somos Nosotros. Jejé. Pero es la verdad y vamos a recuperarlo.
Y a propósito de la cultura, me encontré con una chamaca que trabaja donde nuestra señora que me dijo que « si la burocracia estatal impide el desarrollo cultural y que se realicen los objetivos propuestos, pues se tenía que crear una estructura paralela (sic) del gremio donde los protagonistas sean los hacedores y creadores, con una dinámica completamente diferente. Los creadores se tomarán los espacios, dijo, y los pintarán de los colores que les plazca”. Bien poética, no te parece? Y radical. Debe ser de las musas que publican en el 3000, quien sabe. 25 añines, me dijo.
Es que estamos bien impacientes, y con razón: son cinco siglos sobre las espaldas de comer de aquella que bien sabemos. Problemas de acueductos, decía Roberto Bolaño para nombrar los desenfrenos de la enfermedad que lo mató; y a propósito de acueductos fijate, quien se está entendiendo bastante bien con ellos es el Gerson. Imagínate que el otro día hasta el presidente de la asociación de azucareros lo felicitó por un puente-acueducto logrado para desbloquear gente, aguas y camiones cargados de caña. Lo vi en la tele, y entonces debe ser cierto.
En fin, pero ahí continuamos recuperando poco a poco la identidad porque también nosotros (si es que nos da la gana en el futuro), podríamos rotular los tufosos billetes con nuestra, digamos, confianza en dios, pero en náhuat; por ejemplo. Y un jaguar y un venado a un lado y al otro, o cosas por el estilo. Con que no se vuelva a llamar colón la vil moneda ya es bastante. Cadejo, o Tepezcuintle, o por ahí. Se trata de buscarle como ganarle ahora la guerra a la inmundicia y lavarle no solo la careta al paisito, incluida la mental, y que creo y espero y confío que es lo que el Frente y Mauricio están tratando de hacer, aunque por ahora con muletas de apoyo o compañeros de ruta, como se dice. Si no, por el momento, y en la coyuntura actual, se nos puede desarticular o trabar la nave. Y donde manda comandante no manda carroteniente.
Total que el país, con todo, parece que va bien, y no te preocupés por lo del matrimonio que según dijo David en ContraPoint, se está consolidando entre el Frente y Mauricio. Y el David, pues ya sabés que nunca se le van los deseos en el vacío. Hasta pareciera jesuita. O chino. Jajá. El coco en la derecha y el chacalele en la izquierda, dice. Así, con una mano en el tenedor y el cuchillo en la otra, como si nada. Uno se divierte con el David. “Fijate -le dijo a mi hijo- que estos -y me señaló con la quijada-: reaccionario, me decían”. Me soltó la pedradita, jodiéndome. Y por supuesto, y vos lo sabés, siempre están aquellos que se desgañitan sobre o bajo el agua pidiendo la revolución total, cuando no logramos tomarnos el palacio de invierno en su momento. No se pudo; eso es todo. Y gracias a dios quedamos en “tablas”, empate técnico, digamos, y no como en toda Latinoamérica a excepción de Cuba y Nicaragua. También eso es memoria, pero, úta!!!, eso fue en otra época y en otro siglo y en otro momento del proceso latinoamericano y mundial.
Bien impacientes estamos, y con razón: los cinco siglos que todos sabemos. Y pesan. Los eternos ofendidos nos dicen.
Bueno, mi querido Álvaro, al ratín quizás hablamos de lo de darle una revisada a la magna carta que desde hace algunos días anda en boca de algunos juristas e intelectuales y otros de la sociedad civil y que va y se le desliza a nuestro Vice ahí por el 21 de enero, y que más debiera dejarnos a nosotros que nos ocupemos de eso y él de su reforma educativa porque ¡boom!, pegaron el brinco los desconchabados areneros, o lo que queda de ellos. Pero ya están casi cholcos fijate. Ya amaneció por allá y te deseo un amanecer vivo, como dice el Juancho, que sabe un chingo de estos bolados.
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