El canciller ecuatoriano contradijo a los presidentes de Venezuela y Bolivia, quienes decían estar convencidos de que la mano del gobierno estadounidense estaba detrás de la rebelión policial del 30 de septiembre. El ministro dijo estar seguro de que ni Obama ni alguno de sus funcionarios tuvieron algo que ver.
06 de Octubre. Tomado de El Faro.
Quito, octubre 5. El canciller Ricardo Patiño dijo este martes creer firmemente que el presidente de Estados Unidos Barak Obama no tuvo "nada que ver" en la sublevación policial de la semana pasada en Ecuador pero agregó que sí desconfiaba "de los grupos de poder" de ese país.
El presidente venezolano Hugo Chávez desde Caracas culpó de la sublevación al gobierno de Estados Unidos, mientras el mandatario boliviano Evo Morales aludió al Departamento de Estado de los Estados Unidos y adujo que "desde allá se gestan golpes de estado".
"Creo firmemente que el señor Obama no habrá tenido nada que ver; confío que sus principales autoridades tampoco", dijo el canciller Patiño a corresponsales.
"No puedo decir lo mismo de los grupos de poder que hay en Estados Unidos y que no son controlados por el gobierno, y no puedo decir lo mismo ... de otro tipo de personas", señaló, pero sin identificarlos, al referirse a la rebelión de los policías el 30 de agosto, quienes retuvieron a Correa por 10 horas hasta ser rescatado a sangre y fuego por el ejército.
"Pensábamos que esta (la administración del presidente Correa) iba a ser una excepción en la historia y que se podía hacer una revolución sin contrarrevolución, que se podía hacer una revolución absolutamente en paz, bueno... pero parece que no es posible", añadió.
Correa, que se define como cristiano de izquierda y seguidor del "socialismo del siglo 21", asumió el mando 2007 por cuatro años, pero convocó a elecciones adelantadas que le permitieron extender su período hasta 2013.
"Las fuerzas a las que se les fueron todos los beneficios, las prebendas, los negocios terribles que tenían, que se llevaban la patria al peso, no están dispuestos a hacer en paz", aseveró, sin identificar a grupo alguno.
Consultado sobre qué se debe esperar tras esa sublevación, Patiño respondió: "Es la radicalización, la profundización de la revolución, pero al mismo tiempo el consenso, no tiene por qué estar peleado lo uno con lo otro".
Explicó que para lograr aquello, se tiene previsto "profundizar en políticas que tengan que ver con el acceso a los medios de producción para los campesinos, fortalecer esquemas de apoyo a la producción popular, solidaria, profundizar los procesos de asociatividad, respaldar actividades como las finanzas populares que permitan tener acceso al crédito".
Agregó que "es muy importante llamar a la unidad de los ecuatorianos para sostener la estabilidad de este país y del proyecto democrático ... e invitar al mundo entero, a los intelectuales, artistas, políticos, ciudadanos del mundo, a que vengan a respaldar a darle un cobijo a este pequeñito país ... para respaldar su democracia y un proyecto soberano y progresista como el que estamos impulsando, ojalá tengamos acogida".
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