Claudia Solórzano.24 de Octubre. Tomado de Diario Co Latino.
Empezar las obras de agua y saneamiento, caminos rurales y varios proyectos de la reforma de salud no será tan rápido como desearía el Gobierno, pues los diputados de la Asamblea Legislativa deben ratificar el préstamo de 150 millones de dólares.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) suscribió ayer, con el gobierno salvadoreño, al menos tres contratos de préstamo para el desarrollo de áreas sociales en los sectores más pobres del país.
Sin embargo, el millonario monto necesita por ley la ratificación de la mayoría calificada de diputados, es decir, los 56 propietarios, quienes tienen en sus manos la bandera de salida para ejecutar las obras este año o retrasarlas hasta el 2011.
“Le pedimos a los señores y señoras diputadas que acompañen al Gobierno en este esfuerzo por lograr mejores condiciones de vida para la población”, instó el Presidente de la República, Mauricio Funes, quien sirvió de testigo de honor en la firma de los empréstitos. En el rubro de salud, los salvadoreños serían beneficiados con la creación del Sistema Nacional de Emergencias Médicas y el Sistema Único de Información, el fortalecimiento de la red de laboratorios y la instalación de los nuevos modelos de atención departamental.
“El préstamo de los $ 60 millones servirá para reforzar la reforma de salud, pero se le dará prioridad a los equipos comunitarios para llevar la salud a los lugares más remotos”, afirmó la Viceministra de Salud, Violeta Menjívar.
Las redes integradas de servicios de salud se instalarán en los departamentos de San Miguel, Chalatenango, Sonsonate y toda el área Metropolitana.
La Gerente General, del BID para Centroamérica, Gina Montiel, afirmó que El Salvador está enfrentando con eficiencia los desafíos del desarrollo, al buscar fórmulas que atenúen la crisis económica y la brecha de desigualdades sociales.
“Con el financiamiento buscamos dotar al sector público de recursos que le permitan emprender programas para acelerar su políticas de inversión y así reactivar la economía”, expresó Montiel.
Al menos $44 millones ($24 millones provenientes del Fondo Español y resto del BID) se invertirán también en el mejoramiento de la calidad del agua potable y saneamiento en zonas rurales. Actualmente, la cobertura del agua potable en 20 municipios prioritarios es del 35.5%, pero tras la inversión se extendería al 67%, en los lugares calificados de pobreza extrema.
Entre los contratos de préstamos también resalta la suma de $35 millones para el programa de Caminos Rurales, con énfasis en zonas con potencial productivo.
“El transporte por carretera es el modo esencial de movilización, sin embargo, de los 6 mil 414 kilómetros de la red vial nacional, solo 3 mil 167 kilómetros, casi el 50% permanece sin pavimentar”, detalló la representante del BID.
La ejecución de los programas se enmarca dentro de las prioridades estratégicas del Plan Quinquenal de Desarrollo, promovido por el Gobierno de izquierda desde 2009.
“Estas acciones están encaminadas a proveer servicios básicos de calidad y con una mayor cobertura en las áreas sociales, que contribuyan a reducir los índices de pobreza”, dijo el Ministro de Hacienda, Carlos Cáceres.
En ese sentido, el Jefe de Estado reiteró el llamado a los parlamentarios: “Necesitamos los votos antes de finalizar el año”.
La idea es poner “manos a la obra” de inmediato, dado que el BID está listo para apoyar a los equipos nacionales y dinamizar la economía a través de la eficiente inversión pública.
“Esperamos que la semana entrante se pueda someter al pleno de la Asamblea Legislativa”, puntualizó el Ministro de Hacienda luego de suscribir los empréstitos.
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