LPG-Editorial-Es fundamental regular el endeudamiento

 Desde hace tiempos es imperioso poner en práctica una política que integre cuatro áreas fundamentales: reactivación, ingresos, gasto y endeudamiento.

Escrito por Editorial.07 de Octubre. Tomado de La Prensa Gráfica. 

 

Durante este ya prolongado período de posguerra, el desempeño económico nacional ha estado marcado por los altibajos. Hubo, al comienzo, un brote de optimismo, desatado por la liberación de energías luego del fin del conflicto bélico, que todo lo distorsionaba. Después, se comenzó a dar el vaivén entre la desaceleración y los ligeros repuntes. Entretanto, decisiones estructurales como la dolarización han traído a la vez cosas muy buenas y riesgos no tratados. En todo este período de posconflicto se ha venido incrementando la improvisación de medidas gubernamentales, y a la vez se ha hecho muy poco por incrementar las sanas regulaciones ordenadoras de fondo, tanto en lo público como en lo privado. La crisis detonada en 2008 nos sacudió con intensidad, y vino a agravar tanto las condiciones económicas como la situación fiscal.

Desde hace tiempos es imperioso poner en práctica una política que integre cuatro áreas fundamentales: reactivación, ingresos, gasto y endeudamiento. Al arribar a la conducción nacional el Gobierno surgido de la alternancia, viene a sumarse la presión por desarrollar más obra social, cuando hay menos recursos disponibles. Ya teníamos una enorme carga producida por la política de subsidios; ya se andaba por las ramas peligrosas en cuanto a financiamiento, con figuras útiles en su momento pero de viabilidad restringida, como los famosos fideicomisos; ya la deuda pública estaba en zona límite; y en tales circunstancias queda poquísimo margen de maniobra. Y la salida aparentemente fácil y hacedera es seguir endeudándose.

Se sigue hablando de pacto fiscal, que es lo que naturalmente más le interesa al Gobierno; y, desde otros sectores, se habla a la vez de disciplina del gasto público y de transparencia de la gestión gubernamental. Aunque las cosas apremian, aún no hay esfuerzos concretos para viabilizar lo que sería un pacto que revitalice los ingresos, sin dañar los tejidos productivos ni las finanzas ciudadanas. En la línea de aportar propuestas específicas, la Fundación Nacional para el Desarrollo FUNDE, con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación para el Desarrollo, ha presentado un borrador de Ley de Endeudamiento Público, que en 14 artículos busca generar un marco legal para poner orden en esa área tan vital y delicada para el desarrollo de la nación.

De entrada, en el texto propuesto se dice que la ley tiene por objeto establecer los principios y criterios generales sobre los cuales se fundamentará la contratación de endeudamiento por parte de las instituciones del sector público, tanto dentro como fuera del país, y de inmediato se consignan las formas del endeudamiento. Se reconoce como entidad rectora de la ley al Ministerio de Hacienda, a quien le correspondería elaborar el Programa Financiero Plurianual del Sector Público No Financiero SPNF, así como el correspondiente a cada ejercicio financiero, con la respectiva Ley de Endeudamiento Público Anual. Esto es básico para saber qué se pretende y cómo se pretende en relación con el financiamiento y con el endeudamiento, para ya no seguir “a salto de mata”, con todos los problemas, dudas y desfases que eso acarrea.

El proyecto también contiene criterios para la contratación de la deuda pública, con precisiones para cada caso. Se establece una Comisión de Vigilancia de la Deuda Pública, así como la obligación de informar y la rendición de cuentas. Es una propuesta que debe ser considerada a fondo, para encarrilar esfuerzos hacia el endeudamiento realmente responsable y sostenible.

Es fundamental regular el endeudamiento