20 de Octubre. Tomado de Diario Co Latino.
Hay que ser exactos, no todos los empresarios del transporte están en la lógica de continuar poniendo en aprietos ni al actual gobierno ni a los usuarios. Pero, pese a ser pocos, son capaces de crear un caos, al que se unirían otras fuerzas oscuras, como ya ocurrió en el paro del transporte realizado a principios del mes próximo pasado.
Ese paro, por supuesto, tenía otros objetivos: crear un caos y poner en jaque al gobierno. Por supuesto, ese propósito no lo lograron, pues, las autoridades actuaron como debieron hacerlo.
Hoy, Genaro Ramírez, un reconocido empresario, al frente de uno de los gremios del transporte público, ha amenazado con un paro de sus unidades, mañana, si el gobierno no se compromete, o bien a aumentar el subsidio, o autorizarle un incremento en el pasaje a 50 centavos de dólar.
En otros años, y con otros gobiernos, los transportistas se han unido no sólo para exigir aumento al pasaje, sino, también, para exigir un subsidio.
En los años que el galón de diesel subió hasta cinco dólares, el gobierno en turno se vio obligado a otorgar hasta $800 y $400. Posteriormente, a raíz de que el precio del crudo bajó sustancialmente, y por ende el precio del galón de combustible, el gobierno bajó a la mitad el subsidio, tanto para buses como para microbuses.
Obviamente, los empresarios del transporte ven en el subsidio el mejor negocio de sus vidas, pues, no solo obtienen ingreso por la vía del pasaje diario, sino por el subsidio del gobierno, o sea, de los impuestos que pagamos cada uno de las y los salvadoreños.
En un afán de encontrarle una salida definitiva al tema del transporte, el actual gobierno montó una mesa de diálogo del transporte, que, según las autoridades del Viceministerio del Transporte ha dejado importantes acuerdos, que podrían, una vez concluido el trabajo, resolver el problema del transporte en forma definitiva.
Creemos que con empresarios como Genaro, el problema no se resolverá, y que el gobierno debe trabajar siempre un “plan b”, que debería consistir en nacionalizar parcialmente el transporte colectivo.
Es decir, cada empresa o asociación del transporte colectivo que haga paros o incrementos no autorizados, debería suspendérsele definitivamente el permiso de la línea, y nacionalizarlo.
El transporte colectivo es demasiado estratégico para dejarlo al libre mercado, sobre todo en manos de empresarios irresponsables.
Según algunos conocedores en la materia, con el subsidio el gobierno podría montar un servicio público del transporte. Hay que meterle competencia, desde el Estado, a los empresarios, para que se quiten la idea, de una vez por todas, de sangrar al gobierno y a los usuarios.
El transporte municipalizado o estatizado debería ser la gran apuesta de este gobierno del cambio, y así quitarse los dolores de cabeza provocados por los caprichosos empresarios. Si Genaro Ramírez se va al paro el jueves, hay que decomisarle las unidades del transporte y cancelarle el derecho de línea, para qué contemplarlo más, es perder el tiempo y dejar de hacer cosas más importantes para el futuro de este país.
Es lamentable la posición de este sector, yo soy empresario de buses y realmente si se gana no como antes pero se gana, el problema es que este grupo siempre es avaro y ademas no es lo economico el presidente de AEAS lo que quiere es ser diputado y por eso es todo el alboroto.
ResponderEliminarsaludos.