Comentarios mas recientes

2010/05/15

Salvadoreños en el Mundo- El Seguro Social de El Salvador, ni seguro, ni social

Por Miguel Ángel Espinoza. 14 de Mayo. Tomado de Salvadoreños en el Mundo.

Hace treinta años cuando comencé a trabajar en un despacho contable, utilice por primera vez los servicios que presta el Instituto Salvadoreño del Seguro Social, por mi afición al fútbol me doble una mano, y cuando llegué a trabajar el día lunes a la oficina el contador me vio la mano inflamada y me mando al Seguro Social.
Llegue al Seguro a las nueve de la mañana y para no hacerles largo el cuento Salí 14 horas después o sea a las 11.00 de la noche, con una venda en la mano y un tubo de linimento, ese día me hice el propósito de no ir nunca más al Seguro, que yo recuerde después de 30 años así fue, lamentablemente para cientos de miles de personas la suerte no es la misma y tienen la necesidad de asistir al mentado Seguro Social.
Es el caso que la semana pasada una compañera de trabajo fue a pasar consulta por un dolor en la rodilla, entro a las 10 de la mañana y salio a las ocho de la noche, el tratamiento fue extracción de liquido de la rodilla, un tratamiento de media hora en una clínica particular, lo único que hay que desembolsar el pago de la consulta del especialista. Del anterior caso me entere por que un familiar fue a pasar consulta el viernes pasado por un dolor en la espalda, como es una persona de más de 70 años estaba preocupada por el dolor que le aquejaba desde hace ya algún tiempo, llego el mismo viernes a las ocho de la mañana y la ingresaron a las nueve de la noche, trece largas horas después sin poder salir a comer y sin recibir alimentación por no estar ingresada todavía, o sea que en buen Salvadoreño aguanto hambre todo el día.

Cuando la ingresaron para observarla le aclararon que no habían camas disponibles, que por lo tanto para mientras se podía acomodar en una silla de ruedas, ya se imaginan ustedes con un dolor en la espalda y pasar la noche en una silla de ruedas, en el pasillo donde estaba mi familiar habían por lo menos quince personas en las mismas circunstancias, esperando a ser ingresadas, unas en camillas otras en sillas de ruedas y las con menos suerte en bancas, la mayoría gente de la tercera edad, la escena hace que al más fuerte se le estruje todo, y nos recuerda que somos un país pobre echado a perder, o que quien administra el Seguro es pobre de pensamiento.
No me imagino cómo estas persona pasaron la noche en bancas y camillas, esperando ser ingresadas, mientras tanto no comienzan hacerle ningún tratamiento, además como no están ingresadas no les sirven comida, mi familiar ese día de la consulta no había desayunado, no almorzó y como la ingresaron después de servida la cena no ceno, a eso de las ocho de la noche al manifestar ella que no había comido todo el día solamente le pusieron un suero. Este relato puede parecer exagerado, pero es más crudo de como lo he contado, para miles de asegurados recibir este pésimo servicio es lo más normal del mundo y sus voces parecen no ser escuchadas por nadie, al conocer estos dos casos, llego a la conclusión que después de 30 años el Seguro sigue con el mismo pésimo servicio.
A propósito del Seguro Social el Gobierno del Presidente Funes esta anunciando por todos los medios de comunicación que van a incorporar al Seguro Social a los trabajadores y trabajadora domesticas, que según ellos manifiestan que pueden ser por lo menos 100,000 personas “beneficiadas”, esta noticia parece ser muy humana, muy justa para este segmento de la población que jamás ha gozado de beneficios sociales y provisionales. Lo que no me parece humano y justo es que si el Seguro Social esta colapsado en su servicio con la población que actualmente atiende, me parece un vil engaño decirle a la gente que le reconocen que su trabajo es digno y que hoy después de tanto tiempo de abandono se van a incorporar al Seguro Social.
Cómo se puede jugar con los sentimientos de las personas de esa manera, antes de engañarlos se debió buscar superar las enormes deficiencias en la atención actual, y generar una nueva capacidad para atender a los nuevos asegurados.
Estoy convencido que las personas del trabajo domestico se merecen tener servicios de salud y de pensiones, pero hacer lo que esta haciendo el gobierno del Presidente Funes es como él dice, un populismo barato.
Cambiemos El Salvador y construyamos el país que soñamos, pero con honestidad.

Salvadoreños en el Mundo: El Seguro Social de El Salvador, ni seguro, ni social

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios que incluyan ofensas o amenazas no se publicaran.