Aunque el pasado martes ya dedicamos un espacio de nuestro blog para hablar sobre el 112º Congreso de Estados Unidos, decidimos escribir más sobre el tema, concentrándonos sobre lo que nosotros creemos serán las relaciones, sobre todo de la Cámara de Representantes, con nuestro país y la región en general.
Escrito por Ernesto Rivas Gallont.09 de Enero. Tomado de La Prensa Gráfica.
Lo primero que hay que entender es lo significativo de la votación de noviembre del año pasado. En el 111º Congreso, la Cámara de Representantes estaba compuesta por 255 representantes Demócratas y 179 Republicanos. Hoy los Republicanos tienen 242 representantes y los Demócratas 193, una pérdida de 62 miembros.
En el Senado, los Demócratas continúan teniendo la mayoría, pero de 56 senadores en el 111º Congreso, hoy bajan a 51. Los Republicanos suben de 42 a 47. Los independientes continúan siendo 2.
En cuanto a América Latina se refiere, la pareja que hay que observar de cerca es a la representante Ileana Ros-Lehtinen y al congresista Connie Mack, ambos Republicanos de Florida, la primera presidenta del Comité de Asuntos Exteriores y el segundo, presidente del Subcomité de Asuntos del Hemisferio Occidental.
Ros-Lehtinen nació en Cuba en 1952, fue electa la primera mujer hispanoamericana en el Congreso de Estados Unidos en 1989 y es una de las voces más conservadoras de la Cámara de Representantes.
En una entrevista en 2006, Ros-Lehtinen dijo que ella vería bien que Fidel Castro fuera asesinado, aunque después la congresista dijo que sus declaraciones fueron tomadas fuera de contexto. Mack, por su lado, ha tratado insistentemente en agregar a Venezuela a la lista de países que apoyan el terrorismo.
Ambos representantes colaboraron en las campañas de ARENA de 2004 y 2009 para infundir miedo a los votantes si el FMLN ganaba las elecciones. El 13 de marzo de 2009 LPG publicó una nota informando que el congresista Mack, junto con otros miembros Republicanos, había firmado un documento en el que exponían las razones de por qué se considera un riesgo que el FMLN ganara las elecciones, y sugería que habría que revisar el TPS, las remesas y la seguridad de Estados Unidos.
Los pares de Ros-Lehtinen y Mack en la administración de Obama serán la secretaria de Estado, Hillary Clinton, para la primera y el académico chileno-americano secretario auxiliar de Estado para el Hemisferio Occidental, Arturo Valenzuela, para el segundo.
No se espera que haya choques frontales entre los legisladores y sus pares en el Departamento de Estado. Normalmente, las relaciones entre los órganos del gobierno son respetuosas, pero Ros-Lehtinen tiene la facultad de convocar audiencias de su Comité para interrogar a Clinton sobre cualquier tema que se le ocurra. Lo mismo puede hacer el congresista Mack con Valenzuela.
El Comité de Relaciones Exteriores del Senado, que preside el senador John Kerry, tendrá que retomar el nombramiento de la señora Mari Carmen Aponte como embajadora en El Salvador, cuando en diciembre venza el período para el que fue nombrada por el presidente Obama en lo que se conoce como un “nombramiento en receso”, cuando después de 8 meses no se logró desentrampar los obstáculos puestos por los senadores Republicanos Jim DeMint, de Carolina del Sur, y James Risch, de Idaho.
Volviendo al tema central de esta nota, no hay duda que las preferencias políticas del nuevo liderazgo de la Cámara, sobre todo en las comisiones de Asuntos Exteriores y del Hemisferio Occidental, han sufrido un cambio profundo, pero de allí a que ellos traten de alterar el panorama político nacional hay mucha distancia que recorrer y lo más probable es que no ocurra nada espectacular.
Lea más sobre el tema, hoy en mi blog, http://blog.netorivas.net
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