Giffords, un blanco figurativo de la derecha, se convirtió el sábado en el blanco real de un pistolero que le disparó en la cabeza y mató a por lo menos otras cinco personas. La representante resultó gravemente herida.
10 de Enero. Tomado de El Faro.
Washington (AP) — Los políticos de todas las corrientes ideológicas escucharán en su conciencia la advertencia que les hizo la legisladora demócrata Gabrielle Giffords, diez meses antes de ser baleada, para que moderaran su retórica.
Ha sido poco más de un año de política cruda, con enojo que se esparce fuera de control en todos los ámbitos, y algunos candidatos y activistas comienzan a utilizar abiertamente metáforas de armas.
Giffords, un blanco figurativo de la derecha, se convirtió el sábado en el blanco real de un pistolero que le disparó en la cabeza y mató a por lo menos otras cinco personas. La representante resultó gravemente herida.
Se desconoce la razón que tuvo el agresor para dispararle.
Sin embargo, el alguacil Clarence Dupnik del condado de Pima en Arizona sugirió "que toda esta hostilidad" en el discurso político reciente podría estar relacionada con el tiroteo del sábado.
"Esto puede ser libertad de expresión, pero no sin consecuencias", dijo el jefe policiaco a los periodistas.
Cualquiera que haya sido la razón política, el tono violento del debate nacional ciertamente generará un mayor escrutinio.
"Sabemos que la política se ha vuelto un asunto demasiado personal, demasiado sucio y probablemente demasiado peligroso", afirmó Jonathan Cowan, presidente del grupo demócrata centrista Tercera Vía. "Quizás este acto despiadado nos ayude a devolverle algo de sentido a nuestro discurso público".
Después de ocurrido el tiroteo, los recién instalados líderes republicanos en la Cámara de Representantes postergaron su votación programada para el miércoles, la cual busca descartar la nueva ley que reforma los servicios de salud, un tema central en las críticas de Giffords y de muchos otros demócratas en los últimos dos años. Los legisladores de ambos partidos se vieron profundamente afectados por el atentado a la representante.
Muchos legisladores, particularmente los demócratas, sintieron que el debate durante el 2009 y 2010 en torno a estas reformas en ocasiones se salió de control. Todo comenzó en las reuniones de políticos con la ciudadanía a mediados del 2009, cuando algunos críticos advirtieron sobre la existencia de "paneles de la muerte" gubernamentales.
Giffords, de 40 años, estaba entre los legisladores que denunciaron al menos 42 amenazas o actos de vandalismo en el primer trimestre del 2010, un incremento con respecto al año anterior, indicaron las autoridades.
Casi todas las amenazas se basaron en la costosa ley de reformas a los servicios de salud que Giffords y otros demócratas lograron aprobar a pesar de una feroz oposición republicana.
Tiroteo en Arizona trae a la luz excesos en retórica política - ElFaro.net
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