Comentarios mas recientes

2011/01/18

EDH-Derrotando la frivolidad y la hipocresía

 Manuel Orlando Cabrera Candray.18 de Enero. Tomado de El Diario de Hoy.

Los salvadoreños que amamos nuestra patria en libertad, en democracia y en un auténtico Estado de Derecho, poco a poco estamos derrotado la frivolidad y la hipocresía de los autodenominados "intelectuales progresistas".

De esos que el pensamiento único que los guía, además del dinero y el poder, es que lo saben todo y que condenan la política sana, mientras practican la demagogia, afirmando que en la praxis política "todo se vale" y que "el que avisa una traición no es traidor".

Cada día somos más los salvadoreños que trabajamos resueltamente por nuestras familias y por nuestro país en todos los campos y con esto estamos consiguiendo que estos "intelectuales progresistas" no mercantilicen con su falaz discurso una sociedad en la que no quede lugar para la cultura del trabajo en sentido positivo y auténtico.

Desde hace más de 30 años estos "progresistas" han venido trabajando para que no hablemos del valor de lo moral y de lo ético en su fundamental esencia. Nos han querido imponer el relativismo, la idea de que todo es igual, lo verdadero y lo falso, lo bello y lo feo, que el alumno vale tanto como el profesor, que no hay que reprobar a los malos estudiantes para no traumatizarlos. Nos han querido hacer creer que la víctima cuenta menos que el delincuente, que la autoridad está agonizando, que las buenas maneras ya no sirven de nada y que han terminado, que no hay nada sagrado, nada admirable, ni nada respetable.

El lema de estos "progresistas" es y ha sido VIVIR SIN COMPROMISOS NI DEBERES Y GOZAR TODO LO QUE SE PUEDA A COSTILLAS DE LOS QUE TRABAJAN Y GENERAN LA RIQUEZA NACIONAL. Han querido sin poder lograrlo, terminar con la escuela de la búsqueda de la excelencia, del patriotismo, y del civismo, han atentado contra las buenas costumbres y la ética.

Estos pseudo-intelectuales progresistas son los pensadores de la izquierda hipócrita, los mismos que celebran el triunfo del depredador sobre el emprendedor, los que apoyan los grandes privilegios y lujos de sus funcionarios, que aborrecen la meritocracia y premian la truculencia y la incapacidad, que atizan el odio de clases, que atacan la familia tradicional, la sociedad y nuestra forma y sistema de gobierno.

Esa izquierda hipócrita está en la política, en los centros de estudio, en el gobierno, en los medios de comunicación, en la economía, en los sindicatos, en gremiales, en fin se han extendido como metástasis peligrosas en los diferentes tejidos de la vida nacional.

Le han tomado el gusto a las mieles del poder y se aferran a él con discursos relativistas y mentirosos, volviéndose capaces de pactar con el mismísimo Satanás por continuar en el poder, y han puesto en crisis la cultura del trabajo honesto y dignificante, por eso son generadores de una crisis moral. Defienden los servicios públicos pero jamás usan los buses ni van al mercado, hablan de hospitales públicos y se avergüenzan de consultar sus dolencias en ellos, hablan de amor a la escuela pública pero mandan a sus hijos a colegios privados. Aman las zonas marginales pero jamás viven en ellas, discursan desenfrenadamente cuando se captura un holgazán peligroso, pero no aceptan que se instale en su barrio o colonia.

Por lo anterior los salvadoreños debemos rehabilitar la cultura del trabajo, del orden, debemos volver a los antiguos valores, del respeto al derecho ajeno, de la cultura de paz y de los deberes antes que los derechos, acabar con el sofisma que los delincuentes son buenos y la policía es mala, como si la sociedad fuera siempre culpable y el delincuente inocente.

elsalvador.com, Derrotando la frivolidad y la hipocresía

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios que incluyan ofensas o amenazas no se publicaran.