Escrito por Luis Membreño.15 de Noviembre. Tomado de La Prensa Gráfica.
“Si queremos sacar adelante al país, si queremos que haya más empleo, más ingresos... debemos cambiar para mejorar.”
Normalmente lo que se busca es cambiar una situación poco satisfactoria por otra que sea mejor. Lo que nunca se busca es cambiar para empeorar, pero al menos se busca cambiar para no empeorar, es decir para mantenerse similar.
En las circunstancias actuales del país y con el “gobierno del cambio” la gran pregunta que todo mundo se ha venido haciendo es ¿cuál es el cambio? La respuesta, después de casi 18 meses de gobierno, parece irse decantando porque el gobierno del FMLN está haciendo cambios que están empeorando las condiciones de vida de los salvadoreños y lo que es peor, está generando un ambiente negativo y de pronóstico reservado para 2011 y de ahí a las elecciones de 2012.
Hablar irresponsablemente de un golpe de Estado imaginario que solo existe en la teoría de la conspiración de los que siempre han vivido en eso, aun matando a sus propios compañeros; hablar irresponsablemente de desdolarizar el país como si se tratara de cambiar los precios en un supermercado; vivir amenazando al “gran capital”, entendiéndose como aquellos que ganan más de $75,000 anuales, con nuevos impuestos, con la declaración patrimonial para supuestamente perseguir a evasores y narcotraficantes que son los que ni siquiera declaran y a quienes el Ministerio de Hacienda “no conoce” porque no los tiene en su base de datos, no generará un cambio para mejorar.
Si queremos sacar adelante al país, si queremos que haya más empleo, más ingresos, mayores salarios, más impuestos, más progreso y estabilidad social, debemos cambiar para mejorar. El FMLN, el presidente Funes y su gabinete deben comenzar a hablar de todos los cambios que el país necesita para garantizar que haya seguridad física, que no esté proliferando el crimen organizado, que el Gobierno no se siga endeudando a pasos agigantados, que no se maneje de manera populista los incrementos de sueldos en el sector público y privado, que no se siga con una campaña de querer descalificar al sector privado que produce el 100% de la riqueza del país.
Si el FMLN y el gabinete de gobierno siguen hablando de desdolarizar, van a generar pánico, van a convencer a la gente de que la posibilidad de una desdolarización es real y eso puede generar una corrida de dólares que puede poner en aprietos serios al país.
Si el FMLN y el gobierno del cambio siguen hablando e implementando nuevos impuestos, elevando los que existen y siguen con el populismo que los impuestos solo van a afectar a los ricos, la economía seguirá con un crecimiento cercano a cero, los precios se incrementarán fuertemente y los más afectados serán los más pobres.
El año próximo no viene nada fácil, pero podríamos al menos no empeorar si el FMLN, los diputados de GANA, el presidente Funes y su gabinete dieran mensajes claros de creer en reglas claras de largo plazo y que están comprometidos con el crecimiento económico basado en la iniciativa privada y en que todos podemos aportar para el bien del país, pero si siguen con la ineficiencia en el combate de la criminalidad y no dejan de generar desconfianza, el 2011 puede ser otro mal año.
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