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2009/12/08

Co Latino-Educación para el cambio

Escrito por Norma Guevara de Ramirios. 7 de Diciembre. Tomado de Diario Co Latino.

Nuestra Ley General de Educación, define a ésta como un proceso permanente, personal, cultural, social  fundamentado en la concepción de la persona en su dimensión integral, de  su dignidad, de sus derechos y deberes y para alcanzar los fines que establece nuestra Constitución. Esos fines son: lograr el desarrollo integral de la persona en su dimensión espiritual, moral y social; contribuir al desarrollo de una sociedad democrática justa y humana; inculcar el respeto a los derechos humanos y a los correspondientes deberes; combatir todo espíritu de intolerancia y odio; conocer la realidad nacional e identificarse con los valores de la nacionalidad salvadoreña y propiciar la unidad de los pueblos centroamericanos.

La referida ley  define los objetivos de la educación en los diferentes niveles y regula la prestación del servicio sea éste público o privado, define como misión del Estado, establecer políticas de acceso a la educación para su  democratización, y fomentar programas de becas, subvenciones para las personas que teniendo condiciones, derechos y edad, carezcan de los recursos para lograrlo.

Señala además que para eso se debe disponer de adecuadas infraes-tructuras físicas, personal competente e instrumentos curriculares pertinentes. Si esto hubiera cumplido, nuestro país, quizá tuviera menos madres adolescentes, menos jóvenes en conflicto con la ley, menos niños y niñas fuera de la escuela por razones económicas de sus familias; menos población analfabeta y un promedio de educación más alto.

La realidad nos indica que a pesar de los esfuerzos de Ministras y Ministros anteriores, que fueron bastantes, el desempeño de nuestro sistema educativo es deficitario, debe mejorarse, que se necesitaba más y que en consecuencia es hora de hacer más y mejor para cambiar  y para lograr los fines de la educación en un tiempo de cambios.

Cucando la propuesta del Ministerio de Educación a cargo de Salvador Sánchez Cerén señalan que  es preciso en el Plan Anti Crisis de la Presidencia de la República incluir el reforzamiento de la alimentación escolar en escuelas a las que asisten niños provenientes de familias pobres, sean estas rurales o urbanas; cuando se dedican al importante cometido de dotar a todos los niños y niñas de uniformes, zapatos y cuadernos, está simplemente cumpliendo el mandato del Artículo 14 de la Ley General de Educación de analizar a fondo la deserción y la repitencia y adoptar medidas para reducirlos.

Es evidente que esos programas buscan  mantener a niñas y niños en la escuela y facilitar su acceso a partir del 2010. ¿Qué de malo hay en este empeño?

Cuando en la Propuesta del Ministerio titulada VAMOS A LA ESCUELA, se reflexiona sobre lo cambiante de la realidad nacional y mundial, sobre la importancia de fijarse en el desarrollo de la persona y dejar de ver la educación como instrumental del desarrollo económico, cuando en esa reflexión filosófica de la educación, se analiza el papel del aula y de la escuela, de la didáctica activa que profundiza el aprendizaje integrando en la acción del maestro como guía, el papel fundamental de la metodología, de la integración de los conocimientos actuales, y cuando pide que la familia se incorpore a la definición curricular; ese Ministerio está pensando en serio en la obligación de motivar e incorporar a docentes y a la familia en la adecuación curricular para que este sea pertinente como manda el Artículo 4 de la Ley General de Educación.

Algunos medios intentan hacer una campaña perversa, en la que incluso calumnian al Presidente de la República deformando el sentido franco de sus declaraciones con el propósito de mantener  la imagen de confrontación. Esto recuerda los editoriales en contra de la Ministra Gallardo de Cano cuando el Presidente Calderón Sol pidió apoyo a personas que creyó podían, por su honestidad, aportar; El Diario de Hoy la calificaba como amiga de los comunistas.

En ese mismo tiempo se le pidió aportes  al Director de ese periódico desde la Asamblea que discutía la Ley de Educación Superior y al concurrir dijo que había leído hasta el Artículo 15, es decir, a veces atacan sin conocer.

La educación siempre requerirá nuevos impulsos porque los tiempos y las necesidades sociales cambian, las expectativas se elevan, y en cada tiempo hay que hacer lo propio, solo que ahora, además, debemos resolver la deuda social con generaciones completas relegadas.

Esforcémonos en comprender y apoyar la educación para el cambio y si ahora eso representa una computadora para el maestro, y los estudiantes, en vez, o además de la televisión educativa de antes, hagámoslo para el bien de nuestra sociedad presente y futura.

Co Latino-Educación para el cambio

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