Escrito por José María Barrera Lemus.22 de Diciembre. Tomado de Diario Co Latino.
Lo sucedido el pasado fin de semana, en torno a las diferencias encontradas entre el ex presidente Antonio Saca, y su homólogo Alfredo Cristiani, en torno a la separación del primero, rebasó la gota que derramó el vaso en el partido ARENA. Y es que era de esperarse, que un partido fortalecido durante veinte años, luego que perdiera el Poder del Ejecutivo, tenga que buscar chivos expiatorios para justificar la derrota.
La cacería de brujas inició con el Director Departamental, Adolfo Torrez, quien terminó “suicidándose”, posiblemente para ocultar otros males mayores en detrimento del mismo partido.
Con ello, queda comprobado que en países como el nuestro, en donde la cultura del más fuerte, prevalece. No podemos nosotros los adultos, hacer nada para remediarlo; así fuimos formados desgraciadamente, por un sistema que ahora se resquebraja y deja entrever todo aquello que por años se mantuvo oculto. Esta es la sociedad que hemos heredado.
En el caso que nos ocupa en el presente artículo, la situación es diferente, en tanto se evidencia una lucha sin cuartel, de dos bandos: por un lado, aquellos que sostienen que es necesario continuar con el status quo y por el otro, los que dándose cuenta de lo que eso implica, deciden retirarse como buenos caballeros. En ambos casos, cada quien tiene la razón. La pregunta del millón ahora es: ¿Quién cederá a la razón? Cuando ambos grupos se reclaman su derecho.
Argumentar el desvío de fondos de la partida secreta, justificar la imposición de candidatos, o la separación de un grupo de parlamentarios del partido, por parte de los defensores del status quo, no es otra cosa que pedir o mostrar quien tiene la razón, lo cual solo suma beneficios y fortalece a los contrarios. ¿Y el pueblo en dónde queda?, más confundido que nunca.
Bien lo confirman las sagradas escrituras en el libro del Eclesiástico, (Capítulo 13. Biblia Católica), cuando advierte a los pobres, sobre el hecho de no juntarse con los ricos y poderosos, pues cuando todo está bien y en calma, el rico le aplaude al pobre y le premia; mas si las cosas marchan mal, él mismo se encarga de hundirle.
Antonio Saca, o Tony como se le conoce en el mundo de la radio, fue electo por su carisma, por su popularidad y en un momento en el que el país necesitaba cambios fuertes hacia la atención de los “pobres de los más pobres”, a quienes se refirió -al menos en los discursos-, Don Alfredo Cristiani, durante su Gobierno, como Presidente de la Paz.
Tony, ha obtenido su fortuna con esfuerzo, empeño y tenacidad, a diferencia de Cristiani quien desde un inicio se identificó con la oligarquía. No obstante, el reclamo de los más de doscientos millones, solo significa el reclamo de un dinero que Tony no se ganó, al dejarse arrebatar la presidencia y más aún, por haberla entregado al FMLN, en condiciones nunca vistas en la historia del país.
Cualquiera que sean las causas, motivos, razones, o circunstancias, lo cierto es que en este tipo de disputas, solo prevalecerá la razón en aquellos que nada temen. Quien esté libre de pecado… que lance la primera piedra… expresó Jesucristo, cuando estaban por apedrear a la pobre y desvalida Magdalena.
¡Que el pueblo juzgue… y la Patria os premie y si no que ella os los demande!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios que incluyan ofensas o amenazas no se publicaran.