A propósito de los impuestos

Escrito por Néstor Martínez. Viernes 20 de Noviembre. Tomado de Diario Co Latino.

Me preguntaba si la evasión y elusión de impuestos, (evasión y elusión legal con decretos emitidos durante los 20 AÑOS DE ATRASO ARENERO e ilegal al no pagar lo que descuentan a los empleados) sirvió para que el pueblo avanzara en sus más sentidas aspiraciones, la respuesta es que en realidad no.

Digo esto porque la derecha atrasada está engañando al pueblo salvadoreño diciendo que si se aumentan los impuestos el país irá al atraso en la inversión privada. Pregunta, ¿Usted, estimado lector, cómo se siente después de 20 AÑOS DE ATRASO ARENERO? Estoy seguro que nada cómodo, porque durante los cuatro periodos areneros en el poder la arcas del Estado fueron saqueadas, no solo con la corrupción a todo nivel, sino con las grandes recetas que se dieron los mal llamados “empresarios” para no pagar impuestos, recargando el peso de los tributos en el pueblo, en especial en la clase media, de la que muchos emigraron a la clase pobre.

Somos nosotros pueblo los que durante esos 20 AÑOS PERDIDOS pagamos los desmanes de los corruptos, políticos y empresarios, así que nuestro bolsillo y futuro fue cargado con el alza en la telefonía, intereses bancarios, en los servicios de energía eléctrica y agua, en impuestos a la gasolina, y esto tuvo repercusión en los costos de la educación, alimentos, vivienda, transporte (pese al subsidio) es decir, en todo. Ese costo lo seguimos teniendo en nuestras espaldas y no se ve en el futuro que nos lo vayamos a quitar.

Entonces, pregúntese usted mismo por qué los “empresarios” se están quejando e inventando una sarta de mentiras (vea los editoriales de la prensa derechista y sus plumíferos a sueldo), y la respuesta será que la cortina de humo es la trillada “pérdida de la inversión” que oculta las grandes ganancias que obtienen a costa del pago de salarios bajísimos, de la evasión y elusión de impuestos, es decir, a costa del pueblo salvadoreño.

A propósito me preguntaba por qué los trabajadores y las trabajadoras de las maquilas siguen pisoteados, sin que se les realice una auditoría gubernamental para saber si están pagando los descuentos que les hacen a los trabajadores y a las trabajadoras.

No señores empresarios corruptos, es tiempo de que paguen sus impuestos, nosotros pueblo ya nos cansamos de que sobre nuestras espaldas sigan sosteniéndoles sus ganancias, ganancias que no se traducen en nada, ni siquiera para el pago de buenos salarios.

No me cabe la menor duda de que es perverso decir que aumentarán el IVA, si eso sucede lo más seguro es que será una verdadera defraudación del pueblo.

Los impuestos deben elevarse al nivel sagrado, porque son fondos destinados para todos, sin ellos no hay policía, ejército, inversión en educación, salud, carreteras, calles, y un largo etcétera de necesidades comunes, tanto de ricos como pobres. Los impuestos son la sangre que alimenta un país, pero esa sangre debe ser proporcionada por todos, no solo por un sector, en la proporción que lo amerite.

Al menos con gusto pago mis impuestos, pero en realidad ya me estoy cansando de que hasta ahora los recibos de los servicios me sigan saliendo bastante cargados, con lo que estoy seguro, mantengo no solo a pobres, sino a ricos.