Escrito por Luis Fernández Cuervo. 14 de Diciembre. Tomado de El Diario de Hoy.
(Primera parte)
Si los lectores quieren sacar algo en limpio sobre toda esta gran alharaca, del calentamiento global, el aumento del CO2 y la catástrofe que hay que evitar, deben saber que la verdad está muy lejos de todo alarmismo. Sobre una idea falsa --que el CO2 emitido por los humanos y sus instalaciones es lo que ha calentado la Tierra-- se ha montado un negocio millonario, una gran estafa donde entran importantes políticos, científicos deshonestos, el injusto Premio Nobel de la Paz, Mr. Al Gore, el IPCC de la ONU y muchos de los miles reunidos actualmente en Copenhague.
Todo descansa sobre una manipulación de datos y gráficas estadísticas, que ya están saliendo a la luz. En inglés este escándalo, recordando el del Watergate, recibe ahora el nombre de Climategate.
Para empezar es importante no hacer una mezcolanza entre la polución atmosférica que padecen algunas grandes ciudades, los ataques al equilibrio ecológico y ¡el Calentamiento Global! Éste último no se merece esas mayúsculas con las que pretenden aterrorizarnos. Es algo producido por la naturaleza, como han demostrado los expertos en climatología que no han sucumbido a las presiones políticas y económicas.
¿Hay que impedir la contaminación aérea que padecen muchas concentraciones urbanas? Sí, por supuesto. Y para eso no hacen falta las reuniones multitudinarias y millonarias de la ONU y su IPCC. Hace tiempo que Londres acabó con su famoso "smog", mezcla de niebla y humo de carbón, típico ambiente de películas sobre Sherlock Holmes o Jack el Destripador.
Aunque San Salvador no es lo peor en contaminación atmosférica, bueno sería una mano dura contra los buses y carros que sueltan sus pestíferos humos por nuestras calles y avenidas. A lo mejor también podría evitarse que los cañales tuvieran derecho a seguirse quemando, esparciendo sus cenizas sobre todos nosotros, indefensos ciudadanos.
¿Hay que evitar que la basura se riegue por cualquier sitio? Sí. ¿Evitar que las aguas de los ríos se contaminen con desechos industriales? También. Y muchas otras cosas más deben hacerse para conservar y mejorar el medio ambiente con sus especies vivas, vegetales y animales. Pero todo eso poco o nada tiene que ver con las alarmas y las medidas erróneas que proponen contra el aumento de la temperatura de la Tierra y el incremento del CO2.
Dicho lo cual, comenzaré hoy con lo más esencial: el cambio del clima. ¿Cuál es la verdad? Pues sencillamente que el clima no es algo estático, inalterable, sino que está cambiando desde que nuestro planeta existe. Que ahora estemos pasando por un ligero aumento de la temperatura media es algo normal. Por eso Richard Lindzen, profesor de Ciencia Atmosférica en el MIT (Massachussets Institute of Technology), afirma que la temperatura media global ha crecido alrededor de 0.6º C durante el siglo pasado, creciendo más entre 919 y 1940, disminuyendo entre 1940 y mediados de los 1970, creciendo otra vez, y permaneciendo esencialmente planas en los últimos 10 años, o sea que es normal que el clima cambie constantemente (W.S.Journal 6-12-09).
Con un tono más jocoso Lawrence Solomon, director ejecutivo del Instituto de Investigación Energética y Renacimiento Urbano, nos dice (Financial Post, 1-11-09): "Agradézcale a su buena suerte por estar vivo en la Tierra en estos momentos. Nuestro planeta estuvo normalmente en profundo congelamiento. Durante el último millón de años el planeta estuvo sujeto a ciclos de Edades Glaciales que duraron 100.000 años cada una, con astillitas de calor de unos 10.000 años entre cada uno de esos ciclos". En los últimos 5000 años hubo épocas más cálidas coincidiendo con la cultura minoica, la romana, la medieval y la actual. Pero entremedias hubo pequeños períodos de congelamientos brutales como lo que los expertos llaman la Pequeña Edad de Hielo de unos 500 años de duración que comenzó hace unos 600 años.
El Dr. Tim Patterson, profesor de ciencias de la tierra en la Universidad de Carleton, y otros han señalado que primero hubo una tendencia de 0.5°C al calentamiento que comenzó a fines del Siglo XIX y tuvo su pico hacia 1940. Luego, las temperaturas disminuyeron desde 1940 hasta fines de los años 70 --¡justo cuando hubo un boom de desarrollo industrial y de uso de derivados del petróleo!--. Después, temores por la llegada de un nuevo período glacial dominó los años 70, cuando las pesquerías de Islandia fueron destruídas por el avance de los hielos polares y los inviernos de Norteamérica fueron desusadamente fríos. Luego una tercera tendencia al calentamiento ocurrió desde 1976 hasta 1986, después de la cual el aumento ha sido muy pequeño.
Pero ¿y el aumento del CO2? ¿Es peligroso? ¿A qué se debe? Espero contárselo el próximo lunes.
Y estos son los mas sesudos de por estos lares!!!
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