En El Salvador nadie se pone de acuerdo sobre cómo, dónde y cuándo hablar de sexualidad. Mientras las ONG y la ADS hablan de "derechos sexuales", "salud reproductiva" y anticonceptivos, otros prefieren hablar de educación sexual, castidad y abstinencia.Servicios a mitad de precio y medicinas subsidiadas. La Clínica para Adolescentes está en la 25a. Avenida Norte, número 709 C, de San Salvador y abre de lunes a sábado.
María Cidón.12 de Diciembre.Tomado de El Diario de Hoy.
Una de las mayores causas de partos prematuros en el país es la juventud de las madres, adolescentes de 11 a 19 años en un 30% de los casos. Mientras eso sucede, el Mined, las iglesias, las ONG y los representantes de la ONU a nivel local aún no se ponen de acuerdo sobre cómo educar sobre sexualidad y a qué edad iniciar ese proceso.
Marvin Menjívar, subdirector del centro escolar Credisa, considera que esos desacuerdos llevan a desechar buenas ideas o tiran a la basura iniciativas que en el pasado fueron fruto de consenso. "El Plan Nacional para la Educación 2021 era muy bueno, pero lo quitaron y ahora van a dar 'Educación para la Vida'. Si vuelve ARENA, le aseguro que lo vuelven a cambiar", afirma.
Él también recuerda que hace 10 años se retiraron de circulación 800 manuales sobre educación sexual y reproductiva con el título "De Adolescentes para adolescentes". El material había sido una iniciativa del Ministerio de Salud y su aparición levantó una gran polémica por incluir explicaciones sobre homosexualidad, masturbación y anticonceptivos.
Desde entonces, diferentes sectores de la sociedad han hecho varias propuestas para cubrir esta necesidad educativa.
Todos dicen tener un objetivo común: garantizar la salud sexual de los menores salvadoreños, informándoles, brindándoles orientación y apoyándoles en su toma de decisiones. El Ministerio de Educación aprobó a finales de 2008 la asignatura Orientación para la Vida, la cual comenzó a impartirse como materia obligatoria para los cursos de bachiller desde 2009.
Entonces, se distribuyeron seis tipos de manuales y se dijo que siete mil profesores serían capacitados para impartir la asignatura. El programa incluye cuatro módulos principales: sexualidad, formación de líderes, resolución de conflictos y orientación para el futuro. Esta materia fue resultado del compromiso asumido por El Salvador en la XVII Conferencia Internacional de VIH realizada en agosto de 2008 en México.
La Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia (Lepina), que entrará en vigencia en enero de 2011, incluye artículos (24, 25 y 34) donde se habla del derecho de los menores a tener acceso a servicios de salud integral en caso de embarazos precoces en niñas y adolescentes. Además, se habla del desarrollo de programas de atención integral de la "salud sexual reproductiva" de niños y adolescentes; y del derecho a una "educación en salud sexual y reproductiva".
La Organización Mundial de la Salud (OMS) entiende la educación sexual como: "la educación acerca del sexo, la sexualidad, el aparato reproductor femenino y masculino, la orientación sexual, las relaciones sexuales, la planificación familiar y el uso de anticonceptivos, el sexo seguro, la reproducción -y más específicamente la reproducción humana-, los derechos sexuales y otros aspectos de la sexualidad humana con el objetivo de alcanzar una satisfactoria salud sexual".
En las iglesias cristianas, católicas o evangélicas, la educación sexual tiene otro matiz. En la encíclica Caritas in Veritate, Benedicto XVI afirma: "La educación sexual no se puede limitar a una instrucción técnica, con la única preocupación de proteger a los interesados de eventuales contagios o del 'riesgo' de procrear. Esto equivaldría a empobrecer y descuidar el significado profundo de la sexualidad, que debe ser en cambio reconocido y asumido con responsabilidad por la persona y la comunidad".
Para la Iglesia Católica, la educación sexual es "un derecho y una responsabilidad de los padres". No obstante, en el Instituto Técnico Ricaldone, dirigido por salesianos, los estudiantes de bachillerato reciben "Orientación para la Vida" tres horas a la semana. Tanto tiempo como el que reciben inglés e informática. Para los más pequeños, estos temas son abordados en "Formación cristiana" desde el tercer ciclo.
La psicopedagoga Guadalupe Hernández imparte esta asignatura y apoya la formación de los alumnos en la temática: "Antes dábamos formación cristiana con ese enfoque, esa es la principal diferencia. Antes llamaba a la prevención y ahora hay más espacio de libertad. Nuestra prioridad es el enfoque y también que haya prevención, abstinencia y respeto", dice Hernández.
Adiós a la cigüeña
Los manuales de sexualidad de hace 10 años estaban dedicados a menores de entre 10 y 18 años.
Algunos sectores consideraron que esa edad era demasiado temprana para decir a los niños que la cigüeña no los trajo hasta el regazo de sus padres desde París.
Pero la adolescencia empieza entre los 12 y los 13 años y termina entre los 18 y los 20 años, cuando han concluido ya los cambios físicos y sicológicos. Pero es en la pubertad, entre los 9 y los 12 años, cuando se inicia este desarrollo y el consiguiente despertar hormonal.
El psicólogo especializado en niños y adolescentes Boris Barraza considera que con información previa a este "despertar" se prepara a los púberes "para no enfrentar angustias y no cometer errores por comportamientos sexuales riesgosos".
Considera también que la formación del educador es primordial pues "si no se hace bien, se le puede transmitir al menor sentimientos de morbo, culpa, dudas y el desarrollo de prejuicios sexuales". Barraza afirma que "el problema es la fuente (de la información sobre sexualidad, no el menor como receptor de la información".
Él cree que el origen de los desacuerdos alrededor de cómo y cuándo iniciar la educación sexual tiene su origen en una "visión tradicional religiosa, más que (en una visión) humana social".
Defendiendo la vida
Sexualidad humana, noviazgo, matrimonio, Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS) y aborto son algunas de las temáticas que abordan los integrantes de la Fundación Sí a la Vida durante las charlas que imparten en centros educativos, comunidades y parroquias.
Creada hace 24 años, esta fundación tiene siempre algo que decir sobre sexualidad humana, desde un ángulo cristiano en congresos nacionales e internacionales.
Uno de los enfoque principales es apoyar la abstinencia hasta llegar al matrimonio como una decisión libre y madura. "Si yo no soy responsable y no me autodominio, toda mi vida voy a tener problemas", afirma Julia Regina de Cardenal.
Durante las charlas, la gente de esa fundación le hace ver a los jóvenes "las consecuencias de una sexualidad desordenada". De Cardenal explica: "No sólo las enfermedades de transmisión sexual ... sino (también) los dramas que conlleva tener relaciones sexuales fuera del matrimonio",
Ella asegura que la educación sexual que se quiere "imponer" en los centros educativos no desarrolla suficientemente el concepto de abstinencia sexual. "Nosotros promovemos la abstinencia para educar la voluntad y que los jóvenes sepan libremente escoger el bien para ellos y (para) sus seres queridos", asegura. Lo mismo afirman buscar en la Asociación Demográfica Salvadoreña (ADS).
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios que incluyan ofensas o amenazas no se publicaran.