EDH-Consejos de temporada

 José María Sifontes.11 de Diciembre. Tomado de El Diario de Hoy.

Pareciera que en El Salvador estos casos se van volviendo parte de las tradiciones navideñas. Ya son varias temporadas de fin de año que me entero que alguien a quien conozco ha sido víctima de un robo, que le han quitado el sueldo, el aguinaldo, o los dos.

Las historias se repiten, es como una película que ya hemos visto. "Había ido a retirar el sueldo y se me acercó un joven. Me enseñó una pistola y me dijo que le entregara todo lo que tenía. Me dejó sin nada". La frase "me robaron el aguinaldo" es ya tan común en esta época que compite con las más tradicionales de "tendremos tamales para el 24" o "el niño va a salir en la Pastorela".

Toda actividad se ve aumentada en esta época. El comercio, el tráfico vehicular, las transacciones bancarias. Los delincuentes, que si bien se mantienen ocupados siempre, aumentan significativamente su actividad durante la época navideña. Para ellos también es temporada alta. Y da tristeza, tristeza y coraje, enterarse que a un conocido le han quitado el fruto del esfuerzo de todo un año, su esperanza de aliviar las deudas o el anhelo de cumplir un deseo familiar.

Por eso hay que estar listos, y con una actitud de venado bebiendo agua en un claro del bosque, pendientes de cualquier peligro. Pero a veces ya es demasiado tarde, y la víctima se da cuenta del peligro cuando el delincuente ya está guardándose el dinero… junto con el celular, el reloj y la cadena que le obsequió el primo de los Estados Unidos.

Es mejor prevenir. Para ello se necesita pensar que todos podemos ser víctimas de asaltos; ese es el primer paso. No hay que sobreestimar la propia astucia. También es cierto que existen personas más "asaltables" que otras, y a éstas es a quienes son más acomodables algunos consejos.

Hay algunas personas que se delatan a si mismas y que sólo les falta portar un cartel que diga "vengo del banco de sacar dinero". Caminan de manera sospechosa, sujetando la cartera de forma inusual, en el mismísimo día de pago (que los ladrones, por supuesto, conocen). Si a esto le agregamos que andan solas, o con un niño de la mano, se verá que son presas fáciles hasta para el ladrón más novato.

Hace poco vi a una señora que manejaba una lujosa camioneta, hacía un alto con la ventana abajo, mientras charlaba amenamente y ajena a todo con un "Black Berry". Difícil no pensar que hacía todo lo imaginablemente posible para donar su aparatito a los que gustan de las cosas ajenas.

Hoy se ha puesto de moda también la "clonación" de tarjetas. Por el número de casos aparentemente no debe ser muy difícil hacerlo. Si puede, mejor pague en efectivo, y si necesita hacerlo con tarjeta no la pierda de vista ni un instante.

No retire todo el dinero de una vez. Use cajeros seguros. Hágase acompañar de alguien al retirar dinero (si ese alguien tiene la apariencia de Schwarzenegger, mejor). Evite sitios con demasiada gente o muy solitarios. No hable por celular mientras maneja. En fin, sea precavido y no le haga fácil el trabajo a los delincuentes.

Son recomendaciones de sentido común. Cualquiera creería que no es ni necesario hacerlas. Pero si ustedes hubieran visto a la señora del "Black Berry", estarían seguros de que nunca están demás.

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