Muchos murieron al intentar cruzar el Muro, como mueren los cubanos que se arriesgan cruzando el muro de la isla, que es el mar Caribe, tiburones y patrullas que hunden las barcazas
Jueves 13 de Agosto. Tomado de El Diario de Hoy.
El 13 de agosto de 1961 se comenzó a levantar el Muro de Berlín, la gran pared que aisló al bloque comunista del resto del mundo. El Muro se derrumbó en noviembre de 1989 como poco después colapsó la Unión Soviética y todas las sangrientas dictaduras rojas con excepción de la cubana y la de Norcorea.
Pero antes de levantar el Muro había severas restricciones para cruzar la línea divisoria entre los dos Berlines, el libre y el oprimido. La manera más fácil de hacerlo era tomar el subterráneo -–el U-bahn— en Berlín Occidental y salir en una estación de la zona comunista; era el equivalente de ir de una ciudad llena de vida y movimiento, a otra prácticamente desierta y gris, del tecnicolor al blanco y negro.
Cuando había que volver, el proceso era el inverso: en la estación oriental se tomaba el subterráneo para salir en la occidental. En el trecho entre ambas entraban policías armados, los "vopos", a inspeccionar cada bulto, revisar documentos, a interrogar. Cuando veían una familia, hombre, mujer y niños, de inmediato los detenían pues les parecía obvio que eran personas que intentaban huir del infierno. Los que escapaban iban con su ropa puesta y nada más; lo que no les había robado el régimen "democrático", se quedaba del otro lado.
En su momento, no nos cansaremos de señalarlo, el Muro se extendió desde el Círculo Ártico a la frontera con Irán, una longitud comparable con la de la Gran Muralla levantada en China para detener las invasiones de los pueblos del Asia Central. El Muro era más que una pared; consistía en una franja con torres de vigilancia, soldados con perros, alambradas eléctricas y campos minados. Muchos murieron al intentar cruzar el Muro, como mueren los cubanos que se arriesgan cruzando el muro de la isla, que es el mar Caribe, tiburones y patrullas que hunden las barcazas improvisadas.
Muros físicos, pero peor, muros mentales
Pero Muro fue además la censura, los pasaportes internos que impedían a los súbditos de cada régimen viajar en sus países y menos a otros, el bloqueo de transmisiones de emisoras occidentales, la permanente vigilancia policial, los campos de concentración y la denuncia de los propios vecinos y hasta familiares. "El Gran Hermano" mira de manera permanente y está presto a fulminar hasta la mínima disidencia, como en la aterradora novela de Orwell.
En un par de ocasiones logramos pasar el Muro en forma pacífica y ver , "con nuestros propios ojos", el desastre de la economía y los modos de vida del socialismo. El cruce era en sí una odisea: revisiones minuciosas, interrogatorios, control de nombres en la oficina de la policía.
Cuando tres años después del derrumbe fuimos a Berlín, recorrimos en automóvil Potsdam, Brandenburgo y Halle, donde encontramos que la situación era peor de lo que anticipábamos: la gente caminaba como zombi por las calles, edificios ruinosos, escombros de la Segunda Guerra Mundial en las aceras, parques convertidos en matorrales. Al día de hoy la mayoría de ciudades de lo que fue el bloque comunista exhibe, en sus zonas periféricas, las cicatrices que dejó el horror.
Europa se ha unido y lenta, en ocasiones dolorosamente, los pueblos emergentes han ido superando el trauma. Se sale de una para entrar en otra: Chávez, los talibanes y el narcoterrorismo.
Fue terrible todo eso en realidad. Pero honestamente hablando: habra sido peor lo que el muro implicaba para los alemanes orientales a lo que los años de dictadura salvadoreña fueron para nuestro pueblo?..interrogatorios, torturas, persecucion, asesinatos, desaparecimientos, masacres en plena ciudad y a plena luz del dia...para que dedicarle tanta tinta a algo que sucedio tan lejos en un contexto diferente si aqui tenemos cosas que lamentar y analizar para rato. Hipocritas... eso es lo que son.
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