Este fin de semana pasó algo extraordinario en la reciente y violenta historia de este país: los salvadoreños se mataron menos. Mucho menos. Hubo dos días en los que la PNC registró solo 3 asesinatos. El caso es extraño e inexplicable para las autoridades, y lamentablemente es una muestra muy pequeña como para establecer una tendencia.
Sergio Arauz. 27 de Septiembre. Tomado de La Página.
Viernes 24 de septiembre. 4 de la tarde. Howard Coto, subdirector de investigaciones de la Policía Nacional Civil, recibe una llamada telefónica muy breve y al terminar sonríe. En la llamada le informaban que, hasta esa hora, la Policía Nacional Civil había registrado una jornada con un solo homicidio.
El viernes terminó con 3 muertos. Al día siguiente, murieron asesinadas otras tres personas. En comparación con los promedios de entre 9 y 12 muertos diarios, la escasa cantidad de muertes convierte los pasados viernes y sábado en días extraordinarios. “Esto no es frecuente”, dice Coto. “Recuerdo que sólo un día de agosto o de julio fue similar”.
El domingo 26, hasta las 6 de la tarde, la Policía registró 5 muertes violentas. Otro día extraordinario.
¿Será que la tormenta Matthew mantuvo a los potenciales asesinos en sus casas? “No se puede hacer una valoración sobre este fenómeno, tres días no hacen una tendencia”, dice Howard Coto.
Los últimos números a los que tuvo acceso este periódico, hablan de un promedio diario de 9.4 homicidios. Esto fue en julio de 2010, que registró el promedio diario mensual más bajo de este año y que solo había sido superado por los 8.5 asesinatos por día de diciembre de 2008, la última vez que la cifra estuvo por debajo de los dos dígitos.
En las primeras dos semanas de agosto, según fuentes policiales, el promedio aumentó a 10.1 casos y se registraron bajas de entre el 6% y el 40% con respecto del año pasado en cinco departamentos: San Vicente, Santa Ana, Usulután, San Salvador y Sonsonate.
En 2009, El Salvador registró más de 4 mil 360 asesinatos, para un promedio cercano a los 70 homicidios por cada 100 mil habitantes. Otros países de Latinoamérica, como Guatemala, Honduras y Venezuela, quedaron rezagados con tasas que no llegaron a los 60 asesinatos por 100 mil habitantes.
Según declaraciones que brindó hace un par de meses el director policial, Carlos Ascencio, este 2010 inició con cerca de 50 homicidios más con respecto a 2009, lo que obligó a recomponer los planes policiales en la primera semana de marzo.
La tendencia no bajó en los siguientes cuatro meses. “Para la primera semana de junio, teníamos cuatro homicidios más de diferencia con relación al año pasado hasta que pasó el hecho criminal en Mejicanos (el atentado a dos microbuses)... Solo ese fin de semana fueron 35 muertes violentas a nivel nacional”, recordó Asencio.
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