Ricardo Esmahan.01 de Marzo. Tomado de El Diario de Hoy.
Muchos recordamos el editorial "Sin Censura" que, siendo periodista, produjo el señor Presidente Mauricio Funes. El 12 de julio de 2007 lo tituló: "La montaña parió un ratón", título que sustentó con la siguiente remembranza: "Esta expresión se la escuché por primera vez al ya fallecido líder de la izquierda salvadoreña Guillermo Manuel Ungo, quien al término de una reunión entre partidos políticos, que buscaban empujar el proceso de negociación entre el Gobierno y el FMLN, se refirió de esta forma al hecho de haber llegado al final, después de varias horas de discusión, a un compromiso frágil y timorato…"
El editorialista explicó… "Es decir, tanta alharaca, tanto aspaviento, tanto exhibicionismo público, para acabar en un acuerdo que se volvió estéril para los fines que se perseguían". Y aplicó el axioma a otro publicitado acuerdo de abril 2007, con la elocuencia y agudeza que le distingue.
A más de año y medio de su gobierno, me permito con todo respeto una observación de sana crítica a un tema que con "alharaca" y "aspaviento" se ofreció: "Revisar la fórmula de referencia de los precios de gasolina y diesel". El otrora crítico de una "fórmula obscura", el destino y su partido le brindaron la oportunidad de "hacer mejor las cosas". Y es de mérito hacer esta observación al no ver resultado alguno hasta hoy, con precios internacionales subiendo sin control. Han sostenido públicamente que toda la metodología del nuevo costeo ya está lista. ¿Y entonces? Todos se preguntan: ¿Cuándo se aplicará la nueva fórmula?
Por otra parte, en su discurso de toma de posesión, el Presidente asumió el compromiso de "focalizar los subsidios", incluido el del gas propano. Tan solicitado por organismos financieros internacionales y la cúpula empresarial del país. Y delegó esta importante tarea a una Cartera de Estado que está bajo control de un pequeño partido a resultas de una alianza política; sin embargo, esta oportunidad inusual ha dado al grupo más problemas que réditos políticos y organizativos.
En año y medio, la focalización pasó a ser racionalización del subsidio, cubriendo al 70% de la población aunque no se compre gas. Interesante será corroborar si existirá un sustancial ahorro con las nuevas medidas.
Este mes arranca la racionalización del subsidio del gas, y pese a la "campaña educativa", tenemos a la población más confundida y desorientada, haciendo sacrificios en colas interminables en los CENADE. Y para abril, que será políticamente más caluroso, nos espera la liberalización de este mercado, sin control al precio de consumidor ni al de importación. En un mercado internacional con tendencias al alza agravado por conflictos en Medio Oriente. ¡Dios nos proteja!
El equipo político del Ministerio desde su inicio ofreció en combustibles "precios justos" y se comprometió con el Presidente a focalizar el subsidio del gas. ¡Pero a qué costo político!, especialmente para el partido responsable de los resultados de este Gobierno del cambio. La banca pretendiendo comisiones; las gaseras en mercado libre y libre de financiar el subsidio; las compañías distribuidoras sin mora en los recibos de luz eléctrica. ¿Y los pobres? Los pobres al sol en grandes colas, hoy para preguntar y mañana para cobrar. Y al final, los alimentos en los comedores de sus trabajos más caros por el precio libre del gas.
Si la montaña se ha tardado en parir, esperamos no salga con un ratón. O que el ratón no resulte que sólo fue una montaña de "alharacas y aspavientos", como lo hubiera dicho, cuando cuestionaba la realidad y la gestión pública el connotado y crítico editorialista, quien hoy como Presidente, sin duda, nuevamente tomará acertadas y oportunas decisiones a favor de la gente.
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