La página de Embraer revela que “la Fuerza Aérea de El Salvador ordenó en octubre 16 aviones” (¿no son 10 aviones?), Súper Tucano 314, aeronave turbohélice, diseñada para “ataques ligeros y lucha contrainsurgente” (Wikipedia).
Escrito por Claudio M. de Rosa.06 de Diciembre. Tomado de La Prensa Gráfica.
El jueves pasado, LPG informó que el presidente Mauricio Funes hizo una aclaración: “Yo no he dicho que vamos a comprar esos aviones, yo he dicho que estamos haciendo un análisis”. Pero Wikipedia muestra una información que podría dejar mal parado al presidente, al estilo de Wikileaks, que tiene de espaldas a la diplomacia de EUA. La página de Embraer revela que “la Fuerza Aérea de El Salvador ordenó en octubre 16 aviones” (¿no son 10 aviones?), Súper Tucano 314, aeronave turbohélice, diseñada para “ataques ligeros y lucha contrainsurgente” (http://en.wikipedia.org/wiki/Embraer_EMB_314_Super_Tucano), con un “precio de mercado de $4.5mm” (http://www.thaindian.com/newsportal/world/45-million-314-b1-super-tucano-fighter-plane-for-counter-insurgency_10055829.html).
¿Quién dice la verdad? Si es el presidente, es un abuso de la empresa brasileña Embraer anunciar una “orden de compra” que no existe, práctica comercial engañosa, que un comprador racional no dejaría pasar. Si la verdad la dice Embraer, entonces estaríamos ante un “AvionesGate”, similar al Watergate, que puso en jaque al presidente Nixon por no decir la verdad. Solo que aquí, no pasa nada. Una orden de compra de este tipo toma tiempo, pues se somete a un análisis y compatibilización con los requerimientos de Seguridad Nacional. ¿Desde cuándo está arreglado esto?
Seguidamente, el presidente agrega: “Y si las prioridades del Estado, si la capacidad financiera del Estado nos lo permite, lo haremos (compra), si no, no lo hacemos...”. Pero, al revisar el Presupuesto 2011 se ve claramente que no hay espacio para cargarlo con otros $100mm. Además, el saldo de deuda pública llegó a $11,299mm en septiembre, esto es, 51.8% del PIB. Recuerda, presidente, que una vez me dijo que fuera “más preciso en las cifras”, porque no se iba a pasar de 49%. Lamentablemente ya se pasó: el país se está endeudando $1.6mm diarios, lo que no es sostenible.
Además, hay necesidades urgentes que se excluyeron del Presupuesto 2011 y que se deberán hacer. El ministro de Educación informó en la Asamblea Legislativa que requiere $193mm más, pero le asignaron solo $71.2mm, faltan $121.8. Para uniformes, zapatos y útiles necesita $75.0mm, le dejaron $15.8mm: faltan $59.2mm; y para Alimentación Escolar en vez de $28.4mm le asignaron $10mm, faltan $18.4mm. En seguridad pública, le restaron $18.1mm a la PNC, $1.6mm al Sistema Penitenciario y para infraestructura carcelaria asignaron “cero”; y a obras públicas le redujeron $44.9mm. ¿Dónde están las prioridades?
No es correcto aseverar que estos aviones son para combatir la narcoactividad, porque, por tratados internacionales, a ninguna nave aérea o marítima se le puede disparar. Solo se puede fotografiarlas y acompañarlas hasta que salgan del espacio aéreo y marítimo del país. Además, esto ya se hace con los recursos de la Base de Monitoreo de Comalapa, los medios aéreos de EUA. También, a cualquier avión de “menor costo” se le puede incorporar sistemas de vigilancia modernos y ADOC (radares, cámaras con zoom, visión nocturna y térmica, designación láser y otros).
También el presidente dijo recientemente en la Escuela Militar; que “no son” de aviones de guerra, pero el ministro de Defensa expresó a la prensa que en efecto “son” aviones de guerra, lo que coincide con la información de Embraer. En otra entrevista, el presidente dijo que estos aviones se usarían para rescates y desastres, algo difícil para un avión con dos asientos: un piloto y un navegante o un alumno.
El presidente señala que hay “detractores” que “no quieren ahora que equipemos a la Fuerza Armada”. También aquí hay un desliz, porque en la Asamblea duerme el proyecto de inversión de $150mm para todas las ramas de la Fuerza Armada: ejército, naval y aérea, que fue presentado por la administración anterior, preparado por el Ministerio de Defensa. Por supuesto, antes de que se aprobaran $3,272mm para la actual administración.
Para cumplir con la misión de paz y mantenerse como la institución pública de mayor prestigio y aprecio de los salvadoreños, la Fuerza Armada necesita helicópteros equipados para emergencias y catástrofes, vehículos de transporte, lanchas rápidas, radios, chalecos antibalas, fusiles, munición y un ajuste salarial para los soldados que en su misión de seguridad exponen su vida ante la delincuencia. Es cosa de prioridades, donde también puede haber un gran ahorro para El Salvador versus una ganancia para Brasil y de quienes reciban la jugosa comisión.
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