El Libertador - Navidad en Honduras, ocho millones de realidades

Para los hondureños la Navidad tiene un nuevo sentido. Las secuelas del golpe de Estado han incrementado la pobreza y miseria (5 millones de personas), el número de personas con problemas de empleo (1.4 millón), los mártires de “La Resistencia” (177 muertos) y la población total (8 millones de habitantes).

Redacción / EL LIBERTADOR.24 de Diciembre. Tomado de El Libertador.

redaccion@ellibertador.hn

Tegucigalpa. La Navidad (nacimiento de Jesucristo) ha sido una celebración de convivencia familiar para los cristianos. Sin embargo, esta tradición se ha visto amenazada en el país por las consecuencias del golpe de Estado de junio anterior.

Si bien en casas y centros comerciales se exhiben nacimientos, flores de pascuas, árboles con luces y cintas de colores, coronas navideñas, música alusiva a la temporada y personas disfrazadas de Santas Claus, en las mesas de los hondureños hay un espacio vacío.

Las cifras que ha dejado la dictadura político – militar en los integrantes de “La Resistencia” son alarmantes: 177 muertos; 5 mil 200 golpeados y detenidos de manera ilegal, de éstos 118 son menores de edad; 120 viudas y más de 250 niños que perdieron a uno de sus padres.

Nombres como Isis Obed Murillo, Pedro Magdiel Muñoz, Roger Vallejo, Elvis Jacobo Perdomo, Wendy Ávila, Edwin Fajardo, José Manuel Flores, Ignacio Reyes, Teodoro Acosta, Ciriaco Cárcamo, Víctor Mata Oliva, Sergio Amaya, Roldin Villeda, entre muchos otros, permanecerán vivos en la memoria del pueblo opuesto a la oligarquía voraz y asesina.

MESAS VACÍAS

Otras familias no podrán festejar Navidad y año nuevo como en fechas anteriores. De acuerdo a la XXXIX Encuesta de Hogares del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), 2010 no sólo significó un incremento poblacional (8 millones de habitantes), sino que aumentó el número de personas con problemas de empleo: 1.4 millón de hondureños, de éstos, 230 mil están desempleados.

Asimismo, un dato que impresiona es que en la categoría de desempleados, más de 88 mil personas están en el grupo de los desalentados, esto significa que no buscan trabajo porque tienen la certeza que no lo encontrarán.

La pobreza se acrecentó de 58.8 a 60 por ciento, es decir que 5 millones de personas (de los 8 millones de la población total) transitan bajo la línea de la pobreza y miseria.

De esta cantidad, 3 millones no pueden cubrir los 30 productos de la canasta básica de alimentos. Esto significa que en Honduras al menos 3 millones de habitantes no comen bien, en vista que la canasta básica se cotiza en 6 mil 400 lempiras y éstos apenas perciben el salario mínimo, que para este año se fijó en 5 mil 800 lempiras para el área urbana y 4 mil 300 para el área rural.

Además, 2010 concluye con 2 millones de personas en pobreza extrema y miseria. Estos compatriotas subsisten con menos de un dólar al día (unos 20 lempiras).

NOCHE SIN PAZ

José Roger Osorio conoce muy bien este tema. “Estoy sin trabajo, por eso pasaré una mala Navidad. Este diciembre cumplo un año de estar desempleado, porque estuve enfermo”, dijo.

Voy a pasar solo en mi casa –prosiguió el entrevistado–, porque no tengo mujer, no soy de aquí (Tegucigalpa) y no tengo dinero para ir a mi pueblo, San Marcos de Colón.

Por su parte, la comerciante individual Gloria Nieto sostuvo: “La Navidad me la paso feliz con mis hijas, me presento a la iglesia a darle gracias a Dios y a pedirle que nos cuide la vida”.

Nieto agregó que esta fecha le es agradable, “porque uno vende más, la gente tiene los aguinaldos y así consigo para el pollo de la Nochebuena”.

A pocos días del 24 de diciembre, en sus mansiones los poderosos afinan detalles para el derroche de opulencia, o eligen el frac y el traje parisino que usarán; mientras, la mayoría empobrecida busca la manera de llevar comida a la mesa, o exige que el asesinato de sus familiares y amigos no quede en la impunidad.

El Libertador - Navidad en Honduras, ocho millones de realidades