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2011/04/02

Co Latino-El reto sigue siendo el desarrollo con justicia social | 01 de Abril de 2011 | DiarioCoLatino.com - Más de un Siglo de Credibilidad

 Juan José Figueroa Tenas.02 de Abril.Tomado de Diario Co Latino.

La visita del presidente Barack Obama a nuestro país debe interpretarse en el marco de las nuevas relaciones diplomáticas entre América Latina y Estados Unidos. Cualquiera que piense en fórmulas mágicas para la solución de los enormes problemas que aquejan a nuestras sociedades a partir de este acontecimiento está equivocado.

Entendemos que la intención del presidente Obama y del presidente Mauricio Funes no ha sido dejar un mensaje fuera de la realidad, basta leer sus declaraciones y el contexto en el que se dieron. Ahora bien, comprensible es que un encuentro como este produzca en las personas ciertas expectativas en temas sensibles como la reforma migratoria y el desarrollo, el crimen organizado y el comercio.

Un encuentro presidencial como el que nos ocupa, permite identificar los de liderazgo de aquellos que nos gobiernan, incluso de cara a la región, además implica una apreciación sobria acerca del futuro de las relaciones diplomáticas en el nuevo orden mundial en el cual países como Brasil y Chile, cuyos modelos de desarrollo y fortalecimiento institucional dejan lecciones dignas de estudiar, han cobrado una presencia admirable.

Los problemas de El Salvador y de la región centroamericana, es decir: la pobreza, la exclusión social, el subdesarrollo, la criminalidad y la violencia, estos han sido observados con realismo, estamos convencidos que ese es precisamente el foco de atención de nuestro gobierno, afrontar estos problemas desde nuestras propias particularidades.

“Avanzar en unidad, hacia la construcción de un nuevo modelo de desarrollo con justicia social”, persiste como premisa para una idea de nación. Sentar las bases para encausar nuestras energías hacia el desarrollo sin favorecer a pequeños grupos en desmedro de los más pobres es la misión. Entendemos que romper con una tradición para hacer política y gobierno en función de unos pocos, conlleva un proceso en el que debe haber compromisos pactados dentro de la sociedad, y en esa dirección avanza de manera acertada nuestro presidente Mauricio Funes.

No se puede pensar en avanzar en la democracia sin luchar contra la pobreza y el compromiso por lograr mayores niveles de seguridad ciudadana. La seguridad entendida no solo como política represiva, sino como prevención, lo que implica solidez en las políticas sociales.

El tema migratorio es sumamente sensible pues su solución se encuentra a la base de un acuerdo bipartidista en Estados Unidos, que implica un proceso político de incalculables efectos ahora que ha quedado demostrado que la población hispana es la de mayor crecimiento en Estados Unidos y que ha llegado a los cincuenta millones en ese país.

Por ello retomamos las palabras del presidente Mauricio Funes al respecto: “Coincidimos en que en materia de migración, la mejor estrategia es la lucha contra la pobreza y la creación de oportunidades, para arraigar a sus pueblos, a su lugar de origen. Las migraciones desafortunadamente son la expresión dolorosa del atraso y el subdesarrollo en el mundo, que no ha logrado establecer parámetros aceptables de justicia e inclusión.”

Entendemos que las agendas relacionadas al TPS y a la misma reforma migratoria integral es ya un tema de agenda permanente cuyos detalles se definen en las comisiones especiales designadas para tales efectos por el gobierno, como en el resto de temas.

La disposición de nuestro gobierno de “continuar liderando los esfuerzos de integración centroamericana, en torno, a una estrategia de seguridad conjunta”, conllevan un trabajo diplomático de incalculable valor en el área, pues ahora como nunca, la única forma de enfrentar la inseguridad es por medio de la integración.

Cómo podemos administrar estas relaciones partiendo de que somos un país pequeño y con grandes dificultades. La respuesta a esta interrogante es el reto en esta nueva era.

Entendemos que en el marco de la democracia hayan voces que pretenden advertir que el encuentro presidencial no ha significado nada, o que no produce los resultados esperados, o que si la visita del presidente Obama ha sido únicamente de cortesía. Podemos asegurar al respecto que la diplomacia encierra sus propias claves y derroteros y que en política exterior nada se produce por arte de magia, y que este encuentro tiene y traerá muchos frutos para nuestro país y la región en su conjunto.

El mayor reto para nuestro país está en la búsqueda de oportunidades en el nuevo orden mundial, y no es fácil abrir las puertas para hacer la obra social y la reforma del Estado en un mundo en crisis y de acelerados cambios geopolíticos, no como lo hicieron en otra época las derechas enquistadas en la dictadura y la guerra.

En ese engranaje, el respeto a la autodeterminación de los pueblos y gobiernos ha cobrado un acento mayor para América Latina, por ello mismo no está en discusión la cooperación internacional bilateral o multilateral que nuestros países necesitan para su desarrollo, sino el respeto a nuestras decisiones y a nuestras opciones.

Es indiscutible el carácter histórico de la visita del presidente Obama a El Salvador, incluyendo por supuesto su presencia en la cripta de Monseñor Romero, lo que ha abonado aún más al carácter universal de la figura de nuestro profeta mártir, cosa que incomoda a las mentes más obcecadas de la derecha salvadoreña que ya nada pueden hacer ante la implacable presencia de la verdad que desenmascara los crímenes del pasado.

Sin perder de vista que la realidad de la época que vivimos es sumamente crítica y de grandes derroteros para los gobiernos de nuestra región, aplaudimos toda acción que lleve a hermanar a los pueblos de Estados Unidos y El Salvador y de sus gobiernos.

El reto sigue siendo el desarrollo con justicia social | 01 de Abril de 2011 | DiarioCoLatino.com - Más de un Siglo de Credibilidad

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