Vanessa Davies.26 de Junio. Tomado de Cubadebate.
Correo del Orinoco
Una galaxia entera separa a Hugo Chávez de Barack Obama, pero los dos presidentes tienen -al menos- un punto en común: ambos usan Twitter. Y no sólo utilizan este espacio, sino que son de las figuras más buscadas por las usuarias y usuarios de las redes sociales.
En una entrevista electrónica con el diario venezolano Correo del Orinoco, la editora de Cubadebate, Rosa Miriam Elizalde, contesta algunas preguntas sobre el impacto de Twitter y, en particular, la trascendencia de la apertura de @chavezcandanga, la cuenta del Presidente bolivariano en esta red social.
-¿Existe una “revolución Twitter”? Si existe, ¿en qué consiste?
El término de “Revolución Twitter” fue acuñado durante las manifestaciones post-electorales en Irán en el verano pasado, para tratar de imponer la idea de que este espacio había sido esencial en la organización de una protesta masiva contra el gobierno de Teherán. Cuando se desinfló la campaña virtual, que demostró no tener una articulación social dentro del territorio iraní y por tanto la protesta no pasó de la histeria mediática, se descubrió que la tal Revolución Twitter era un activismo digital prefabricado, básicamente desde los Estados Unidos, cuya maquinaria propagandística se ha especializado en reconvertir los sustantivos revolucionarios y desnaturalizarlos.
Llamar a las protestas en Irán una “Revolución Twitter” no sólo distrajo la atención, sino que convirtió en un cliché a otros movimientos de amplias y legítimas bases sociales, como la manifestación contra el G-20, en Londres, en marzo de 2009, que sí se articuló con Twitter.
Cuando las aguas tornaron a su nivel, en septiembre de 2009, la “Revolución Twitter” o “Revolución Verde” iraní se reveló sin maquillaje como una hechura norteamericana. Más del 60 por ciento de los mensajes provenían de usuarios de los Estados Unidos y dentro de Irán, se habían expresado contra el gobierno menos de 100 usuarios, de los 10 000 que en ese momento estaban activos en ese país (ver análisis de Businessweek, en junio de 2009).
También se pudo apreciar que Twitter se comportó más como un medio de comunicación y no tanto como una herramienta para la alineación política. Como han demostrado algunas investigaciones, las acciones a través de esta red no influyeron en términos de organización de las protestas, pero sí jugaron un rol importante para mantener cautiva a la comunidad internacional frente a las protestas y enfocar la atención de los medios en estas.
De estonces acá, hemos visto mucha retórica en torno a la Revolución Twitter, pero nada verdaderamente revolucionario hasta la aparición de @chavezcandanga. Eso sí es punto y aparte.
-¿Deben los revolucionarios incursionar en Twitter? ¿Por qué?
Por supuesto. En primer lugar, porque se trata de un foro público en el que convergen millones de personas, básicamente para informarse y establecer comunicación, eludiendo a conciencia la tiranía de la palabra y la imagen única de los medios tradicionales, actualmente en crisis. Estudios recientes han demostrado la preeminencia que ha ido tomando Twitter como fuente de información, particularmente en situaciones de estrés noticioso. En 140 caracteres, la gente puede contrastar decenas de fuentes, provenientes de medios tradicionales, editores independientes, instituciones y ciudadanos comunes. A la vez, es una enorme plaza pública, con más de 100 millones de usuarios, que nadie con un mínimo de sentido político desdeñaría. De Facebook se dice que es el tercer país más poblado del planeta, con 500 millones de “habitantes”.
La izquierda, en toda su historia, ha afrontado el drama de la comunicación y le ha resultado bastante difícil, salvo excepciones, trascender los circuitos en los que gravita su militancia, aquellos encuadrados en las estructuras tradicionales de los partidos y los sindicatos obreros -que siguen en pie, y que a menudo dan respuestas estimulantes a los desafíos de la realidad-. Pero no se puede quedar ahí, y menos ahora. Las llamadas redes sociales, Twitter incluido, propician la expresión de otros movimientos alternativos que han brotado como hongos por todas partes, y que son una fuente de esperanza en la lucha contrahegemónica.
Pero además, por la convergencia de diferentes generaciones y por la imposibilidad de que en 140 caracteres se pueda dar “teque” -apelar a la retórica-, este espacio puede contribuir a descongelar el lenguaje de la izquierda, a incorporar el humor, a tender puentes intergeneracionales y sobre todo, a democratizar la Internet, una carretera de doble vía al borde de la cual estamos viviendo, querámoslo o no.
Una regla general de esta nueva era es que los valores que están en red se fortalecen, cualquiera que sea la herramienta social que interconecte a la gente: Twitter, Facebook, la blogosfera, Youtube… Por tanto, son espacios donde se están produciendo confrontaciones para imponer hegemonías. Si la gente que allí se interconecta se expresa mayoritariamente con valores asociados a la solidaridad y a la justicia, estos valores se harán más fuertes. Dejarle el espacio a la expresión de la derecha y de los valores hegemónicos, es suicida.
-¿Puede Twitter acercar aún más la gestión entre gobernantes-pueblo? ¿Por qué? ¿En qué ayuda?
Elimina los intermediarios, aunque por lógica alguien como el Presidente Chávez que utiliza este espacio para comunicarse con la gente y resolver sus problemas, necesita de un equipo de colaboradores que lo ayude. Aún cuando la comunicación en la red está mediatizada por el elemento tecnológico, está más cerca de la relación cara a cara que la comunicación de masas. La gente siente que se dirige personalmente a él, que llega a la ventana de su móvil o de su computador, que habla con el Presidente. En otras palabras, desdibuja las jerarquías, el papeleo, la rigidez, la despersonalización y otros elementos disfuncionales de la burocracia.
Por sí solo esto supone una ganancia cualitativa en la comunicación entre el gobierno y los ciudadanos, pero el gran reto está en que Twitter trascienda la percepción de que es un vehículo para resolver problemas individuales, a un espacio adicional con el que cuentan los poderes públicos para valorar nuevas perspectivas sobre la administración, mejorar la transparencia en las funciones de gobierno y empoderar a la gente. En la medida en que Twitter crece en popularidad -cosa que en Venezuela es inevitable por la penetración de la Internet y de los celulares-, las preguntas sobre cómo se está utilizando para comunicarse con los ciudadanos se vuelve trascendental.
-¿Es Chávez un fenómeno en Twitter? ¿Por qué?
Absolutamente. Lo fue incluso antes de abrir su cuenta en Twitter. Como publicamos en Cubadebate, horas antes del primer tweets, el Presidente ya tenía cuatro veces más seguidores que el que tuvo el vocero de la Casa Blanca, el usuario a través del cual habla Barack Obama, tres horas después de emitir este su primer mensaje. La cuenta @chavezcandanga ha mantenido un ritmo impresionante de crecimiento, solo comparable con el que tuvo Bill Gates en las primeras horas de su presencia en Twitter (en estos momentos supera los 618 000 seguidores).
Pero el crecimiento de @chavezcandanga es aún más considerable que el de Bill Gates. No se debe perder de vista que Twitter es una aplicación estadounidense y que la mayoría de sus usuarios viven en los Estados Unidos -el 57 por ciento. Menos del 10 por ciento de los que utilizan esta red hablan el español. Por tanto, no hay otro hecho que se le parezca al fenómeno de la cuenta @chavezcandanga en el ámbito del Twitter hispanoamericano, y no hay antecedentes en todo el universo Twitter de un crecimiento similar frente a audiencias afines.
-¿Qué mitos ha derrumbado la presencia de Chávez en Twitter?
El mito de que este era el predio exclusivo de la derecha, que empezaba a acostumbrarse a armar sus campañas políticas y sus revoluciones de mentiritas utilizando este canal de información. Es la primera experiencia de empoderamiento de este instrumento desde un gobierno revolucionario, con el fin de ofrecer un servicio público y estimular la participación ciudadana en el poder. Y esto abre una brecha de esperanza en torno al futuro de la Internet que, como ha dicho Fidel Castro, se ha convertido en el principal caballo de batalla político de la era actual, en la medida en que la red de redes se ha ido convirtiendo en la infraestructura dominante y el control sobre esta es de vida o muerte, política, económica, científica, militar y socialmente hablando.
-¿Tiene Twitter la suficiente fuerza como para montar una misión social, como Misión Chávez Candanga?
-Sí, bastan las estadísticas para confirmar el potencial que tiene este espacio para la información y para la gestión de gobierno. Venezuela posee un notable desarrollo de la red tecnológica enfocada en el uso social. Con los infocentros, el 70 por ciento de los venezolanos tiene acceso a Internet en sus localidades. El 30 por ciento de la población accede directamente desde sus hogares. Venezuela tiene la mayor tasa de penetración de celulares en América Latina, con más de 27 millones de equipos en una población de 28,8 millones de habitantes. El 35 por ciento de los usuarios de Twitter en el país lo hacen a través de celulares.
Twitter es una herramienta, además, basada en la experiencia del SMS, la mensajería de texto en celular, lo que hace posible que personas incluso que pertenecen a la llamada generación analógica -mayores de 55 años- lo puedan utilizar y resuelvan sus problemas de información y comunicación por esta vía. En esto radica buena parte del meteórico éxito de Twitter, sumado al hecho de que está más cerca de un medio de comunicación, que de una red social al estilo de Facebook, donde interactúan mayoritariamente personas menores de 25 años. En Twitter la gente está menos interesada en “buscar” amigos que en encontrar información, y no cualquier información, sino aquella “confiable”. Es muy electiva; elige a quien seguir a conciencia.
Por eso no creo que Twitter sea una moda, como no lo ha sido el correo electrónico, ni la web, ni el iPod, herramientas sumamente populares que escalaron teniendo en cuenta la experiencia de usuario frente a los instrumentos que le antecedieron utilizando el protocolo IP. Y si, como todo indica, se va a quedar, démosle la bienvenida a Twitter, porque no es más que otra manera en que se está expresando una nueva forma de organización social, las redes ciudadanas, con enormes potencialidades para fortalecerse con el uso democrático, crítico, justo y pacífico de la Internet.
-Después de Twitter, ¿qué? ¿Hay otras redes en construcción?
Son muchas las redes sociales que están coexistiendo ahora mismo y sobre todo, hay un proceso de escalamiento de las tecnologías que hacen imposible predecir exactamente cómo evolucionarán. Se ha producido en un laboratorio un conector del tamaño de un átomo. ¿A dónde nos puedo llevar eso? Quién sabe. El futuro dependerá de las necesidades de comunicación de los individuos y de la intervención del mercado, que tiene un papel rector en “la forma de las cosas que vendrán”, como tituló uno de sus libros Luis Rogelio Nogueras, un brillante escritor cubano ya fallecido.
Pero casi todo el mundo coincide en que las conexiones vía móvil son el futuro. De hecho, muchos expertos vaticinan que el próximo boom dentro del universo social online va a ser una red social pensada y basada en la movilidad y la geolocalización. Una consecuencia bastante lógica a mediano plazo sería la segmentación y la especialización de este tipo de servicios sociales. Lo que sucede es que no siempre la red social es quién elige al público objetivo, sino que serán los usuarios quienes modelarán esa red social. Decidirán qué es útil y qué no, a partir de los valores que allí se expresen. Algo similar a la evolución sufrida por Twitter, que nació como un servicio de mensajería en tiempo real, y se ha erigido como una red social que comparte noticias, links, videos, imágenes y páginas de interés: información.
-Cualquier otra reflexión que quieras hacer
Reiterar la advertencia que hacía Eliades Acosta, en su artículo “Con Chávez y la Revolución en Twitter“, que publicamos en Cubadebate: el enemigo aprende de sus fracasos -@chavezcandanga lo golpeó durísimo- y sus “chicos creativos” deben estarse preparando para la contraofensiva. Por tanto, como dicen ustedes: ¡Ojo pelao!
Con @chavezcandanga empezó la era de la Twitter-política revolucionaria | Cubadebate
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios que incluyan ofensas o amenazas no se publicaran.