Editorial. 04 de Junio. Tomado de Diario Co Latino.
Mientras la derecha, en general, y algunas que otras figuras de izquierda no partidarias, se esmeran por buscar o crear abismos entre el Presidente de Mauricio Funes y el partido de gobierno, el FMLN; o negar o invisibilizar los cambios, o negar el rumbo del país, el mandatario y el partido, en los hechos y el discurso, demuestran lo contrario.
El pasado uno de junio, mientras el Presidente Funes daba su informe ante la Asamblea Legislativa, el FMLN hacía lo propio ante los diferentes medios de comunicación.
En su informe, el Presidente Funes destacó, con números, es decir con datos, los logros de su gobierno, pese a la crisis en la que tomó las riendas del país, las que a su vez, fueron reconocidas por el FMLN.
El mandatario insistió, que en casi todo lo actuado refleja un verdadero cambio en el país.
Retó a presentes y extraños, a determinar si no era cierto que, la entrega de uniformes y los útiles escolares a más de un millón de niños, no significaba un cambio en el país.
Retó a presentes y extraños, a reflexionar si la entrega de $50 dólares mensuales a los adultos mayores que residen en 30 de los municipios más pobres del país, no significaba un cambio.
El partido también destacó, de forma más sucinta, en la conferencia y luego en un campo pagado responsabilizado por su comisión política, esos mismos logros que fueron enumerados por el Presidente Funes.
El mandatario, resaltó en su discurso, la nueva forma de gobernar, que tiene que ver, con el consenso, dado de que es un gobierno de unidad nacional, y el hecho de trabajar sin bandera partidaria, solo sometido por el programa de gobierno, cristalizado en el Plan Quinquenal de Gobierno.
En su comunicado, el partido FMLN también hace alusión a la nueva forma de gobernar y al progresivo “esfuerzo nacional para la construcción de un nuevo El Salvador”.
Y, para los que gritan por los cuatro vientos, que el actual gobierno no tiene rumbo, el Presidente Funes les enumeró, en su informe, el rumbo del actual gobierno del cambio: la unidad nacional, el fortalecimiento y ampliación de la democracia, la lucha contra la pobreza, y sentar las bases de un nuevo modelo económico fundado en la producción y el trabajo.
O sea, pues, este gobierno si está realizando cambios y tiene un rumbo definido. Mismo que ha sido y será respaldado por el partido de gobierno, el FMLN.
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