Gabriela Castellón.08 de Junio. Tomado de Diario Co Latino.
El analista político, y catedrático de la Universidad Luterana, Dagoberto Gutiérrez, se quita la gorra que lleva puesta este sábado lluvioso, toma asiento y acomoda su taza con café. No dice una sola palabra, está a la espera de las preguntas. Sin embargo, de inmediato se reflejan en su rostro las ganas de expresar sus opiniones. Critica la relación entre el Órgano Ejecutivo y el Legislativo, pero hace énfasis en la (no) relación que tienen el FMLN y el Presidente de la República, Mauricio Funes. Para el analista, el Ejecutivo está gobernando con el apoyo de las derechas, y necesita que la población lo mire al lado de las izquierdas.
- ¿Cómo ve la relación, en este primer año de gobierno, entre el órgano Ejecutivo y el Legislativo?
La relación entre el poder Ejecutivo y el poder Legislativo es la que corresponde a la relación entre el primer poder del estado, que es el Ejecutivo, y el poder que vota las leyes que hace el Ejecutivo. El Ejecutivo es el Gobierno, quien dirige la política del país, en donde se encuentra el gabinete, donde se hace el presupuesto. El legislativo es un órgano de correlación, pero que no decide las políticas, y tampoco hace la ley. Ahora bien, esa relación cambia en cada gobierno. El actual gobierno es un gobierno sin partido. Gana las votaciones, con la esperanza de la gente de que sería un gobierno de izquierdas, pero gobierna con los partidos de derecha. Eso determina la relación entre el Ejecutivo y el Legislativo. En este caso, un gobierno sin partido.
- Sin embargo, el presidente Funes está cumpliendo con el plan de gobierno del FMLN
El FMLN no tiene absolutamente nada que ver con el Gobierno. Ni el gobierno tiene absolutamente nada que ver con el partido FMLN.
- Y si el FMLN no tiene nada que ver con el Gobierno, ¿qué significa la presencia de cuadros importantes del partido dentro del gabinete?
Has usado la palabra correcta: pre-sen-cia. El FMLN tiene presencia, pero los ministros de Mauricio, que vienen del FMLN, son ministros de Mauricio, y no del FMLN. El FMLN no tiene ministros. Todos los ministros son del Presidente. Y el FMLN tiene ¡presencia! Pero no es ni partido de gobierno, ni partido en el gobierno. Es un drama político.
- En relación al trabajo legislativo, la cantidad de vetos y observaciones que el Presidente ha realizado, y ese ‘choque de posturas’, ¿podría relacionarse con algo positivo, en el sentido de que hay un constante cuestionamiento?
Mauricio fue candidato del FMLN en la campaña presidencial, pero no lo representó en ningún momento. Y, una vez en el Gobierno, el poder Ejecutivo negoció con quien tenía que negociar: con los partidos de derecha. La diferencia entre el partido FMLN y el Gobierno no tiene que ver con la política. No hay diferencias en la política. Probablemente tampoco en lo ideológico. Las diferencias tienen que ver con los espacios.
- Cuando habla de espacios, ¿a qué se refiere?
Con los espacios en la distribución de los cargos de la administración pública. No son problemas políticos.
- ¿A comparación de la relación de las bancadas anteriores, con su partido en el gobierno…
Es que ARENA sí fue partido en el gobierno. ARENA se fundió con el gobierno, y era el partido del Presidente. El presidente no era el partido de ARENA, ARENA era el partido del Presidente. Entonces, la relación con la Asamblea Legislativa era diferente. En este caso no, el Presidente no tiene partido. Pero el partido que lo llevó de candidato tampoco tiene presidente. Mauricio no es el presidente del FMLN, ni el FMLN es el partido del Presidente. Con relación a los gobiernos de ARENA, hay una sola diferencia: este Gobierno necesita que una parte de la población lo mire como un gobierno de izquierdas. Los gobierno de ARENA no necesitaban eso, porque ellos eran un gobierno de la oligarquía, y punto. Pero este gobierno sí necesita. Al ocurrir esto, eso les da oxígeno, incluso internacional, prestigio internacional.
- ¿Cómo ve el tema de los vetos y las constantes observaciones?
Es justamente por eso, porque el Presidente no tiene partido. Y la derecha, en cada tema, pone precio político.
- En relación a los vetos y las observaciones, algunos de los dirigentes del FMLN han expresado que es un mecanismo ‘sano’, que es bueno que el partido no le de todo el poder al Ejecutivo.
El FMLN no tiene absolutamente nada que ver con el Gobierno. Lo que el Gobierno decide, no tiene nada que ver con el FMLN. Esto es importante entenderlo. No es una ruptura, porque nunca hubo matrimonio. Acá nunca ha habido nada. El pueblo debe saber que es mejor un fin espantoso, que un espanto sin fin.
- En el caso de las iniciativas, que hasta el momento ha impulsado el ejecutivo, ¿cree que ha sido suficiente o debería tener más presencia en la Asamblea?
El régimen político del país supone la colaboración de los tres poderes, y deben estar relacionados siempre. En ocasiones, con presión; en ocasiones, con simple relación. La ley, por ejemplo, no se hace en la Asamblea Legislativa, la hace el Presidente que sanciona lo que se hace en la Asamblea.
¿Pero, hasta el momento, cómo ha visto esa relación?
Normal. Natural. El Presidente no tiene problemas, porque tiene el apoyo de las derechas y no necesita del partido FMLN.
No veo como hubiese sido posible un gobierno como el que el sr deja entrever añora: un gobierno verdaderamente de izqueirda sin el esquema politico actual. El frente no hubiese ganado sin Funes. El es quema es bastante fiel a la correlacion de fuerzas electoreras. La alternativa seria un gobierno izquierdista de arengas pero de corta duracion ya sea por el efecto de las balas o por presiones economicas. El maestro critica a Funes y se le olvida que esencialmente quien esta cometiendo un tremendo error politico(visto desde el punto de vista del sr Gutierrez) casi imperdonable es el frente por prestarse a ese jeuego que el sr acusa de ser derechista y en contra de las mayorias.
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