La Opinión del ente controlador para modificar la cláusula que prohibía el arbitraje, permitió seguir con la construcción del tramo II; sin embargo, asocio Copreca-Linares no lo concluyó
sin Avance se encuentra el nuevo proceso de licitación, luego que se declaró desierto en abril. Ya pasaron dos años y la obra sigue abandonada.FOTO EDH / Mario amaya
11 de Mayo. Tomado de El Diario de Hoy.
El arbitraje del Tramo II del bulevar Diego de Holguín, que para las actuales autoridades de Obras Públicas tiene muchas dudas, fue avalado en 2007 por el actual presidente de la Corte de Cuentas de la República, Hernán Contreras, quien dio su visto bueno para modificar la cláusula del contrato que impedía hacerlo, con el fin de finalizar la obra en litigio y evitar un largo y lento proceso judicial.
En varios documentos en poder de El Diario de Hoy se establecen las solicitudes formuladas en su momento por esa cartera de Estado que dirigió Jorge Nieto en la etapa de conflicto con el asocio Copreca-Linares, demuestran que el ente contralor dio su opinión favorable para modificar la cláusula del contrato y permitir el arbitraje, para tratar de desamarrar el nudo gordiano en que había caído el proyecto, con el único fin de que fuera concluido.
Luego de agotar todos los recursos administrativos de audiencia, al final, el MOP le caducó el contrato al asocio de empresas y le dedujo responsabilidades por daños y perjuicios por un monto de un millón 281 mil dólares, así como la ejecución de varias fianzas vinculadas al proyecto por más de cuatro millones de dólares que aún están tratando de ser recuperadas por la Fiscalía General de la República (Ver nota en siguiente página).
La nota enviada, en ese momento, por Hernán Contreras al entonces ministro de Obras Públicas, Jorge Nieto, con fecha 30 de noviembre de 2007, hace referencia a una solicitud hecha por Nieto el 28 de noviembre de ese mismo año donde consulta la posibilidad de modificación de la cláusula que establecía "la renuncia al arbitraje como medio alternativo de solución de conflictos".
En el escrito Contreras hace referencia que en los contratos de ejecución de obra bajo la modalidad de "Llave en Mano existen obras que por su trascedencia y magnitud demandan una resolución inmediata a los conflictos que puedan surgir durante su ejecución, en base al art. 114 de la Ley de esta Institución, solicita nuestra opinión en cuanto a la procedencia legal de modificar en los contratos antes referidos..., estableciendo como medio de solución de conflictos el Arbitraje en equidad previsto en el art. 165 de la LACAP...", indica.
Asimismo hace referencia al título VIII, Solución de Conflictos, capítulo I, Arreglo Directo y Arbitraje de la LACAP, que establece todo el procedimiento a seguir en caso de controversias entre las partes contratantes.
Agrega que en el art. 161 siempre de la LACAP se indica que para resolver las diferencias o conflictos durante la ejecución de los contratos, se observará el procedimiento de las figuras del Arreglo Directo y el Arbitraje de árbitros arbitradores.
El presidente de la Corte de Cuentas es contundente en la misiva al responder que la cláusula por la cual se renuncia al arbitraje "puede ser objeto de modificación para adecuarla a los procedimientos ya establecidos en la ley" que permitan la conclusión del proyecto.
"Si bien es cierto en los contratos Llave en Mano, se prohíbe la introducción de órdenes de cambio y de ajustes de precios, en el presente caso (Diego de Holguín Tramo II), no se trata de ninguna de estas dos figuras, sino que de una modificación de forma, la cual es viable realizar", detalla la nota.
Obra sólo tenía 54 %
El tramo II de la Diego de Holguín, según la resolución de liquidación por caducidad BNo.007/2009, con fecha 11 de mayo de 2009, en poder de El Diario de Hoy, los trabajos solo tenían un avance físico en obra del 54.84 por ciento por parte del asocio Copreca-Linares, quedando pendiente el 45.16 por ciento.
Durante esa liquidación, Obras Públicas condenó con multas por diferentes motivos a la empresa constructora, por ejemplo: incumplimiento en la obligación contractual por el retiro de maquinaria, incumplimiento por la obligación contractual respecto a la gestión de adquisición de derechos de vía.
Además, según el MOP, incumplió con el progreso de la obra y el programa de trabajo físico financiero, responsabilidades con respecto a los servicios financieros y el mantenimiento de la obra durante el proceso de construcción.
Algunos Obstáculos
Desde su inicio, el tramo II de la Diego de Holguín tuvo muchos obstáculos para su construcción. Inicialmente la alcaldesa Violeta Menjívar paró la construcción del proyecto al justificar que una porción donde se construiría era reserva forestal y por tanto una área protegida.
El punto en disputa se ubica adyacente a la avenida Jerusalén y a pocos metros de la Escuela Militar.
En marzo de 2006, Menjívar acusó al Ministerio de Obras Públicas de realizar una destrucción "bárbara" de los árboles en la zona del proyecto y días después denunció al titular de esa cartera de Estado ante la Fiscalía General.
La alcaldesa procedió a cercar el 20 de marzo de 2006, con alambre de púas, la zona donde, según ella, pertenecía a la reserva y a la comuna.
Ese impasse provocó que meses después, el tramo II de la Diego de Holguín fuera rediseñado modificando el trazo inicial, lo que implicó a la Escuela Militar ceder parte de su terreno para dar espacio a la nueva carretera.
El siguiente impasse fueron varios derechos de vía, siempre con la anterior comuna que dirigía Menjívar, ubicados en las cercanías de Casa Presidencial, y los cuales ya fueron cedidos por el actual alcalde, Norman Quijano, con el fin de que se concluya la millonaria carretera.
El último obstáculo fue con la empresa constructora a la cual Obras Públicas le atribuyó una serie de incumplimientos y retrasos que culminaron con la caducidad del contrato y la liquidación parcial del mismo.
elsalvador.com, Corte de Cuentas avaló arbitraje en Diego de Holguín II
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