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2010/04/11

LPG-Una guerra en la derecha

ARENA no es toda la derecha. Pero, por mucho tiempo, fue el principal grupo de la derecha. De hecho, era el punto de referencia incluso antes de ser gobierno, gracias a la convicción de su líder y fundador, Roberto d'Aubuisson.

Escrito por Luis Laínez. 11 de Abril. Tomado de La Prensa Grafica.

 

Por 20 años, ARENA lideró la derecha, mientras fue gobierno. Ahora sigue siendo importante, pero, con las deserciones de GANA, ha perdido en la Asamblea Legislativa el peso que había ganado en las elecciones. Los comicios pasados habían repartido el poder a partes casi iguales entre ARENA y el FMLN en el Primer Órgano del Estado. El PCN volvió a utilizar con magistralidad el sistema de cocientes y residuos para convertirse en la tercera fuerza parlamentaria y, de paso, en lo que ellos llaman “el fiel de la balanza”, que no es otra cosa que el grupo que define, con sus votos, si ARENA o el FMLN se imponen en la Asamblea.

Sin embargo, al perder ARENA el Ejecutivo y llegar un relevo en su dirigencia, se desencadenan las rupturas que hoy estamos viendo. Los grupos más tradicionales al interior de este partido reclamaron la derrota en las urnas a la cúpula que impuso al candidato y comandó la campaña electoral.

Se pasaron facturas y el grupo que dirigió el partido tricolor buscó un nuevo instrumento político, debido a que en ARENA se le cerraron los espacios. Fue así como surgió la llamada Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA), con la deserción de 12 diputados, todos muy cercanos al ex presidente Antonio Saca, quien, como presidente del partido, había avalado e incluso impulsado sus candidaturas.

Por eso fue un paso lógico la expulsión de Saca. Si los mandos medios de la estructura que él creó y le dio soporte a su conducción en ARENA ahora desertaban, ¿no era acaso porque seguían la directriz que emanaba de la cabeza de esa estructura?

La más reciente deserción, de Rodrigo Samayoa, terminó por levantar el estado de emergencia en ARENA simple y sencillamente porque entre esos 18 diputados que aún le quedan en la bancada hay varios que fueron puestos en esas candidaturas por presión de Saca, a quien le guardaron lealtad. Por eso se entiende el comunicado que firman esos parlamentarios y el compromiso que adquieren de no “traicionar” a la Patria y pasarse a GANA.

GANA, para adelantarse a las denuncias de compra de voluntades, denunció, a su vez, que eran víctimas de amenazas de muerte. Ese es el panorama que nos pintó esta parte de la derecha esta semana: los que fueron parte del mismo colectivo hoy se acusan de asesinos y corruptores.

El otro segmento conservador espera ver qué sale de todo esto. El PCN recibió el viernes a Saca, en la Asamblea Legislativa, apenas un día después de que Milena Calderón de Escalón le dijo al ex presidente y a GANA que tuvieran en regla sus cuentas porque iban a investigarlas para dar con el dinero que han ofrecido para comprar voluntades.

El PCN sigue valiendo su peso en oro: solo con el FMLN supera la mayoría simple. Sumado con GANA superan la mayoría calificada. Esto último también pasa si en lugar de GANA está ARENA. Incluso, toda la derecha parlamentaria obtiene 47 votos, de modo que las posibilidades de negociación son muchas.

Miguel Ahues, de GANA, dice que no comparten la ideología del presidente Mauricio Funes, pero están dispuestos a darle gobernabilidad. Sin embargo, fue esta bancada legislativa la que aprobó con el FMLN las reformas al RNPN que FUSADES y otras gremiales consideran inconstitucionales. A ver si Funes cree que es una contribución a la gobernabilidad.

Una guerra en la derecha

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