El país se encuentra amenazado, no se sabe a ciencia cierta el rumbo que lleva, no se puede tener ninguna fe en el gobierno actual, máxime con las señales y últimas actuaciones que han sucedido, y que nos dan la pauta para afirmar que estamos viviendo: 1) un clima de incertidumbre; 2) inseguridad e inestabilidad; 3) están en riesgo la paz social y la democracia; 4) no hay respeto al orden jurídico y a la institucionalidad; 5) los homicidios y las extorsiones imparables. Hemos llegado al caos y a la anarquía más destructiva. Esto nadie lo puede negar.
Escrito por Ricardo A. Novoa Arciniegas.31 de Julio. Tomado de La Prensa Gráfica.
La última señal es el intento de allanamiento a la residencia del ex presidente Armando Calderón Sol, sin orden judicial, efectuada por la PNC, que debería ser la institución que resguarda la seguridad y que hoy se encuentra politizada y sirviendo consignas de políticos enquistados en el partido del gobierno.
En todo esto el FMLN no ha querido dar la cara y no tiene respuesta alguna. Así las cosas, Funes por un lado y los líderes del Frente por otro, plegados estos últimos a los designios de seguir a Castro y Chávez, aterrizando en el socialismo XXI que es adonde ellos nos piensan llevar.
En cuanto al aparato estructural del gobierno, le falta compactación y se ha comenzado con el adoctrinamiento en la educación de la juventud; infiltración de médicos cubanos en áreas de salud, creación de organismos para el control territorial, manejo de comités de barrios, etc... No hay un plan integral que se haya puesto en marcha, contra la delincuencia, la violencia y todos los ilícitos. Ya la población honrada se encuentra desesperada y aterrada.
A esto habría que agregarle el desempleo creciendo, las huelgas incontrolables, el cierre de hospitales y consultorios, aumento de los precios de los productos de la canasta básica. En muchos casos la falta de transporte colectivo perjudica a la población así como el cierre arbitrario de carreteras. Ya es tanto lo ilegal que la situación se ha vuelto incontrolable porque la autoridad y los funcionarios no pueden ordenar ni aplicar las leyes; se cierran negocios y nada vuelve a la normalidad.
Esta es la triste situación en que vivimos, y como si fuera poco a los diputados les ha dado por renunciar, se cambian de partido e ideología como cambiarse la camiseta. En resumen hemos entrado en un caos total.
Definitivamente el “gobierno del cambio” no ha llegado todavía, no ha comenzado a fijar ningún rumbo, hasta sus “diferencias internas” se ven como sin coherencia, sin solidaridad, sin liderazgo. ¿Cómo es que la actual dirigencia del Frente pretende lograr un cambio de rumbo? Debería de limpiar la casa, juzgando a los que hayan defraudado al fisco, capturando a todos los delincuentes y comenzar cuanto antes a poner orden y disciplina con funcionarios no corruptos y después sentémonos a dialogar y debatamos políticas serias desconociendo los gobiernos populistas que venden fracasos y gobiernos dictatoriales.
Hagamos un alto en el camino, estamos todavía a tiempo, busquemos con sólido razonamiento un futuro digno, donde el diálogo impere y no nos confunda el discurso barato.
Los salvadoreños debemos encontrar un camino que nos conduzca definitivamente a una situación distinta a la que en el presente nos encontramos pues si no es así los hechos y las circunstancias que vivimos en la actualidad terminarían imponiéndonos un régimen al estilo Castro y Chávez y eso nunca lo aceptaremos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios que incluyan ofensas o amenazas no se publicaran.