La medida es impulsada bajo el esquema de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE), con lo cual se busca que los empresarios ayuden al bienestar de sus empleados y su grupo familiar.
Escrito por Ricardo Flores.27 de Febrero.Tomado de La Prensa Gráfica.
“Se trata de que el personal de una compañía pueda mantener un equilibrio sano entre su vida laboral y familiar, y esto a su vez se traduzca en un mayor compromiso por parte de los empleados hacia la empresa.”
Hugo Cruz, experto en RSE
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La preocupación por la constante pérdida de empleos y por el auge de la criminalidad en el país es el motor que ha impulsado a un grupo de empresarios salvadoreños a buscar una solución a esta problemática al interior de sus propias compañías.
La Fundación Empresarial por la Responsabilidad Social Empresarial (EMPREPAS) realiza un esfuerzo por impulsar en El Salvador la ejecución de esta política basada en la retribución que hacen a la sociedad los privados a través de sus acciones, más allá de lo que exige lo legal.
La idea de EMPREPAS se basa en que las empresas hagan suya una de las siete aristas que forman lo que se conoce como Responsabilidad Social Empresarial (RSE), la cual se basa en que los empresarios se preocupen por sus mismos colaboradores, lo que se conoce técnicamente como interés por el público interno.
Dentro de este contexto, esta fundación se muestra convencida de la necesidad de apostarle a un balance entre trabajo y la familia. Lo cual significa que los empleados se sientan apoyados por los encargados de las compañías, y que ese apoyo se extienda hasta el grupo familiar de cada empleado.
De acuerdo con Hugo Cruz Rivas, experto en esta temática, con esta medida se puede impactar positivamente en los sectores más vulnerables de la sociedad y donde más clima de inseguridad se percibe.
“En cada una de las empresas encontramos muchas madres solteras, muchas mujeres que se ven obligadas a trabajar porque el salario del marido no alcanza. Todo esto implica que se genera un ambiente donde hay hijos desatendidos”, indicó el experto en la temática.
Para Cruz, está probado que este abandono por parte de los padres trae consecuencias psicológicas y sociológicos: “Detrás de esto (abandono de los padres por el trabajo) está el tema de la delincuencia, drogadicción, vandalismo y otras deficiencias como puede ser una parte afectiva de la persona que no está bien desarrollada porque no hay papá y mamá que esté pendiente de los hijos”.
Con este panorama, es que la fundación busca aportar a la solución de los problemas de seguridad y competitividad con el proyecto denominado “Pacto de integración y armonización trabajo-familia”, con el cual, según el especialista en la temática, se tiene como propósito sensibilizar a los empresarios de la región en una nueva orientación de la RSE que pone a la familia en el centro de escena como creadora de capital humano y social.
“Se trata de que el personal de una compañía pueda mantener un equilibrio sano entre su vida laboral y familiar, y esto a su vez se traduzca en un mayor compromiso por parte de los empleados hacia la empresa”, manifestó Cruz Rivas.
Las actividades que los empresarios pueden llevar a cabo en beneficio de sus colaboradores radican en ser condescendientes con permisos, vacaciones, becas, y cualquier otra que lleve de por medio el interés de que el empleado se sienta comprendido por la compañía. Este pequeño cambio, consideran los impulsadores, se traduce en menos violencia social.
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