Norma Guevara de Ramirios.14 de Febrero.Tomado de Diario Co Latino.
El 28 de febrero próximo se cumplirán 20 años del fallecimiento en México del Doctor Guillermo Manuel Unjo. Abogado, político, patriota luchador de nuestro país que dejó una huella imborrable por su pensamiento y su acción.
Memo Unjo, como le conocía el pueblo, era el socialdemócrata más consecuente con la época en que le tocó vivir. Su reconocida capacidad académica la convirtió en fundamento de sus convicciones políticas y de su sensibilidad social.Era un real enemigo de la dictadura como régimen político, sabía que la democracia no se abriría paso sin derrotarla, y ese convencimiento lo llevó a comprender que en la lucha por la democracia, era necesaria la valentía, la lucha, la confluencia de luchadores procedentes de distintas corrientes políticas.
Ungo fue de los fundadores del Movimiento Nacional Revolucionario MNR que junto con la Unión Democrática Nacionalista UDN y el Partido Demócrata Cristiano, PDC, constituyeron la Unión Nacional Opositora que participó en las elecciones presidenciales de 1972 en las cuales, el democristiano Napoleón Duarte era el candidato presidencial y Ungo ,el candidato a la Vice Presidencia. Ya sabemos que ganaron, que el fraude les impidió ejercer la voluntad real del pueblo.
Fueron exiliados después que unos militares intentaran apartar a los fraudulentos para darles lo que en votos habían ganado. Ungo regresó el mismo año y siguió su lucha junto al pueblo por abrir camino a la democracia.
Después del golpe de la juventud militar en octubre de 1979, Ungo integró en representación del Foro Popular, la Junta Revolucionaria de Gobierno; intentó llevar adelante una proclama de orientación democrática, pero sectores ultraderechistas siguieron reprimiendo al pueblo; Ungo se retiró; y en Abril de 1980 integró el Frente Democrático que unido a la Coordinadora Revolucionaria de Masas conformaron, en Abril del mismo años, el Frente Democrático Revolucionario FDR.Ungo y el MNR comprendieron la decisión de la lucha armada que se abrió paso masivamente en ese año, bajo el nombre de Dirección Revolucionaria Unificada DRU. Como fuerza política, el FDR decidió acompañar, sin ser parte de la forma armada de la lucha.
Guillermo Manuel Ungo se convirtió en Presidente del FDR y aliado con el FMLN constituido en Octubre de 1980, realizó un valioso papel de denuncia y de relaciones diplomáticas en todo el mundo. A esas alturas el liderazgo de Ungo era universal, la socialdemocracia lo eligió como Vicepresidente de la Internacional Socialista (IS). Abogó por el diálogo, por la negociación política, por el respeto de los derechos humanos, condenó las represiones, las matanzas, la persecución a la Universidad de El Salvador, a los sindicatos, a las iglesias, y defendió con vehemencia el derecho a la acción política de la sociedad en medio del conflicto armado.
Memo Ungo, como aliado del FMLN, compartió el compromiso de observar las normas del derecho internacional humanitario, que representaba por parte de la guerrilla, respeto a los prisioneros de guerra, respeto a la población civil. Participo en los primeros esfuerzos de dialogo que se desarrollaron entre el gobierno y el FMLN en La Palma y la Nunciatura Apostólica. Viajó muchas veces a los foros de Naciones Unidas, al Congreso de Estados Unidos, era recibido en audiencias sobre derechos humanos en El Salvador y promovió la sensibilidad de la comunidad política internacional siendo parte de misiones del FDR – FMLN.
Luchó por abrir espacios a la participación política electoral en medio del conflicto. Ungo y otros políticos retornaron al país a ejercer ese derecho y en las elecciones de 1989 participo de nuevo. En 1991, el MNR era parte de una coalición denominada Convergencia Democrática que participó en las últimas elecciones en guerra. En medio de esa campaña electoral de 1991, el 28 de Febrero, un cáncer puso fin a su vida.
Aquél día, en la Iglesia El Rosario, nos aprestábamos a recordar con una misa a las víctimas de la masacre del 28 de febrero de 1977 cuando recibimos la triste noticia de su fallecimiento. Vino el final de los acuerdos de paz, la lucha por su cumplimiento, la batalla entre transición al neoliberalismo y la lucha por afianzar el curso democrático; y, en toda esa lucha, e incluso ahora, con un gobierno de cambio, la frase infaltable de Ungo, en el sentido de que se requiere un régimen de mayorías para mayorías, sigue siendo justo.
En la acción por la justicia se hace justicia a luchadores como Ungo, Monseñor Romero, Schafik Hándal y todos los héroes y mártires; por justicia y para fortalecernos en la lucha de hoy. Rindamos homenaje a Guillermo Manuel Ungo, honremos su memoria defendiendo a las mayorías, en democracia.
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