La crisis por la que ha pasado ARENA, como las enfermedades graves, se manifiestan por un síntoma, una pústula, un crecimiento anormal que indica un tumor... Los eventos que culminaron con la deserción de 12 diputados y la expulsión de Tony Saca fueron el síntoma; la enfermedad era más complicada que una revancha por la derrota. Según parece le están dando el tratamiento adecuado, revitalizando al enfermo y volviéndolo a la salud y fortaleza necesaria. Esta es una excelente noticia para la democracia, que necesita del balance de una oposición fuerte. También para los temores de que el FMLN nos lleve a un régimen socialista-autoritario, que sería más fácil, como lo dijo un dirigente del Frente. “El momento es ahora que la derecha está dividida”.
Escrito por Rafael Castellanos. 17 de Febrero. Tomado de La Prensa Grafica.ARENA se fue enfermando en el tiempo; 20 años en el poder son muchos y propician que los gobernantes se confundan, actúen arbitrariamente como que el poder les pertenece, olvidando que está prestado solamente; que se sientan todopoderosos, que escuchen solamente al grupito que los rodea y les dice cada día que son la maravilla del creador. Y se lo llegan a creer, y cuando algún sensato desaprueba, cae en desgracia.
Esa conducta se acentuó con Saca, que inició con buenas ideas y programas, buenos elementos en su gabinete, pero con el tiempo se obsesionó con el culto a su imagen, con el ejercicio del poder total y se ha venido develando que lo ejercía comprando voluntades con maletas que salían de Casa Presidencial llenas de efectivo, votos, políticos de oposición, un poder judicial favorable y hasta intervenciones de diputados del Frente atacando a Funes durante la campaña, según anunció alguien en su momento, y así sucedió.
Los rumores de corrupción eran muy fuertes y a algunos, muchos, nos costaba creerlo, buscábamos la fuente del dinero en licitaciones amañadas y parecía que la mayoría andaban bien. Las revelaciones recientes de la obscena cantidad de millones que fueron trasladados a la “partida secreta” para uso discrecional del presidente dieron la respuesta. Corresponde a la Fiscalía investigar de oficio los destinos de tanto dinero, como exige el FMLN.
ARENA se enfermó cuando los gobernantes fueron matando la mística de sus militantes, sustituyéndolos por gente a sueldo. Se fue enfermando cuando perdieron de vista los principios por intereses y el partido tendió a confundirse con el Gobierno.
Tenía que perder la presidencia eventualmente —quizá habría sido mejor antes, pero no fue sino hasta ahora— y la temida llegada del FMLN, que era la amenaza con la se acallaban críticas. Ahora la izquierda está en el poder con un presidente moderado, con poca base política propia y un partido fuerte que ha anunciado frecuentemente que va tras su proyecto socialista autoritario.
La expulsión de Saca, la defección de sus seguidores, la recomposición de sus cuadros internos, la unidad de los principales líderes, la inclusión de nuevos, buenos elementos dan la confianza de que ARENA se recupera aceleradamente. Es importante que reencuentre su ideario político de crecimiento económico, combate a la pobreza en libertad y se distancie de la percepción de que el partido solo favorece a la gran empresa, aunque algún gobernante lo hiciera.
En 2012 debe obtener tantos diputados como tenía, lo cual se ve probable. Son elecciones locales realmente, alcaldes y diputados, difíciles de juzgar desde un escritorio en San Salvador. Ojalá sigan así y saquen muchos diputados, eso indicaría como se ve 2014 y si, en efecto, ARENA puede ser el dique de contención al proyecto socialista-autoritario que desea imponer el FMLN y la población rechaza en las encuestas.
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