Ricardo Chacón. Sábado 25 de Julio. Tomado de El Diario de Hoy.
Hay una funcionaria del sistema de justicia, que cuando era jueza de menores, frecuentemente expresaba sus posiciones críticas en torno a las políticas de seguridad del gobierno de turno; ahora, que es parte del nuevo gabinete no sólo ha perdido toda la visión crítica, sino que justifica la grave situación actual.
Hay 12 homicidios diarios, un poco menos de lo que había en los meses anteriores; no es una cifra pico, no han crecido los homicidios en este gobierno, justificó la funcionaria; aunque también dice que se trata de una cifra escandalosa.
Claro que es escandaloso que decenas de salvadoreños sean blanco de la violencia delincuencial, que la impunidad reine y que el Estado, en su conjunto, sea incapaz de brindarles seguridad a los ciudadanos.
Ahora bien, no me extraña el cambio de esta funcionaria que ahora forma parte del equipo de gobierno, que tendrá que enfrentar en directo la delincuencia en el país.
Lo que no puedo aceptar, y lo digo claramente, es que la funcionaria nos pida a los periodistas "ser más veraces al informar", y lo dijo en el contexto de las escandalosas cifras de homicidios.
Y es que hacer información noticiosa, como lo he hecho desde hace muchos años, se caracteriza por ser responsable en el manejo de los datos, pero también tener la decisión de revelar a la población lo que sucede a su alrededor.
Todavía recuerdo cuando un anterior director de la PNC, acuerpado por el equipo político del gobierno de turno, hizo la división entre la violencia social y la violencia delincuencial, con el objetivo de "bajar el impacto" de las altas y escandalosas cifras de homicidios.
Incluso, ha habido por momentos intentos de querer acallar las cifras de violencia, tratando de presionar de una u otra manera, sobre la responsabilidad de los medios y los periodistas en crear una imagen negativa, de violencia, que afecta al país nacional e internacionalmente.
En más de una ocasión, se ha tratado de "cerrar" las fuentes informativas de la policía, en un intento de que los medios de comunicación no informen sobre lo que sucede en el país en el ámbito de la violencia.
Tanto antes como ahora sostengo que no son los medios de comunicación ni los periodistas los creadores de la violencia, tampoco la inseguridad finalizará cuando se deje de informar sobre el tema.
También soy consciente que las estrategias de mediano y largo plazo, integrales, involucrando a todos los sectores de la sociedad, son esenciales para enfrentar la violencia y la inseguridad; en este contexto el papel educativo de los medios de comunicación es importante, como también lo es su labor informativa que permita a la población tener más elementos que le permitan juzgar la realidad.
Esconder los datos o maquillarlos no me parece ni correcto ni ético, tampoco me parece que sin más haya que justificar o atacar en su defecto, las políticas públicas de un gobierno. Cerrar la información como ha querido ahora la PNC no es correcto.
"Mano dura", "Súper mano dura", fueron criticados, probablemente no tanto como hubiesen querido algunos, sin embargo se trataba de una estrategia, a lo mejor equivoca dirán otros, del gobierno de turno, pero que buscaban, y recogían el "sentir" de una población agobiada por la delincuencia que hace de los homicidios, las extorsiones, el robo y toda clase de delitos en una práctica diaria.
Junto a esto, un sistema de justicia débil y poco eficiente para castigar con todo el peso de la ley a los responsables de los crímenes... sin duda alguna, hablar es mucho más fácil que hacer; informar permanentemente de manera seria también es difícil.
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