Escrito por Roberto Cañas. Miércoles 15 de Julio de 2009. Publicado por Diario CoLatino.
El 12 de julio la Asociación de Lisiados de Guerra de El Salvador, “Héroes de Noviembre del 89” ALGES, cumplió doce años de trabajo por las personas lisiadas a consecuencia del conflicto armado. Han sido años difíciles porque los miles de lisiados y lisiadas de guerra de El Salvador han vivido una situación de exclusión, discriminación, maltrato y falta de una estrategia de inserción laboral de parte del Fondo de Protección de Lisiados.
El Fondo de Protección de Lisiados, surge a partir de la firma de los Acuerdos de Paz y la aprobación de la “Ley de beneficios para la Protección de Lisiados y discapacitados a consecuencia del conflicto armado que esta vigente desde 1993.
Es necesario decirlo, desde la firma de la paz, los ex combatientes lisiados tanto del FMLN como del Ejército no han visto satisfechas sus demandas. Las expectativas creadas una vez terminada la guerra en el sentido que se iba atender con eficiencia a la población lisiada y a las familias de los caídos no se hizo. Esto ha originado a lo largo de estos años, fuertes jornadas de lucha.
Es una realidad, que a 17 años de la firma de los Acuerdos de Paz, los lisiados siguen teniendo pensiones de hambre: hoy es tiempo que en el Órgano Ejecutivo se de una respuesta a la necesidad de hacer las reformas necesarias para asegurar una vida digna a los lisiados.
Lo que piden los miembros de ALGES, en su 12 aniversario es justo y se les debe dar respuesta con prontitud: primero solicitan al Presidente de la República sacar de acefalía a la Junta Directiva del Fondo de Protección de Lisiados nombrando al presidente de la entidad. En segundo lugar exigen se tomen las medidas para que termine el atropello a la dignidad y malos tratos que reciben los lisiados y familiares de los fallecidos en el conflicto por parte de la dirección y trabajadores del Fondo.
En tercer lugar ALGES, demanda el diseño de un programa integral de Reinserción Productiva que incorpore créditos productivos, capital semilla, dotación de insumos, y equipo para una actividad laboral y fundamentalmente, el establecimiento de un vínculo entre el Fondo y los beneficiarios para iniciar actividades productivas.
ALGES espera que con el nuevo gobierno se ponga en funcionamiento el convenio con el Instituto Salvadoreño del Seguro Social y se reciba un fuerte apoyo del Ministerio de Salud. Esto facilitara a los lisiados tener servicios integrales de salud y superar el hecho que solo tienen derecho a la atención en salud “únicamente por lesiones de guerra”.
Igualmente necesario es la actualización del monto de las pensiones que reciben los lisiados para que correspondan con el alza del costo de la vida. Se trata de un problema que afecta directamente 6782 asociados de ALGES, 7 mil 582 de la Fuerza Armada y 2 mil 278 civiles y a 340 hijos menores de 18 años sobrevivientes de un discapacitado.
Se debe pedir que se oficialice por decreto de la Asamblea Legislativa el día del veterano de guerra salvadoreño. No podemos ignorar a estos hombres y mujeres que lucharon por forjar una patria nueva. Se debe honrar oficial y nacionalmente la memoria de todos los caídos. Los lisiados y los familiares de los fallecidos en el conflicto deben tener la certeza que el dolor del combatiente de ver caer a sus compañeros o de regresar del conflicto lisiado es un dolor que nos golpea a todos en nuestro corazón.
Hoy se habla de los 40 años de la guerra de las 100 horas con Honduras y nada se dice sobre los lisiados y los veteranos de la guerra civil en El Salvador que tuvo una duración de doce años (1980-1992). Es indispensable desarrollar una política de cambio en el Fondo de Protección de Lisiados; que les de el honor, el respeto y la dignidad a la que tienen derecho estos patriotas, luchadores, a los que debemos el gobierno que hoy tenemos.
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