Comentarios mas recientes

2011/03/02

EDH-Victorias fáciles

 Juan Valiente.02 de Marzo. Tomado de El Diario de Hoy.

Esperaba más de este gobierno. Si bien es cierto que todavía faltan unos tres años para que termine, percibo que terminó antes de haber empezado. Hace unos días escuché a Jorge Melguizo, quien comentó que hace siete años cuando el Partido Verde ganó por primera vez la Alcaldía de Medellín, decidieron aumentar el presupuesto anual de educación del 12% al 40% para cambiar. En El Salvador cuando llegó el FMLN estábamos en 16% y dos presupuestos después seguimos en el 16% del total de egresos. ¿Qué es lo estratégico? ¿Cómo debieron haber gobernado estos dos primeros años para sentar las bases del verdadero cambio? Al parecer hemos estado a la deriva.

Esperábamos que una de las pocas cosas que ciertamente cambiara fuera la forma de hacer política y la forma en que tradicionalmente se han servido de ella los funcionarios públicos. Nos hemos quedado celebrando que el Presidente haya suspendido el viaje de dos directivos de CEL, de la misma forma que indebidamente intervino en el caso del incremento salarial autorizado en el ISSS.

El Presidente ha violado nuevamente la institucionalidad. Ya sea en CEL o ISSS, cada una de estas organizaciones tiene su propia institucionalidad. Obviamente el Presidente tiene mecanismos para incidir cambiando a los funcionarios que desee por capricho o convicción, pero no puede actuar como si fuera Presidente de todo. El respeto a la institucionalidad empieza con su ejemplo.

Pero hablemos de los viáticos. CEL tiene un reglamento general de viáticos que autoriza la junta directiva. Si no le parece al Presidente de la República (quien no es presidente de CEL), puede promover por medio de sus representantes que cambien la política. No es justo dañar la imagen de dos funcionarios que son enviados en misión oficial, porque a juicio de algunas personas los viáticos eran excesivos. No se gobierna con el hígado, ni con el prejuicio. Si buscamos transparencia, el ejemplo lo debe dar el ciudadano Presidente. ¿Cuánto ha gastado en su reciente viaje a Colombia? Si le molestan los viáticos posiblemente abultados, es porque él debe tener una práctica diferente. Es necesario que la comparta para que sus funcionarios comiencen a cambiar las políticas de cada institución.

Si el espíritu se corrompe, casi nada de lo que hagan valdrá realmente la pena. La ética se debe vivir y no sólo exigir a los demás. Las denuncias se deben justificar contra las normas establecidas y no arbitrariamente. Estamos en la delgada frontera de llegar a fomentar una cacería de brujas si no respetamos la institucionalidad y abusamos del poder. Tenemos también el ejemplo de la filtración del documento borrador del Ministerio de Hacienda sobre FUSADES.

No nos demos por satisfechos por haberles manchado el honor a dos funcionarios, uno de ellos ya destituido, sin que se haya demostrado ninguna acción ilegal. El Ministro de Economía al menos ha tenido la entereza de mantener el nombramiento mientras se realiza la investigación. No nos demos por satisfechos con este tipo de victorias fáciles para ganar credibilidad y simpatía popular.

Cambiamos de verdad el talante de la gestión pública. Demos el ejemplo. Respondamos a la historia del fantasma que recorre las calles de San Salvador comprando relojes por montos muy similares a los cuestionados viáticos. Demos información de ingresos y patrimonios. ¿Cuántos funcionarios falta que cumplan con la declaración de probidad? Si hubiera algunos, ellos ya han incumplido la ley, no los dos cuestionados funcionarios de CEL.

Ser funcionario público no es cosa fácil. No sé si a mí me gustaría tal nivel de escrutinio de lo privado. Pero quien quiera servir, tiene que estar dispuesto a niveles insospechados de divulgación de información de sus ingresos y su patrimonio. ¿Cuántos carros tenía antes mi grupo familiar? ¿Cuántos carros tiene ahora? ¿Motos? ¿Yates? ¿Aviones? ¡Qué fácil ha sido sacrificar a estos dos funcionarios! La política sigue siendo perversa y uno de los tantos retos del Presidente y sus funcionarios era precisamente devolverle un poco de dignidad.

elsalvador.com, Victorias fáciles

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios que incluyan ofensas o amenazas no se publicaran.