Comentarios mas recientes

2011/02/19

La Página-El fundamentalismo religioso es la verdadera abominación-Diario digital de noticias de El Salvador

 Escrito por Marvin Aguilar.19 de Febrero.Tomado de La Página.

En la antigua Persia, desde Ciro el Grande, se organizó el imperio en satrapías, designando para su administración a los sátrapas, descansaba el poder del reino en estos y, en su ejército de inmortales: 10,000 hombres que, se sostenía nunca morirían. La tolerancia religiosa que distinguió al zoroastrismo y que fue en cierta medida la religión oficial desde África pasando por India hasta Asia Central hace 25 siglos fue finalmente sustituida no sin violencia por el Islam del profeta Mahoma.

En ninguna otra civilización como en la árabe, el entendimiento de que gobernante y religión están vinculados y bendecidos por Ala ha perdurado tanto. Occidente desde el Renacimiento, que dio a luz entre otras cosas a la secularización y al protestantismo ha caminado no sin tropiezos, por el camino de libertad de culto, laicidad, escepticismo, agnosticismo, ateísmo hacia una sociedad democrática, que si bien perfecta no es, por hoy representa lo más cercano a lo justo para armonizar la diversidad que recién comenzamos a reconocer. Recién decimos, ya que hasta hace poco poseíamos una visión maniquea de la humanidad. En El Salvador el color aún no ha llegado a los ojos de algunos-muchos.

Los moros según los cristianos

Hacer un análisis desde Occidente siempre llevara la terrible perspectiva etnocentrista, imposible obviar ese ángulo. Lo recuerdo por las conclusiones a priori luego de visitar Egipto y Tadzhikistan: del primero concluí que era un país para visitar una sola vez, y en el otro: un Estado fallido. Si bien estas estadías fueron por motivos de investigación relacionadas con mis estudios universitarios, no podía dejar de hacer las reflexiones de tipo político-creencias que observaba en el ambiente, sus realidades eran terriblemente injustas. Justicia era una palabra vacía dentro de los discursos de los líderes de esos países; recordando a Thomas Mann: no se sabía si hablaban de dar a cada uno lo que le pertenecía o, de dar la misma cosa a todos: nada.

Amir, un amigo que evadía el servicio militar iraní en Moscú me decía que para los occidentales era complicado comprender a los países islámicos, esto debido a que pretendíamos medir a las sociedades árabes con nuestros parámetros: para el caso, los Derechos Humanos de los cuales hablamos tanto por este lado del planeta, para ellos les es difícil, imposible en algunos casos aplicar la Declaración Universal de 1948, ya que la entienden como una concepción laica judío-cristiana, que no puede ser aplicada por los musulmanes, porque para ellos es elegir entre la ley divina y las convenciones laicas de otras creencias. Los reformadores islámicos corren el riesgo de morir en el intento.

David Hume planteó sobre que debe centrarse la discusión religiosa: la fundamentación de la religión en la razón y, su, origen en la naturaleza humana. Debía, concluimos con mi amigo de Irán, superar Oriente el miedo y la ignorancia como base de su fe, así como ir despojando al Islam del dogmatismo positivista que lo único que logra es envolverlo de esa naturaleza alienante que tememos en Occidente. ¿Pero, quien o cómo Puede devolverles ese esplendor notable para la humanidad en avances astronómicos, letras, matemáticas y filosofía?

Hacia el protestantismo musulmán

No se sabe aún con claridad a donde va esta “revolución árabe”, pero la agradable ilusión es que esa idea, que jamás el Islam podrá ser reformado por presiones desde Occidente, sino que había que esperar o potenciar que naciera el proceso reformador en Oriente y que con ello no solo se comenzaría a bajar el tono de la voz desde ambas costas, sino además iniciaría la transformación del estereotipo que de allá tenemos aquí y viceversa, ha comenzado. Han sido los jóvenes, que al igual que los nuestros de 1968 son una energía hibrida certera, está resistencia ahora lleva celulares y se conecta vía internet para convocar al cambio. Ojala no sea exterminada o traicionada por los conservadores esta reciedumbre por usar tecnologías occidentales.

La mezcla de Estado y religión ha demostrado que no resuelve la pobreza, desempleo, marginalidad, corrupción y abuso de poder; el integrismo o teocracia ha nuevamente quedado en evidencia que no es buena forma de gobierno civil. Bueno, eso ya lo había dicho antes para nosotros un tal Jesús: dar al César lo que de él es y Dios lo que corresponde. Esto yo lo entiendo así: que si bien Dios creó el mundo, es el hombre que con su hacer se encarga de mejorarlo o no, nos manda pues a pensar en nuevas, democráticas normas que permitan incluir y desarrollarse (¿amarse?) a todos: cristianos, musulmanes, judíos, budistas y no creyentes. Ese es el reto.

Diario digital de noticias de El Salvador

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios que incluyan ofensas o amenazas no se publicaran.