Arnoldo Jiménez regresa a la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP) después de 12 años. Ahora las empresas están enfrentando retos para continuar creciendo, mientras todavía terminan de allanar relaciones con el gobierno de Mauricio Funes y el FMLN. Jiménez quiere unir objetivos y apostar por el crecimiento económico.
Escrito por Lourdes Quintanilla.06 de Enero. Tomado de La Prensa Gráfica.
Debemos trabajar en restablecer esa confianza, tanto en el sector privado como en el sector público: que respetemos lo que estamos platicando.”
¿En qué condiciones recibe la gremial?
Cuando dejé la ANEP, en 1999, el sector privado crecía un 4% o 5% anual. Había expectativas positivas. En estos momentos es diferente. Encontramos un sector privado que no está invirtiendo: cauteloso. Esto representa un reto, y la razón de querer regresar a esta institución es porque el país necesita que trabajemos juntos. Se necesita que el Gobierno invierta lo máximo que pueda en el sector público y cree las condiciones adecuadas para que el sector privado invierta y genere empleos.
¿Los privados, cuánto están creciendo?
Lo que estamos creciendo, al 0.7% del PIB (todo el país), no alcanza a recuperar la producción que perdimos en 2009. Reducimos la producción a niveles del año 2007. La inversión privada, de 10.9% sobre el PIB en 2009, está como antes de los años ochenta, de la guerra. Necesitamos niveles de inversión del 17%. El Gobierno debe generar una política consistente, sin contradicciones entre lo que dice el Gobierno y lo que dice su ministro; que tengamos un solo proyecto, y eso es en lo que toda la sociedad debe trabajar.
¿Cuál es su evaluación de los mecanismos de diálogo que abrió el Gobierno?
Por lo que yo he investigado, las relaciones en el Consejo Económico y Social entre el sector privado y el Gobierno han creado cierta desconfianza. Por ejemplo, se está discutiendo el pacto fiscal. Pero se presenta un presupuesto (general de la nación) sin siquiera consultarlo con los miembros del consejo y donde se violan las medidas acordadas sobre austeridad. En eso debemos trabajar, en volver a restablecer esa confianza, tanto en el sector privado como en el sector público: que respetemos lo que estamos platicando.
Los diputados analizarán nuevas penas máximas para delitos graves. ¿Qué sugiere ANEP?
El combate a la delincuencia no es solo aumentar penas. Debe haber mucha coordinación entre las instituciones. Aplaudimos el ingreso de la Fuerza Armada al sistema de combate de la delincuencia. Prácticamente se ha duplicado el número de efectivos, pero los homicidios no han bajado. No es solo presencia de cuerpos de seguridad, sino una buena coordinación desde el momento que se detiene a la persona, se demuestra su delito, hasta que es sentenciada culpable por el juez. La parte preventiva es inversión social: educación, deportes, cultura, valores... Hace falta mucho y tenemos que comenzar a trabajar, porque si no la situación nunca va a mejorar.
¿Creen que el país logrará seguir recuperándose en 2011?
Los demás países ya comienzan a despegar. Las condiciones que han evitado la inversión privada son el bajo crecimiento internacional, pero también la inestabilidad política, la desconfianza y las condiciones de inseguridad. Si actuamos sobre la delincuencia y la estabilidad política, en cuanto a que el Gobierno respeta el sistema de libertades, entonces la inversión privada va a responder rápidamente.
¿Cuál es la perspectiva frente al año electoral?
He visto varias cosas positivas. Primero, la sentencia de la Corte para eliminar listas cerradas y bloqueadas. En el área de las listas abiertas, sí están todos claros que se va a permitir a la ciudadanía elegir a los diputados. Esto puede cambiar el panorama, porque ya no van a ser diputados elegidos por los presidentes de los partidos políticos, sino que quienes tengan mayores probabilidades de ganar en las elecciones son quienes estén más cerca de la gente. Nos estamos acercando a la verdadera democracia, es un paso positivo. Mejorará poco a poco.
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