Las primeras investigaciones del Ministerio de Salud apuntan manoseo en el expediente de Hilda Herrera, de 62 años, quien se sospecha falleció por no recibir asistencia médica. Ella quedó en un fuego cruzado sindical.
Escrito por Loida Martínez Avelar.22 de Octubre. Tomado de La Prensa Gráfica.
Mi compañera que trabaja en archivo dice que él lo llegó a retirar a las 5 de la tarde. Él es de SITRASALUD.”
Mario Arévalo, de SIGESAL
El expediente está indudablemente alterado, incluso sustrajeron hojas. Se violentó el expediente.”
María Isabel Rodríguez, ministra
social
La ministra de Salud, María Isabel Rodríguez, aseguró que el expediente médico de Hilda Herrera, de 62 años –de quien se sospecha murió por falta de atención médica en el Hospital Zacamil– fue alterado.
Algunas de las hojas fueron sustraídas del documento.
“El expediente está indudablemente alterado, incluso sustrajeron hojas. Se violentó el expediente”, notificó Rodríguez, quien basa su aseveración en un informe verbal del director del Hospital Zacamil, David Franco.
El caso está siendo investigado por una comisión nombrada por el Ministerio de Salud, luego de que los familiares de Herrera acusaron públicamente a un enfermero de no brindarle atención médica. También fue trasladado a la Fiscalía General de la República, donde la misma ministra denunció al sindicato por la toma de hospitales.
Hilda estaba ingresada debido a que padecía de diabetes y presentaba infección en la pierna izquierda, producto del rechazo de unos clavos colocados.
Un “busque un megáfono y grítelo, talvez la oyen” habría sido la respuesta que recibió la paciente cuando solicitó asistencia al sentirse mal, aseguran los familiares, quienes no denunciaron judicialmente el caso.
El Sindicato General de Empleados del Ministerio de Salud (SIGESAL) se desvinculó de los señalamientos. Mario Arévalo, secretario general de la organización, negó que sus afiliados hayan eliminado hojas del expediente clínico: “Nosotros no tocamos el expediente, ninguno de los compañeros de la organización”. Tildó los señalamientos como parte de un espectáculo.
Al mismo tiempo, Arévalo responsabilizó al doctor Carlos Gamero, jefe de epidemiología del Zacamil, por el extravío de las hojas. “Mi compañera que trabaja en archivo dice que él lo llegó a retirar a las 5 de la tarde. Él es de SITRASALUD", acusó Arévalo, en alusión a que este sindicato se opone a las nuevas demandas por revisar el escalafón de los empleados de Salud.
El deceso ocurrió en el tercer día de protestas de SIGESAL y que desembocó en el cierre de unidades administrativas de 18 hospitales públicos del país, como medida de presión para un bono de $300 para empleados.
Por la acción, Salud notificó 4,813 consultas suspendidas, 120 cirugías sin realizarse y otros 3,466 servicios médicos obstaculizados.
Por la acción, la ministra de Salud denunció a 11 sindicalistas ante la FGR.
La falta de autorización para autopsia y las hojas desaparecidas son obstáculos para aclarar los hechos, afirmó la ministra.
Sin embargo, las entrevistas a pacientes y empleados son parte fundamental en la investigación. “No podría prejuzgarlo. Lo que necesitamos en corroborar las declaraciones con todo lo que tenía que haber en el expediente”, aclaró Rodríguez.
El enfermero señalado está en proceso de investigación. Mientras tanto, sigue realizando sus labores en el centro médico.
De comprobarse su culpabilidad, el empleado será despedido.
En una entrevista, el profesional de la salud se defendió y negó las acusaciones en su contra: “Es mentira lo que se ha dicho de mí. Yo atendí a la señora en todas las rondas que hice. Hay pacientes que son testigos”. Oculta su identidad.
Por el momento el ministerio y SIGESAL mantienen una negociación que es mediada por la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) y su titular, Óscar Luna.
Una de los acuerdos para que el sindicato entregara los hospitales, fue que no se tomaran medidas contra el personal que participó en las tomas.
El otro bloque de sindicalistas denunció que el ministerio no trata igual a los trabajadores que se tomaron la lavandería del Hospital Bloom, quienes dicen están amenazados con ser despedidos. Salud ha advertido que agotará las investigaciones en ambos casos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios que incluyan ofensas o amenazas no se publicaran.