Contra Punto-OEA: Cárceles salvadoreñas no sirven para rehabilitar - Noticias de El Salvador - ContraPunto

OEA critica duramente el hacinamiento, la falta de programas de readaptación, así como malos tratos a los presos y a los familiares de estos cuando acuden a las visitas

Por Magdalena Flores.09 de Octubre. Tomado de Contra Punto.

SAN SALVADOR

– Las cárceles de El Salvador no cuentan con las mínimas condiciones para garantizar la rehabilitación ni la reinserción de los internos debido a que los 19 penales están en condiciones “degradantes”, dijo este viernes el relator de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Rodrigo Escobar Gil, al presentar el informe preliminar sobre la situación penitenciaria local.

“No están dadas las condiciones para que las cárceles en El Salvador sean medios que faciliten la reinserción o la resocialización, obviamente habrán casos excepcionales de ciertas personas que hagan un gran esfuerzo, pero la verdad es que las condiciones no están dadas para que se cumpla”, señaló Gil.

El hacinamiento, la mala alimentación, tratos degradantes en las requisas, falta de talleres y centros de educación en los recintos, entre otros, son algunas de las principales faltas en las cárceles de este país centroamericano que no cuenta con una política penitenciaria en la dirección de respetar los derechos humanos de los reclusos, sentenció Gil.

Para nadie es un secreto que las cárceles de El Salvador están rebalsando pues éstas tienen capacidad para albergar a unos 8,000 reclusos, pero actualmente tienen cerca de 24,000, es decir que existe un hacinamiento de más del 300%.

Aunque el funcionario internacional reconoció que el gobierno tiene voluntad para comenzar a trabajar y disminuir esta problemática. De acuerdo a Gil es importante trabajar en este aspecto porque el “hacinamiento provoca violencia, desorden, delincuencia en las cárceles, enfermedades, provoca mil problemas”, recalcó.

La relatoría de la OEA, realizada entre el 5 al 8 de octubre, determinó también que los reos no cuentan con las mínimas condiciones para satisfacer sus necesidades básicas. En “cuanto a la alimentación proporcionada tiene graves deficiencias en cantidad y en calidad y su entrega se realiza en forma degradante”.

“En general, las condiciones de salubridad, sanitarias y de higiene son deplorables”, detalla el informe preliminar.

El relator indicó también que durante las requisas lo reos adultos y menores son sometidos a malos tratos físicos y psicológicos, y que incluso, les destruyen y roban sus cosas personales.

“Por más grave que sea el delito que haya cometido una persona en un estado de derecho que se funda en la dignidad de la persona humana, esa persona siempre tendrá derecho a una resocialización y nunca perderá la condición de ser humano, no se le pude dar el trato de un animal”, dijo Gil.

OEA crítica medidas dictadas por gobierno para controlar penales

También la relatoría arremetió contra alguna de las medidas que el mes paso impulsó la Dirección General de Centros Penales (DGCP) para controlar a los reclusos que a principios de septiembre estuvieron en estado de rebeldía por la entrada en vigor de la Ley de Proscripción de Pandillas.

La DGCP anunció el 13 de septiembre que la visita de menores a los recintos penitenciarios estaba prohibida debido a que tenían información que el ingreso de menores podría ser utilizado para secuestrarlos y en caso de amotinamiento no permitir el ingreso de la Unidad de Mantenimiento del Orden (UMO), de la Policía Nacional Civil.

De acuerdo al relator, dicha medida afecta el derecho fundamental a la familia, ya que los padres detenidos tienen el derecho de ver a sus hijos.

Además indicó que el ejército está abusando en sus atribuciones, pues someten a los familiares que acuden a visitas a determinadas formas de trato degradantes, como los registros vaginales y anales a las mujeres. Esta es una práctica generalizada en los distintos centros penitenciarios, la cual está prohibida internacionalmente, dijo Gil.

Un aproximado de 1.500 soldados ha sido capacitado para intervenir los centros penales, debido a que se considera que desde las cárceles se planifican y ordenan actos delictivos como secuestros, extorsiones y asesinatos. Desde junio están proporcionando seguridad en las cárceles.

Para hacer este tipo de registro es mejor utilizar medios tecnológicos que no son muy costosos, dijo Gil. “Por ejemplo, hay una silla que detecta los objetos ílicitos que pueda llevar la persona en su cuerpo, o el aparato que todos conocemos que le pasan a las personas para detectar si lleva objetos ilícitos; en cuanto a la droga existen perros entrenados”, sentenció.

Aunque también expresó que se puede utilizar el criterio, ya que una persona de muy avanzada edad que va a ver a su hijo no se prestaría para entrar objetos ílicitos.

Lo cierto es que los familiares se prestan para ingresas objetos ílicitos, ya sea por la vagina o el recto.

Hasta agosto de este año la Policía Nacional Civil había decomisado en 13 cárceles 13,894 objetos ílicitos.

Por todos los puntos antes expuestos, la relatoría de la OEA determinó que el sistema penitenciario salvadoreño sufre serias deficiencias estructurales, las cuales son fundamentalmente el resultado de la falta de políticas públicas y proyectos orientados a lograr que el sistema cumpla realmente con sus fines constitucionales.

“El fin de la cárcel es el de la socialización, la rehabilitación y la reinserción social de la persona que ha delinquido pero si las personas se encuentran en estás situaciones degradantes pues realmente no se va cumplir la finalidad de la pena”, sentenció Gil.

ContraPunto intentó conocer la posición de la DGCP, pero no se posible después de varios intentos con el personal de comunicaciones para contactar a un funcionario autorizado.

Cárceles salvadoreñas iguales a las de Latinoamérica

A pesar de las duras críticas al sistema penitenciario el relator reconoció que la realidad de las cárceles salvadoreñas, no dista mucho de los recintos penitenciarios de América Latina.

“Lo cierto es que en todos los países de América, especialmente en los países de América Latina, las condiciones en las que se encuentran las personas privadas de libertad son deplorables”.

“El hacinamiento y sobre población carcelaria, la obsolescencia de infraestructura física, la mala situación de mantenimiento de las instalaciones físicas, hidráulicas, eléctricas, los problemas de salud, de falta de educación, talleres, son problemas comunes en América Latina”, dijo.

De acuerdo a Gil en otros países ya comenzaron a adoptar políticas públicas orientadas a solucionar esta grave situación penitenciaria.

Indiferencia de los políticos

“La situación en las cárceles es una situación que a los políticos no les interesa resolver, lo que les interesa a los políticos es hacer obras públicas para que la comunidad vea y repercutan en una rentabilidad política, que repercuta en votos”.

“Las inversiones en cárceles, no es una inversión políticamente rentable por eso siempre los países de la región han estado muy rezagados en está materia”, detalló

El jefe parlamentario de Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA), Nelson Guardado, reconoce que es necesario mejorar la situación de los centros penales, pero también dijo que no compartía que los presos por estar encerrados no representan un interés para un partido.

“Ellos tienen familia, todos tienen familiares y todos esos familiares también tienen derecho y también votan, así que no podríamos compartir que son gente que están abandonadas”.

Por su parte, Benito Lara, del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) dijo que “hay que revisar la base que él tiene para dar esa afirmación, y

si lo que él dice es cierto, estamos en la obligación como gobierno de tomar algunas medidas porque alguna de las cosas que nosotros hemos planteado es que la seguridad publica debe desarrollarse sobre la base de un profundo respeto a los derechos humanos, si eso está pasando hay que revisarlo para resolverlos”.

Al mismo tiempo destacó que para el FMLN el tema de seguridad pública ha sido uno de sus principales apuestas, y que eso incluye el tema de los centros penales.

La relatoría tomó como base al penal de máxima seguridad de Zacatecoluca, el centro penal de Quezaltepeque y el Centro de Readaptación de Menores Senderos de Libertad, en Cabañas. El informe oficial será presentado la próxima semana por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, a la cual pertenece la relatoría de Personas Privadas de Libertad de la OEA.

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