Norma Guevara de Ramirios.05 de Julio. Tomado de Diario Co Latino.
El tiempo es un valioso recurso no renovable que cuenta de modo determinante en las acciones de gobierno, sea este local, legislativo, de justicia o ejecutivo. En el tiempo aparecen imperativos imprevistos, en el tiempo mide la población el empeño y los logros de una gestión pública y por eso este recurso debe ser adecuadamente utilizado para realizar cambios que trasciendan, que den a las generaciones futuras, la certeza de que sus gobernantes dejaron huella positiva.
En nuestro país están cambiando muchas cosas a pesar de la resistencia y el obstáculo que los sectores más recalcitrantes pongan en el camino; se está dejando huella cuando se extiende la vacunación de niñas y niños; cuando se ubican las escuelas de mayor rezago en el rendimiento académico y se dirigen esfuerzos para dotarles de recursos tecnológicos y formación docente; se está cambiando cuando se forman agentes que deben brindarnos seguridad; pero en el campo de la democracia política electoral, se necesita acelerar el paso en cambios que aunque modestos, están llamados a asegurar la soberanía popular.
Los compromisos de gobierno y de la representación legislativa del FMLN establecen que buscamos profundizar la democracia, fortalecer la institucionalidad del Estado, y promover la más amplia participación de la ciudadanía; esto requiere asegurar la transparencia, la equidad de los procesos electorales y para ello, deben lograrse reformas legales y un mayor compromiso de las entidades relacionadas con la tutela de los derechos políticos de la población salvadoreña.
El elemento fundamental de nuestro sistema electoral, es el conjunto de personas mayores de 18 años, vivas, residentes en nuestro territorio, y para efectos del voto en el exterior la identificación adecuada de nuestros compatriotas en el exterior. Este elemento esencial del sistema al día de hoy enfrenta problemas que deben abordarse seriamente y resolverse. Estar en un Registro de Electores requiere tener documento de identidad vigente; esto se complica ahora que por primera vez debe renovarse el DUI, la diferencia entre personas con DUI vigente y el Registro Electoral será considerable, la derecha arenera buscará que la inercia lleve a dejar intacto el registro, con ausentes y fallecidos incluidos. Los vacíos legales en este campo, deben resolverse antes que llegue el término legal para el cierre de Registro Electoral que por ley ocurrirá, un año antes de las elecciones de 2012.
La forma de organizar las votaciones, es otro elemento de enorme importancia. ¿Seguirán los listados únicos como ha sido la tradición?, o ¿se organizarán los centros de votación en sectores territoriales para que la familia acuda junta a un mismo centro cercano a su vivienda? Esta decisión le corresponde tomarla al Tribunal Supremo Electoral; sería lamentable que el tiempo se consuma sin definición, cuando sólo faltan 18 meses para las elecciones, es preciso sí, la cooperación legislativa, financiera y política, es decir, que el voto residencial requiere de claridad del TSE y apoyo de todos.
Los escaños legislativos que correspondan a cada departamento, según nuestra Constitución deben estar en correspondencia con la población, en las pasadas elecciones el TSE se negó a reconocer la existencia de un nuevo censo de población realizado en Mayo de 2007, esta correspondencia de escaños y población; así como la determinación de regidores y regidoras que corresponde elegir en cada municipio, son responsabilidad de la Asamblea Legislativa y el Tribunal Supremo Electoral. Se requerirán reformas, al menos, al Artículo 13 del Código Electoral.
La forma de representación en los municipios está en discordia con el mandato constitucional, corregir esa falla que hace que con pocos votos logrados en un municipio, se pueda gobernar con un solo partido, requiere de reformar al menos dos artículos del Código Electoral, y a lo mejor otros del Código Municipal; pero sobre todo requiere que los partidos políticos con representación legislativa concluyamos con esta reforma fundamental para fortalecer la capacidad de trabajo entre personas de distinto partido. Este sería un gran paso para la democracia política salvadoreña.
Regular el financiamiento de partidos y campañas, la propaganda electoral, pasa por finalizar la Ley de Partidos en estudio de la Asamblea. Si estas reformas fortalecerán la transparencia y la democracia, ¿por qué demorar más?
Todavía es tiempo de fortalecer la democracia, dar su lugar a la soberanía popular impulsando cambios en materia electoral. Dese la Presidencia se anunció el interés en este campo, vendría, sería saludable un diálogo que permita acelerar el paso, los partidos, diputados y diputadas, magistrados del TSE, Presidencia de la República son piezas indispensables para ese cambio. Para evitar echar culpas, por el estancamiento, es mejor asumir este compromiso, hay que situar un paso adelante al país en materia electoral.
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