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2010/05/08

Tendencia Revolucionaria-Sobre el Oportunismo del FMLN- El Salvador

 Las opiniones que profesa la “Comisión Política” del FMLN les parecen, a ellos mismos, extraordinariamente complejas. Les hemos escuchado más de una vez acusar a los verdaderos revolucionarios de tener una idea demasiado simple del camino por donde marcha el mal llamado “Cambio”.


Por Martin Ignacio Diaz. 08 de Mayo. Tomado de Tendencia Revolucionaria.

Observador Juvenil/Kaos en la Red.


Inicio aclarando que rechazo categóricamente la opinión oficial del FMLN sobre la “nueva lucha social” y el papel que desempeña como el nuevo partido de la burguesía en ascenso. Les escribo sincera y enfáticamente como un Revolucionario Trotskista.
Las opiniones que profesa la “Comisión Política” del FMLN les parecen, a ellos mismos, extraordinariamente complejas. Les hemos escuchado más de una vez acusar a los verdaderos revolucionarios de tener una idea demasiado simple del camino por donde marcha el mal llamado “Cambio”. Y, sin embargo, dando la apariencia de complejidad -y gracias, quizá, a este defecto- las ideas de los “revolucionarios” se degeneran en un esquema extraordinariamente simple, accesible a la comprensión del pueblo organizado.
Cuando en el FMLN cada vez más se iban reforzando las contradicciones internas, surgio el espejismo de la fortaleza, por lo menos provisionalmente y esto a su vez hizo surgir una especie de fecha de caducidad para el mismo, en este momento el oportunismo, devorado por la impaciencia, los hizo buscar en torno suyo “nuevas” vías, “nuevos” medios de realización y buscaron “aliados”, buscaron al “caballo ganador”, hicieron pactos con Funes y con sectores de la oligarquía, y se inventaron un nombre para esta fórmula especial de acción para uso del neoliberalismo, la llamaron “Formula de la Esperanza”.
Pero al no encontrar más en la idea de que esa formula resulto exitosa, el oportunismo tanto del FMLN como el de Funes sigue buscando aliados, pues tienen la necesidad de ellos. El FMLN busca en la derecha y en la izquierda, y trata de retenerlos, de la misma forma Funes y sus amigos, aunque para los últimos esto es mucho mas fácil. La dirigencia del FMLN se dirige a “sus fieles” y los exhorta a mostrar la mayor compresión, hacen propia una victoria que no les corresponde, pues es una etapa necesaria de autocompación. Llaman a tener mucho tacto, y no se dan cuenta que sufren de una enfermedad que es la obsesión de la prudencia ante Funes y la Oligarquia y, en su furor, esa diregencia historica hiere a su propio partido.
El oportunismo de la “revolucionaria” dirigencia del FMLN quiere tener en cuenta una situación, o unas condiciones sociales que aún no están maduras. Quiere un “éxito” inmediato y quiere que el pueblo este a su lado, pero cuando algo sale mal, corre al gobierno, suplica y amenaza… Por último, reencuentra su lugar en el gobierno, en sus ministerios (ministerialismo), pero solamente para demostrar que, si bien su teoría no puede adelantar el proceso histórico, el método administrativo tampoco consigue mejores resultados.
Como dijo Trotsky “El oportunismo no sabe esperar, y por eso los grandes acontecimientos le parecen siempre inesperados, lo dejan atónito y lo arrastran en su torbellino y, al perder pie, lo mismo tiende a una orilla que a otra. Intenta resistir, pero en vano, y entonces se somete adoptando aires de satisfacción y moviendo los brazos para que parezca que sabe nadar, y gritando más fuerte que nadie… Una vez pasado el huracán, sube a la orilla, se sacude disgustado, se queja de dolor de cabeza y de reumatismo y, atormentado aún por el malestar de la borrachera, no ahorra las palabras crueles y acusa de “chiflados” a los verdaderos revolucionarios” y en efecto ese es el presagio que sufre el FMLN actualmente.
En fin, ahora como instrumento contrarevolucionario, su objetivo es criticarnos y desacreditarnos, por eso es necesario que existan los movimientos sociales y que obremos como entes pensantes, claramente revolucionarios bajo una sola linea. Sabemos que, la transformación que lleva a cabo ahora el régimen es un recambio burgués y no una revolución socialista; es un simple resultado del juego de la democracia burguesa.
Es inútil hablar de la nueva burguesía, disculpen quise decir que es inútil hablar del FMLN como de una fuerza revolucionaria, pues el resultado objetivo de la derrota electoral del partido ARENA y el ficticio triunfo popular, fue realmente crear las “condiciones normales” de la explotación capitalista, por lo menos por algún tiempo, y creo que todos estamos de acuerdo en este punto.
En tales condiciones, el resultado natural sería un entendimiento del FMLN y Funes con el antiguo régimen. Es una hecho que no se puede negar, pero está claro que un resultado semejante no se pudo presentar más que por el hecho mismo de un fracaso del FMLN, producido por su debilidad interna.
Ya los podemos ver bien, a esos que se dicen del pueblo, se inclinan a la derecha en las épocas de tranquilidad y oscilan hacia la izquierda cuando se aproxima la justa castigadora del pueblo. Quizá por eso creen tener un porvenir revolucionario.
Si la dirigencia del FMLN cree en la victoria de la “revolución” o admiten al menos la posibilidad de esta victoria, no podrán negar que, fuera del movimiento social, no hay, en nuestro país, otro pretendiente al poder revolucionario.
Quizá nuestro pueblo esté condenado a caer, en manos de traidores, para dejar el lugar a la burguesía. Quiero solamente dejar claro un punto: si el movimiento social, si el pueblo ha triunfado entre nosotros, como dice el FMLN y Funes, entonces, la victoria de ellos no seria posible sino como victoria del puelblo; dicho de otra manera, sería absolutamente imposible su victoria si no fuera así, por el pueblo.

Tendencia Revolucionaria El Salvador

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