Salvadoreños en el Mundo- La Juez bajo una Presión Mediática

 Escrito por Manuel García.09 de Abril.  Tomado de Salvadoreños en el Mundo.

La juez María Isabel Ponce está sentando un precedente al multar a La Prensa Gráfica por haber publicado la foto de Jonathan Alexander mientras éste le quitaba la vida a Carlos Garay, estudiante del INFRAMEN. La juez Ponce ha basado su decisión en la ley, ley aprobada por los diputados. Esta ley obliga a las autoridades y medios a proteger la identidad de los menores de edad. Esto incluye asesinos menores de 18 años. Jonathan Alexander tiene 17 años. Y aunque haya matado, extorsionado, y cometido cualquier salvajada, la ley le protege. No se puede buscar 9 patas al gato. La juez, esta vez, ha seguido la ley al pie de la letra. Ahora bien, son los diputados los que tienen que cambiar la ley para proteger a la gente honrada. Los jueces solamente interpretan las leyes. Pero en El Salvador, desgraciadamente, los diputados levantan la mano sin saber qué están aprobando.

Obviamente, existe corrupción en el sistema judicial de El Salvador. Cada año, el Departamento de Estado de Estados Unidos lo viene señalando. No se pueda ganar la guerra contra la delincuencia mientras los jueces favorecen a los criminales, ya sea porque están en la nómina de los mismos pandilleros o narcotraficantes. El sistema judicial salvadoreño se presta para que jueces sean fácilmente manipulados por tráfico de influencia. En tal caso, los jueces toman decisiones arbitrariamente. Sin embargo, este no es el caso cuando la juez Ponce decide multar a La Prensa Gráfica por publicar la imagen del angelito Jonathan Alexander.

Ojala que la juez María Isabel Ponce no se sienta intimidada. Existe gran presión mediática sobre este caso porque la credibilidad e independencia del sistema judicial está en tela de juicio. ¿Puede un juez decidir sobre un caso sin ser influenciado por la opinión pública? Los jueces deberían tener la capacidad para decidir por criterios propios, sin ser influenciados por la presión mediática.

La decisión de la juez Ponce de multar con $346 a La Prensa Gráfica, una suma simbólica, limitará el trabajo de los medios de informar a la población. El editor de un medio informativo necesita tomar decisiones al instante para competir en un ambiente cada día más saturado. El fotoperiodista de La Prensa Gráfica estaba haciendo su trabajo; el editor decidió que publicar la imagen tenía un valor intrínseco del que hacer periodístico. El trabajo de un periodista es informar, decir la verdad, aunque duela. La ley debe proteger al periodista que arriesga su vida con su cámara para decir la verdad a los salvadoreños.
Una imagen vale mil palabras, y esa imagen, la crueldad de un joven quitándole la vida a otro, a plena luz del día y de las cámaras, habla volúmenes sobre nuestra sociedad. Existen miles de jóvenes criminales como Jonathan Alexander que actúan sabiendo que la ley los respaldará. No culpemos a la juez Ponce por hacer su trabajo interpretando la ley. Deberíamos culpar a los políticos por no cambiar la ley.
Ahora bien, multar un medio informativo con $346, lo que equivale a 50 días de trabajo ganando el salario mínimo (a menos de 86 centavos la hora), por publicar una imagen de un criminal, aunque éste sea menor de edad, tampoco ayuda a despejar las dudas que se tiene sobre el sistema judicial salvadoreño. El sistema judicial salvadoreño tiene un problema de credibilidad. Basta con leer los comentarios de la gente en los periódicos sobre esta noticia. La mayoría de los lectores opinan que la juez Ponce no está haciendo su trabajo. La gente cree que los jueces están vendidos. Que en lugar de velar por los intereses de la gente honrada, los jueces favorecen a los criminales.
Y debo admitir, esta vez, que la gente se equivoca. La juez María Isabel Ponce está haciendo su trabajo. Ojala que los políticos hagan su trabajo para reformar la ley, para que los periodistas puedan hacer su trabajo de denunciar a los criminales, sean menores de edad o viejos, para que los salvadoreños podamos vivir en paz.

Salvadoreños en el Mundo: La Juez bajo una Presión Mediática